Me encantas

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Jennie al despertar, tomó en cuenta la posición en la que se encontraban, estaban demasiado juntas y seguían mirándose directamente a los ojos. Instantáneamente se alejó dándole la espalda a la fotógrafa, en cambio, Lisa soltó un leve quejido por el dolor en su brazo donde Jennie apoyaba su cabeza momentos antes, ambas se encontraban muy incomodas por lo sucedido, necesitaban algo con que olvidar ese suceso tan bochornoso, por lo que Jennie optó por una buena idea:

- ¿Quieres comer algo?

- Si -respondió Lisa de inmediato.

Se levantaron al mismo tiempo, pero cada una se dirigió primero a otro lugar de la casa antes.

Jennie entró antes que nada al baño, se apoyó en el lavabo y miró el soporte de cepillos, había uno más en el, uno de color amarillo, incluso había una pasta dental más. Boqueó ligeramente, agarró el suyo y aplicó pasta. Mientras se cepillaba, miró mas productos de cuidado facial y corporal encima de su lavabo, Lisa si que era más cuidadosa en sí misma que ella.

Lisa por su parte, se encontraba sentada detrás de una puerta, procesaba la idiotez que le había dicho a Jennie.

- Me encantas tanto... No. no, no -susurró de manera rápida-. Me-me encantas... -lloriqueó, poniendo una mano cerca de su boca-. Mierda, seguramente lo escuchó... -lo hizo otra vez, ahora poniendo su otra mano cerca de su oreja-. Me encantas... -se acercó un poco al mueble de al lado-. Me encantas... -recapacitó y se alejó al captar su alelamiento.

Suspiró frustrada, sintiendo temor y vergüenza por tal vez ser descubierta, tomó su cabeza entre sus manos y revolvió su cabello.

- Me encantas... -repitió para comprobar el tono en que lo había dicho-. No, no, no lo dije fuerte.

Miró por detrás de la puerta, poniendo su vista en la del baño, Jennie aún no salía por lo que podía continuar lloriqueando.

Se levantó y tomó su celular para marcar algún restaurante cercano a traerles el desayuno, por la manera en la que se encontraba decidió no cocinar esa mañana. Se sirvió una taza de café para esperar la comida y subirla al estudio de la azotea después.

Luego de un rato, todo estaba listo en el estudio, terminó de beber su taza de café, perdida en sus pensamientos, logró huir de ellos al escuchar la puerta abrirse. Jennie se mostraba ya bañada y con otra prenda limpia.

- ¿Ya comemos?

- He, si. siéntate, ven -le dio su desayuno que consistía en ramen en una temperatura excelente.

Jennie se sentó frente a ella, notando lo nerviosa que Lisa estaba, tanto que incluso casi come con los palillos al revés.

- Provecho

- Igual

Lisa pensaba que el desayuno sería tranquilo, hasta que escuchó susurrar a Jennie:

- Me encanta...

La fotógrafa sintió su alma abandonar su lindo cuerpo si alguien más se encontrara con ellas, podría jurar lo pálida que Lisa se encontraba.

- ¡Wow! Ese restaurante prepara muy bien esto, parece un lugar grandioso...

Lisa sintió su alma regresar.

- Me lo recomendaron, es muy bueno -interrumpió.

Jennie asintió, dando un bocado más.

- ¿Dormimos muy tarde anoche?

- No sé, creo que estaba muy cansada -cada vez que Lisa hablaba, sonaba más y más nerviosa.

Jennie quería saber más, ¿Por qué Lisa estaba ansiosa? ¿Hicieron algo malo? ¿Sabía ella también pero simplemente lo dejaba pasar? ¿Se sentía rara por qué amanecieron tan abrazadas y pegadas?

- Oye, ¿Y hacía mucho frío? -interrogó alzando la voz, no dejando comer en paz a Lisa.

- Si, estaba helada, casi muero de frío...

- Ya sé, no me podía calentar -se engañó así misma.

- E instintivamente buscamos nuestro calor...

- Como flores que buscan el sol...

- Instinto de supervivencia -culminó Lisa.

- Que bueno que no morimos congeladas...

Ambas chocaron las cinco, Jennie se mostraba feliz, Lisa aún algo dudosa, por lo que se arriesgó a preguntarle su tormento.

- Oye, Nini... Mientras dormías ¿No escuchaste algo muy raro?

- ¿Cómo qué? -la letrista siguió comiendo.

- Amm... No lo sé.

"Excelente Lalisa Manobal, vaya respuesta más tonta" se regañó a sí misma.

Se miraron seriamente, Jennie para recordar algo.

- Tenias flatulencias...

- ¿He?

Jennie sonrió de lado, cambiando su mirada a una de complicidad.

- Bueno... Si, es que cené y bebí mucho -Lisa aceptó algo vergonzoso, pero no tanto como la cagada que hizo.

Jennie rió levemente.

- Tranquila, solo estábamos tú y yo.

Lisa le mostró una sonrisa nerviosa, asintiendo.

"Menos mal, una preocupación menos"

"¿Me encantas tanto...?" "¿Era eso?"

Soundtrack #1 (Jenlisa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora