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Jisoo había llegado del trabajo algo cansada y un poco tarde, ya que había una alumna que no podía llegar a las notas altas que necesitaba en la nueva canción que les estaba enseñando y tuvo que quedarse un tiempo extra para enseñarle como debía hacerlo, después de todo era su deber que todos sus alumnos lo hicieran excelente ya que de eso también dependía su reputación como profesora, debido al cansancio y un poco de estrés olvidó comprar la cena, estaba tan apresurada por llegar a casa que no tuvo tiempo de pensar en eso, su retraso le hizo olvidar que cada día había prometido traer la comida a casa.

Ella finalmente llegó, dejó sus zapatos en la entrada, su abrigo en el perchero y estirando un poco la espalda para aliviar el dolor del cansancio caminó con dirección a la mesa, fue entonces que recordó que había olvidado la cena, sin embargo parecía como si Lisa ya se hubiese ido a dormir, puesto que todas las luces estaban apagadas y solo se podían ver las cosas gracias a la luz de la luna que entraba por las ventanas de la cocina, Jisoo caminó hacia su habitación para ver si ahí se encontraba Lisa, y sí, ella estaba cubierta con la sábada de la cama y mantenía los ojos cerrados junto a una respiración bastante relajada.

Jisoo se sentía algo intranquila, no sabía si Lisa había cenado o si por esperar la cena se quedó dormida, así que Jisoo intentó despertarla con caricias en el cabello, pero esto parecía no estar funcionando, así que acarició sus mejillas notando a Lisa sobresaltarse, cosa que había preocupado a Jisoo por lo cual alejó su mano rápidamente notando como la menor abría los ojos de manera asustada.

-Tranquila, soy yo- Jisoo la calmó saludando con la mano.

-Jisoo... Te extrañé- Lisa habló con algo de tristeza en su voz y la mayor no entendió a que se debía ese tono.

-¿Está todo bien?-

La tailandesa simplemente asintió y acercó a Jisoo para abrazarla.

Ella tenia miedo de que Jisoo no volviera, mientras Jisoo se había retrasado, en su cabeza no dejaban de pasar las escenas en las que había vivido lo mismo con su pareja anterior, ese día que Jungkook se había retrasado, el día que sintió un perfume diferente en él, un perfume femenino y ese mismo día que susurró otro nombre mientras dormía, definitivamente eso había dolido y las marcas que esos acontecimientos habían dejado en ella no serían fáciles de desaparecer, ella había vivido mucho dolor por tanto tiempo que la felicidad que ahora experimentaba le parecía irreal y le hacía creer que en cualquier momento eso podría acabar.

Otra vez.

Entonces sin quererlo un sollozo salió de ella mientras aún mantenía a Jisoo abrazada.

Jisoo se alarmó, no sabía porqué Lisa lloraba y se sentía tan culpable al creer que probablemente se debía a su retraso.

-¿Segura que estás bien?- Jisoo insistió acariciando su espalda.

-Si... Solamente te extrañé mucho- Ella continuó llorando mientras se aferraba a Jisoo.

Jisoo era tan diferente a su esposo, ella en realidad mostraba su preocupación y la ponía como su centro de atención.

Lisa se sentía como una reina cuando Jisoo estaba a su lado y definitivamente no pudo evitar sentirse orgullosa de ser la única que tenía la atención de la coreana cuando sintió el olor único del perfume de Jisoo en ese abrazo, a pesar de haber pasado tantas horas, ella seguía oliendo bien, o tal vez lo encantada que Lisa se sentía por ella la hacía pensar de esa manera, pero lo más importante de todo era que Jisoo olía solamente a ella, a nadie más.

-¿Estás mejor?- La mayor preguntó sin dejar de acariciar la espalda de Lisa cuando notó que esta dejaba de llorar.

-Si- Lisa respondió un poco más tranquila.

-No deberías ir a dormir sin cenar, recuerda cuidar de nuestro embarazo- Jisoo le sonrió -Olvidé traer la cena, pero puedo prepararte algo, así que, ¿Por qué no me esperas en la mesa?-

-No será necesario, preparé la cena cuando supuse que te habías retrasado así que terminé cenando antes, pero puedo ir a acompañarte si quieres- La menor ofreció levantándose de la cama.

Jisoo sonrió, Lisa era demasiado especial para ella.

Así que con esa misma sonrisa caminó hasta el comedor siguiendo a Lisa, la cena a su lado fué relajante, escuchar a la menor contarle las cosas mas mínimas que habían pasado en su día la hacía sentir feliz, era lindo escuchar la voz de Lisa hablarle de lo que sea.

Mientras Jisoo comía notó que Lisa no había quitado las semillitas del tomate, ella sonrió, detestaba dejar las semillas en el tomate, sin embargo no iba a decir nada, Lisa se ocupó en hacer su cena y Jisoo sabía que ella sola podía quitar esas semillas, así que con una sonrisa continuó escuchando lo que Lisa le decía mientras quitaba aquellas semillas de su tomate.

Fue un rato divertido y agradable al lado de Lisa, cuando la cena terminó, la tailandesa se ofreció a lavar los platos que Jisoo había usado, sin embargo Jisoo no se lo permitió alegando que debía hacer el menor esfuerzo posible para cuidar el embarazo de ambas, era su única forma para convencerla de todo, así que Lisa resignada esperó a que Jisoo terminase de lavar sus trastes para finalmente ir juntas a la habitación.

Después de haberse preparado para dormir finalmente descansarían, o al menos eso creía Jisoo, pues las luces ya estaban apagadas y ambas yacían acostadas cuando de prontó sintió la mano de Lisa jugar con el borde de su pantalón de pijama.

Ella se sobresaltó, pero simplemente tomó la mano de Lisa y la apartó de ahí escuchando un bufido por parte de esta.

Cerró los ojos nuevamente para intentar dormir cuando sintió la mano de Lisa intentar adentrarse aún más rápido en sus pantalones, afortunadamente Jisoo tomó su mano a tiempo y la volvió a apartar.

-Que no- La mayor regañó suavemente a Lisa.

-Pero Rosé dijo que no era malo hacerlo embarazada.-

-Lo sé, pero quiero cuidarte lo más que se pueda.-

-Llevas mucho tiempo sin sexo, no es justo para tí que debas estar en abstinencia por mí- Lisa intentó convencerla.

-Pero lo hago por tu bien- Jisoo insistió.

-¿Segura? ¿O es que acaso no te gusta mi cuerpo de embarazada?- La menor intentó persuadirla.

-No vas a manipularme.-

-Ay vamos, además, Rosé te pidió una muestra de semen- Lisa recordó, eso parecía un buen argumento -Yo puedo ayudarte a conseguirlo- Volvió a pasar su mano por el abdomen de Jisoo.

Entonces esta lo pensó por un momento, aquello era para las pruebas que debía hacerse y no ponía en riesgo el embarazo de Lisa, había sido un buen argumento, así que después de unos segundos de pensarlo asintió ante la propuesta de Lisa notando como esta se levantaba en busca del fraquito para la muestra seminal.

Lisa encendió la luz y sacó aquel frasquito de la bolsa notando como Jisoo se sentaba en la cama para después ella sentarse a su lado.

Jisoo se levantó para bajar un poco sus pantalones y volvió a sentarse en la cama revelando aquel trozo de carne que Lisa había anhelado tanto últimamente.

Y sin más espera la menor tomó entre sus manos el pene de Jisoo.

Al fin lo había conseguido y a pesar de lo que Jisoo dijese ella sabía que la noche apenas comenzaba.






Estéril / Lisoo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora