Una razón para vivir

Capitulo 22

A Mudo se le había ordenado ir de compras a la estación en tierra en los últimos días, por lo que estaba familiarizado con la ruta. Li Jinnian lo siguió y corrió a través del túnel a alta velocidad. En el camino, se encontró con algunos personas que bloquearon el camino porque pensaron que eran niños y mujeres. Li Jinnian los echó a todos, y no era hora de salir del trabajo, por lo que el viaje no tuvo obstáculos.

"Ya casi llegamos, solo doblemos esta esquina—"

"Sus ojos son realmente una monstruosidad. Si no sabes cómo usarlos, deberían ser desenterrados" La voz baja pero amenazante del hombre se acercó.

"Jefe, sea paciente, sea paciente"

Antes de que Mudo terminara de hablar, hubo una conversación entre Mo Duo y Li Bai desde la esquina.

Justo cuando los dos estaban a punto de cruzar la esquina, sus expresiones cambiaron y pisaron los frenos. No es de extrañar que no la haya llevado con él cuando salió hoy. ¡Resultó que fue a la estación!

Li Jinnian y Mudo inmediatamente se dieron la vuelta y corrieron de regreso. Afortunadamente, había un cruce de caminos no muy lejos, y los túneles del hormiguero se extienden en todas las direcciones. Cualquiera que sea el camino que tomes, puedes terminar en el lugar al que quieras ir. Eso sí, la premisa es que conozcas la ruta y de lo contrario, caerás en un laberinto como un misterio donde no podrás llegar a tu destino aunque mueras. Li Jinnian y Mudo no sabían en qué dirección irían el Jefe de Distrito y los demás, por lo que solo podían correr hacia el túnel en la dirección opuesta para esconderse con la condición previa de que él pudiera irse a casa.

Se escondieron, sus corazones latían como un trueno. Al escuchar el sonido de pasos acercándose, Li Bai dijo con una sonrisa: "Los dos ratoncitos corren muy rápido".

 La voz es Lin Chao, otra mano derecha de Mo duo.

Li Jinnian se sorprendió, ¡los encontraron! !

"¿Dónde está?

"Está demasiado ocupado", regañó Li Bai con una sonrisa, preguntándose si no vio al jefe corriendo hacia atrás.

Li Jinnian mencionó el corazón en su garganta y finalmente lo retrasó un poco, los encontraron, pero no se dieron cuenta de que eran Li Jinnian y Mudo. Pero todavía se sintió asustada cuando escuchó sus pasos acercándose, después de todo, incluso Li Bai y los demás podían verlos, y Mo Duo era mucho mejor que ellos, tal vez los reconocerían. Siguió pensando en su cabeza. Después de encontrar el boleto, se cambió especialmente con la ropa de la amante del padre de Mudo. Incluso si la nariz de Mo duo es tan sensible como la de un perro, el olor debe cubrirse en poco tiempo. Además, no hay otra forma de que Mordo descubra que es suyo de la nada.

Pensando en esto, su espalda estaba presionada contra la pared, sus manos estaban apretadas sobre su pecho y contuvo la respiración.

Los pasos se acercaban cada vez más, y pronto llegaron a un cruce de caminos, bajo la tensión de la espalda sudorosa de Li Jinnian, los escuchó girar hacia otro túnel. Pero ella todavía no se atrevía a relajarse, hasta que caminaron un poco más, Mudo la jaló, y ella corrió rápidamente detrás de el y entró en otro túnel.

En el momento en que pasaron por la intersección, el cabello largo de Li Jinnian pasó rápidamente en la oscuridad, como si se arrojara una fragancia tenue, Li Jinnian no lo notó, pero los pasos de Mo Duo se detuvieron de repente.

Mo duo giró la cabeza y miró hacia la intersección.

"¿Jefe? ¿Qué pasa?", Li Bai lo siguió y miró hacia atrás, preguntándose si solo eran los dos ratoncitos, ¿qué pasa?