Vida Duenderil ✨

Pedacitos de tristeza.

(Pueden leer el cap 23 de "Aburrimiento" de ar111l0v3 para saber el contexto de esta parte de la trama, ahora, comencemos!)

Yuki hablaba de cisnes, yo estaba distraída hasta que llegamos a casa, donde se oían unos ruidos. Fuimos cuidadosos, y logramos ver a..a Colorito, con una chica pelinegra y pálida en sus brazos, dormida.

C: Lo siento si te fallé, de verdad lo siento Carmen..

Comentaba llorando. Luego, la dejó en mi sillón y se fue por la ventana. CÓMO CHUCHA ENTRÓ A MI CASA?? Eso no importa. Carmen, Carmen..Es la hermana de Fabio! Le atiné cuando él corrió a abrazarla y dijo su nombre. Así que ella era Carmen, de la que tanto hablaba Fabio..es muy bonita. Me pregunto si tendrá ojos color vino como Fabio, o cómo sería su voz..eso lo veré en un rato, cuando despierte. Yuki la cargó hasta mi cama y la dejamos dormir. Cuando fui a guardar unas cosas a mi mueble, escuché unos maullidos.

A: Mierda, la comida de Cruella, olvidé comprarla! Veamos..

Abrí un portal, saqué una bolsa grande de comida para gatos, y la puse en su contenedor. Puse la comida en el recipiente de Cruella, y le cambié el agua.

A: Cruella, preciosa, a comer! No te tienes que esconder por ahora.

Decía con una voz dulce. Cruella salió de su escondite y comió rápido, tomó un poco de agua y maulló otra vez. Esto es raro, ella normalmente no maulla..La subí a mis brazos y le comencé a hacer cariño, hasta que alguien entró por la puerta y me vio de espaldas, volteé levemente mi cabeza, y era Fabio..recordé su fobia a los gatos, y le grité.

A: FABIO, FUERA!!

Me miró sorprendido, cerró la puerta delante de él, y escuché un sollozo.

A: Oh no..Cruella, debajo!

Cruella me comprendió y fue como un rayo a debajo de la cama. Luego yo salí de la habitación, dejando a Carmen dormir, pero en realidad ni sabía si la desperté.

A: Fabio, perdón..

Me miraba con lágrimas en los ojos.

A: No fue mi intención gritarte, tenía a Cruella en mis brazos, y sabía que te ibas a asustar mucho si la veías, tú sabes que jamás te gritaría así sin razón.

F: Oh..entiendo..

Se secó las lágrimas y yo le dí un besito en la mejilla, para calmarlo.

A: Ve al living, te voy a hacer un tecito con azúcar.

Asintió y me dejó sola, yo volví a mi cuarto, esperando a que Carmen despierte, para orientarla. En unos minutos, ella despertó, yo estaba dibujando en el escritorio del frente, volteé a verla, y nuestras miradas chocaron.

A: Uhm..Hola?

Carmen se asustó bastante, cayó de la cama y se alejó de mí, con una respiración muy agitada y sus ojos bien abiertos. Yo me alteré un poco, me arrodillé para poder mirarla, yo estaba a una distancia razonable.

A: Hey, todo está bien! Soy Akira, estás en mi casa. Lo siento si te asusté..no era mi intención, lo juro.

Me dí cuenta que sus ojos no eran color vino como yo pensaba, eran de un verde brillante, uno esmeralda, bastante bonito. Pero ella no me respondió, sólo me miraba.

A: Espera aquí, vuelvo altiro!

Me levanté y corrí hacia la cocina, y comencé a preparar algo. Fabio notó lo que estaba haciendo.

F: Aki, qué haces?

A: Uhm..una pequeña comida, para Carmen, despertó y..creo que me tiene miedo. Le gustan las galletas?

F: La verdad es que no lo sé.

A: Oh, entonces..le daré unas cuantas galletas.

Preparé un plato pequeño con una taza de té, y al lado, unas galletas de niza, esas que tienen azúcar. Tomé todo y subí a mi cuarto, entré, y le dejé la comida en mi escritorio.

A: Quizás tengas miedo, así que te hice un té con galletas, puedes quedarte en mi cuarto hasta que te sientas más cómoda, no necesitas sentirte presionada a salir. Espero que lo disfrutes!

Le dí una sonrisa y salí de la habitación, ahora yendo a la cocina a hacer el té que le prometí a Fabio. Cuando lo terminé, me senté con él a tomarlo.

A: Tu hermana tiene bonitos ojos, son muy brillantes! Aunque ella no me habló..no me molesta, de hecho, sólo esperaré a que se sienta mejor. No sé cómo Colorito la trajo hasta aquí, pero debe ser una buena razón, verdad?

F: no habla con nadie, ni siquiera conmigo, asi que no esperes que se comunique mucho contigo, pero no le hables tanto, se puede incomodar quizás.

A: Oh..entiendo. entonces sólo la dejaré tranquila.

F: Sí, quizás es lo mejor.

Terminamos de tomar té y lavé las tazas, luego me fui al baño a pensar en paz.

¿Por qué habrá llegado aquí? ¿Será mala o buena? ¿Por qué se asustó tanto? Tengo muchas preguntas, pero es mejor guardármelas, no creo que se sienta cómoda respondiendo.

Luego volví a la sala, saqué una libreta y me puse a dibujar unos bocetos de lo que ví estos últimos días. Había hecho un boceto de Coto el día que...el día que pasó "eso", no me gustó recordar lo que había pasado, saqué la hoja, la arrugué y la tiré al piso, me distraje haciendo unos dibujos de Cruella, prefería estar sola, pero Fabio se sentó a mi lado.

F: ¿Y eso?

A: Intento distraerme dibujando, porque prefiero no volver a mi pieza, Yuki, Kar y Hukarere salieron, y me aburro.

F: ¿Podemos hacer algo?

A: ¿Chape quizás?

F: Estaba pensando en eso.

A: Bueno, entonces ven aquí.

Solté la libreta y agarré a Fabio de la polera para comenzar a besarlo, me correspondía de vuelta, y era bastante romanticón. Terminamos en unos minutos, también marcas de mi labial quedaron en su cara.

A: Ve a lavarte la cara, pareciera que fueras un actor al que se lo besó una acrtiz súper bonita!

F: ¿Entonces tú eres la actriz?

Se fue al baño a lavarse la cara mientras yo me ponía como un tomate.

A: ...Douché.

En la noche saqué un saco de dormir y me fui a mirar las estrellas, sola, quedándome dormida ahí.

No sé lo que va a pasar el día siguiente, es como una caja de bombones sorpresa,

Nunca sabes lo que te va a tocar, algo malo, o algo bueno tal vez, todo es una sorpresa, por algo se llama así, ¿No?