Ella no esta

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Jadee al ver tremenda bofetada, Bill y Georg tomaron a Tom para apartarlo, Tom estaba demasiado molesto, Miranda tenía la cara volteada de tremendo golpe.

– Tom basta... sal de aquí – ordenó Bill

Miranda se incorporó y vi que su labio estaba sangrando, Tom molesto salió de la habitación, Gustav se acerco a Miranda para ayudarla.

Yo en verdad estaba molesta con Miranda pero más con Tom, apreté mis labios y salí de la habitación buscando a Tom y lo encontré inclinado en la barra de la cocina mientras bebía algo.

– ¿Que carajo te pasa? – le grite molesta y él me miro que hasta me daba miedo esa mirada – ¿Quien te crees? Entiendo tú enojo Tom... pero, ella está embarazada e independientemente de que esté embarazada o no, no debiste golpearla – le grite aún más molesta

– No te metas Jade – respondió tranquilo y siguió bebiendo

Me acerque a él, le quite el vaso y lo avente, escuche como el vaso se estrellaba y Tom se ponía firme apretando la mandíbula.

– Escúchame bien Kaulitz, que sea la primera y última vez que golpeas a una mujer en tú vida ¿entendiste? – volví a decirle enojada

– Ve a preparar tú maleta Jade, nos iremos mañana temprano... cambio de planes – dijo entre dientes

Sabía que Tom estaba molesto, todos lo estábamos antes de subir las escaleras vi que venía bajando Miranda con una maleta y con su labio con un poco de sangre seca. Me miro mal y salió de la casa.

Ya eran las 8 de la noche así que decidí ir a comprar unas cosas para la mudanza. Tome las llaves del coche de Cedric y salí sin que nadie se diera cuenta. Todos estaban la alberca y Tom estaba encerrado en su habitación.

Tom

Estaba encerrado nunca había peleado así con Jade, me sentía mal por eso pero también estaba demasiado molesto con Miranda nos había puesto en peligro, me mintió sobre el bebé y yo odio las mentiras. Estaba recostado escuchando las risas de los chicos que estaban en la alberca, vi la hora y eran 11 de noche.

La cabeza y el remordimiento me consumían me levante de la cama, pase mis manos por mi cara y fui hacia la habitación de Jade a pedirle disculpas.

– Jade... – llame – Jade, quiero hablar contigo ¿podemos hacerlo? – insisti

Jade claramente no estaba con los chicos, era obvio que tenía que estar aquí dentro. Me desespere al ver que no abría y entre.

Su habitación estaba desordenada, tenía algunas maletas ya listas pero tenía una en la cama con la ropa a un lado y ella no se veía por ninguna parte. Entre al baño e igual no estaba. Baje de inmediato y salí con los chicos

– ¿Han visto a Jade? – pregunte

– Debe estar en su habitación – respondió Meghan

– No, no lo está – asegure

– Bromeas ¿no? – salió Babi de la alberca y se enredo en una toalla. Yo negué con la cabeza

Todos salieron de la alberca y entraron a la casa, Meghan fue asegurarse que no estuviera en su recamara.

– ¿Donde carajos esta? – pregunto Meghan que estaba en la cocina

– Em... chicos, las llaves... las llaves de mi coche no están – dijo Cedric entrando a la cocina

Mierda, Jade había salido sin ninguno de nosotro y eso la ponía más en peligro. Me pasé las manos por la cara y ya iba a salir cuando sonó el teléfono de la casa.

– ¿Si...? – respondió Babi, se quito el teléfono y me miró – Tom, es para ti. –

– ¿Para mi? – la mire extrañado y tome el teléfono – Habla Tom ¿que quieres? –

– Hola mi querido Tom... ¿me recuerdas? – era obvio que era él – mi chica me contó lo que pasó en tú casa y eso no es manera de tratar a una mujer ¿o si? Así que por haber cometido ese error robe a la tuya... Y mira, mejor ni la busques y reza para que no me haga encabronar porque le volaré la cabeza si eso hace. Adiós Tom –

Mire a los chicos y ellos me miraban confundidos.

– Derek tiene a Jade – balbucee

Todos nos miramos unos a otros, no entendíamos como esto paso... Derek tenía a Jade, no sabíamos ni donde estaba, ni si quiera por donde buscar. Todo esto es mi culpa.

(...)

Jade

Estaba de compras, entre al coche y sentí una presión en la cabeza, un arma...

– Mira a quien tenemos aquí, la pequeña Jade – reconocia esa voz – sabes, Miranda me contó del incidente de hace rato con Tom y en verdad estoy molesto con él

– ¿Como entraste al coche? – pregunte asustada, no quería moverme. Sentía que si hacía un moviendo brusco me dispararía

– La pregunta es ¿que tanto le importarias a Tom? – puso un pañuelo obstruyendo mi boca y nariz y comencé a dormirme.

No se cuanto tiempo dormi, solo se que al despertar estaba atada a una silla de pies y de manos con una cinta en la boca, el cuarto estaba oscuro las cuerdas estaban demasiado apretadas.

Trataba de enfocar haber si veía algo pero todo era absolutamente negro, escuche una risita.

– Veo que por fin despertaste – dijo una voz y se encendió una pequeña lámpara era él — me da gusto que estés despierta – dijo Derek con una sonrisa en el rostro – Espero te hayas despedido de Tom porque no lo volverás a ver –

Tenía miedo, no se en que momento comencé a tenerle miedo a mi propio hermano.  Se acerco a mi y yo solo pude aferrarme a la silla, me quito lentamente la cinta de la boca

– Eres un mal nacido ¿como te atreves a hacerle esto a tú hermana? – chille

– pffff ¿hermana? .... no me hagas reír – se puso tan cerca de mi que pude ver sus perfectos dientes blancos y tus ojos azules a la perfección – Tú no eres mi hermana – soltó con una sonrisa y se alejo

– ¿Que dices? –

– Jade tú no eres mi hermana, mi papá se acostó con la sirvienta de la casa y tú naciste a raíz de eso, mamá obviamente no quería que se enteraran de ese alboroto así que mamá asesino a tú madre y tuvimos que huir de ahí y así fue como llegamos a Alemania – soltó – y pues a mis papás les tocó el karma de morir pero, tú no eres mi hermana. Ni si quiera Harry lo era, al menos hijo de mi papá no lo fue, él fue hijo de una aventura de mi madre.

– Mientes – escupi

Se acerco a mi y puso sus mano en mis mejillas aprentandolas – ¿Crees que miento? ¿Por qué crees que no me dolió haber matado a Harry y por qué crees que te vendi con Román? No me importan, ni tú ni él... – dijo y me soltó

– Matame entonces... – chille

– Claro que lo haré pero, primero te haré sufrir – tomo una navaja de lo que al parecer era un mueble – me voy a divertir mucho contigo – dio una sonrisa sádica.

– No, no .... ni te atrevas. Tom te va a matar si se entera que me hiciste daño – suplique

– ¿Tom? Primero te mueres tú y después él – sonrió

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antes de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora