𝐏𝐨𝐫 𝐮𝐧𝐚 𝐭𝐨𝐫𝐩𝐞𝐳𝐚. | 𝟗𝟏𝟏.

6.

𝐯 𝐢 | ¿𝐐𝐮é 𝐡𝐚𝐬 𝐡𝐞𝐜𝐡𝐨 𝐁𝐮𝐜𝐤?

Con sus manos en los bolsillos de su suéter delgado trata de que el frío no le afecte tanto mientras sonríe viendo a Buck de reojo y escucha maravillada una de sus anécdotas en el trabajo, caminan por el sendero de piedras, la luz de las farolas prendidas alumbrando sus pasos lentos que se acercaban a una banca alejada del centro del parque y de la gente.

Se sentaron uno al lado del otro riendo alegres por el momento.

—Sigo confundida porque tus amigos te hacían bulla por qué intentaras conseguir mi celular. — Mack lo miró y subiendo sus pies a la banca para acercar sus rodillas al pecho y abrazarlas con sus manos tratando de darse un poco de calor esperó  las palabras del rubio.

—Es una larga historia. — Respondió sonriendo de lado.

—Mmm, creo que tengo mucho tiempo. — Contestó divertida recostando su cabeza entre sus manos.

Buck rió y asintiendo empezó a hablar. —Hace mucho tiempo, cuando recién había empezado a trabajar era un poco... Idiota. — Entre cerró los ojos divertido viendo la sonrisa burlona de Mack.

Antes de que Mack tratará de decir algo se apresuró a hablar.

—Verás...  Antes era muy inmaduro e idiota, razón por la cual casi pierdo mi trabajo tres veces por mi irresponsabilidad, —hablo recordando las veces que Bobby lo regañaba. —¿Puedes creer que una vez utilice el camión de bomberos para llegar rápido a con una chica y tener sexo?

Mack soltó un jadeo de sorpresa y rió a carcajadas.

—Eso es ser un completo mujeriego e idiota, muy idiota.

—Lo sé, lo sé... hace mucho tiempo que no he vuelto a intentar algo con una chica, fue por eso que bromeaban, pues decían que ya no recordaba cómo hacerlo. — Buck rió y recargó sus antebrazos en sus muslos inclinándose dejando ver sus marcados brazos ante Mack que trató de no perderse en sus pensamientos pervertidos.

—Y... ¿Qué te hizo cambiar? — Lo vio a los ojos sonriendo curiosa.

—Pues, ¿recuerdas que te dije que amaba mi trabajo? — la miró mientras está asentía. — el hecho de que casi perdía mi trabajo me hizo abrir los ojos y darme cuenta de que lo más importante para mí era la estación 118, no miento cuando digo que no soy nada sin mi trabajo, — desvío la mirada sonriendo un poco melancólico, Mack lo miraba atentamente observando cada gesto. —Me dieron una oportunidad más y... después conocí a Abby... Ella me hizo cambiar algunas cosas de mí.

—¿Después de ella no volviste a ser un mujeriego idiota? — Deslizó sus piernas al suelo apoyando sus manos en la banca dejando caer los mechones de cabello suelto.

—Digamos que sí, bueno... — Volteó su cara viéndola con una sonrisa divertida. —En realidad deje de ser un mujeriego idiota cuando mi capitán casi me corre de la estación. — la risa de la chica hizo que se perdiera en su rostro.

Mack se de cuenta de eso y se queden viendo unos segundos solo sonriendo, el silencio cómodo entre ellos mientras solo pensaban uno del otro lo increíbles que se sentían.

Tratando de romper el silencio Mack desvía la mirada sintiendo se un poco nerviosa y recargando su espalda en el respaldo de la banca habla viendo el cielo que estaba con una que otra estrella.

—Debiste estar muy enamorado de Abby... ¿No? — Buck se enderezó ante tal pregunta y observando está vez el suelo reflexionó analizando las palabras de la chica.