¡Cómo has podido! verdades ocultas

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México se acercó corriendo, y ella también, justo cuando se iban a chocar, ella se hizo a un lado y fue hacia España.

Lo agarro de la barbilla y la echo hacia arriba
- Cariño, estás bien - dijo mientras lo observaba detalladamente, todos los países hispanoamericanos se quedaron paralizados al ver a ese par abrazándose pero no dijeron nada - no te han hecho nada verdad - España miró hacia el suelo, entonces Azteca lo entendió todo, eran ellos los que le estaban haciendo cosas a España - por que le estáis pegando, que os pasa por la cabeza - dijo muy sería y se le notaba un poco decepcionada, refiriéndose a los latinos.

- Cariño, no pasa nada - dijo España - por favor, no les hagas nada, recuerda que algunos son tus hijos.

Azteca respiró hondo: - si, tienes razón - volvió a abrazar a si querido español.

- Pero por qué os abrazáis, si se supone que el te mató, además mató a tu gente, y te estuvo maltrato - dijo México alterado por lo que estaba pasando.

- Uno - dijo Azteca - es mi pareja y yo haré con el lo que yo quiera - dijo dejando a todos menos a España perplejos - dos, el no me hizo nada de eso, ese fue su padre - eso dejos más confundido a todos, pero aún así, México seguía debatiendo todo.

- Pero como que es tu pareja! - gritó - y, como que su padre!

- Pues sí - siguió España - mi padre, Imperio español, fue quien hizo todas esas cosas.

- Cuando llegó el imperio - siguió diciendo Azteca - ambos teníamos aproximadamente treinta años, yo ya estaba al cargo del país es ese tiempo. Entonces llegaron tres barcos. Vi como se bajaban todas esas personas de allí, pero el que más me llamó la atención fue España, pues vi que además de ser un país, se parecía mucho a mi, en edad y todo eso.

- Yo me separé del grupo, estaba arto de como me trataban y todo eso, encontré un lago y me senté allí, entonces fue cuando apareció Azteca, nos logramos comunicar de una manera muy extraña, pero nos entendíamos, y eso era lo importante - dijo el español

- Entonces empezamos a vernos muy amenudo, hasta que Imperio español nos descubrió

- y mi padre me obligó a acercarme a ella, para poder hacerle daño y tener el poder del lugar, al día siguiente pues, nos volvimos a encontrar, se lo conté mezclando un poco de ambos idiomas y algún que otro garabato en el suelo.

- así buscamos a una persona, más o menos parecida a mí y supuestamente me mató, pero en verdad no ocurrió eso como podéis observar.

- y entonces tú eres como nuestro hermano? - dijo Colombia

- Mas o menos, pero no del todo, recordad que sois 'adoptados' si así se puedo decir - dijo España

- Bueno, y que pasó con Imperio - preguntó Argentina

- Pues, después de vuestras independencias, murió, pero decidí dejarlo como si él fuera yo. - contestó simple España.

Nadie dijo nada, pues es su decisión y cada uno siguió con lo suyo