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leyó la nota detenidamente fijándose si no le faltaba nada .
miraba los estantes buscando exactamente cada cosa que se veía anotada en la lista.
" lista de compras • shampoo y acondicionador ✓ • fideos largos y moñitos ✓ • capelettinis ✓ • toallitas femeninas ✓ • papel higiénico ✓ • harina ✓ • galletas saladas ✓ • salchichas ✓ • galletas surtidas dulces ✓ • 2 leches en caja
pd : si te sobra güita comprate lo que vos quieras ivi, ocultalo atras de la lacena, pero compra una chocolatada y mostrale la otra nota que te dí para hacerle pensar a tu papá que te la pedí si te sobraba plata . Atte : Mamá "
suspiró hondo y fue a la siguiente heladera. observó detenidamente y buscó la marca de " La serenísima " entre tantas. después de un rato, miró hacia atrás suyo y se dió cuenta de que la leche estaba ahí.. olvidaba que la leche en caja en los supermercados nunca estaban en las heladeras, a menos que sea en botella. pero su vieja le decía siempre que comprara en caja porque en sache se vencía rápido.
sacó su celular y empezó a sacar cuenta de todo lo que llevaba para su casa. le habían dado quince lucas y solo ocupaba siete con seiscientos ochenta. sonrió ante poder ver que podía comprarse más cosas, aunque siempre pasaba porque su vieja le daba más plata de la que debería llevar. entendía porque trabaja tanto, aunque solo le diera para gastos en el super y otro aparte para sus cosas personales, como tipo mesada.
fue hacia el pasillo en donde estaban las galletas y buscó unas pepitos, unas oreos y después fue a buscar helado y unas cuantas latas de speed. sabía que victoria no iba a retarlo por eso así que le compró unas galletas a ella también y unas latas de gaseosa para ella.
cuando estaba por las heladeras, quiso abrir la puerta pero justo cuando iba a abrirla sintió la mano de un desconocido encima de la de él. se giró lentamente y observó que era una chica baja con mechones rubios y la raíz de su pelo totalmente negra. se sonrojó de lo avergonzado que estaba y rápidamente comenzó a disculparse.
— perdóname ! —
— no te preocupes... soy sami y t-..vos? —
corrigió rápidamente
— ah ? —
quedó quieto por unos momentos al escuchar su voz, con un acento algo peculiar y un argento forzado. la chica se presentaba con él.
— s- soy Iván.. un gusto sami, perdóname por lo de ahora —
