×wicked games×

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El sobretodo de pana abrigaba pero hasta cierto punto, las medias largas y los zapatos dejaban entrar el fresco. Con el viento algunos mechones de mi pelo se quedaban pegados a mis labios con el gloss sabor a frutilla que a Pablo tanto le gustaba, a veces me agarraba de la cara y pasaba su lengua sobre mis labios para saborearse, en esos instantes más que molestarme terminaba calentandome cuál pava desencadenando un "rapidito" en dónde sea, sillón, cocina, cama, daba lo mismo. 

Mis zapatos dejaban un ruidito molesto por el piso, sonreí al portero que bien en su diario estaba metido, en el ascensor miraba mi pelo con algunas ondas y corregía el maquillaje, lo tenía bien ensayado, las palabras y hasta podía llegar a intuir en cómo iba a terminar todo.

Hace unos días atrás mientras veía la serie "Modern Family" una escena me dio la bendita idea en la que me meti, donde Claire y Phil en su aniversario jugaban a esos cambios de roles, lejos de la comedia que me parecía increíble, pensé "¿Por qué no?", algo divertido, está vez sin avisarle a Pablo para saber que tanto se prendía.

Siempre le traía nuevas cosas a la relación, el riocuartense no era muy de usar para esos momentos el celu y demás, por lo que lo incursione con las fotos que se ven una sola vez en wpp, las nudes, sus favoritas, y el sexting, pero siempre fue más dado con las llamadas, cuando nos necesitábamos y la distancia nos separaba, él se quedaba escuchandome respirar agitada mientras me relataba todo lo que quería hacerme, con su canto cordobés oírlo decir "te pienso cojer tan fuerte, agarrarte y no soltarte más" poniendo su voz más ronca me dejaba débil.

También incluía de vez en cuando el vibrador en algunas oportunidades, tampoco era un cavernícola, pero Pablo era más a lo bifes, y dios, de que bifes se trataba, era duro en agarrarme, no le molestaba mis quejidos si me agarraba un poco brusco "bien que te gusta pendeja" me solía decir entredientes, no me podía quejar en el sexo, siempre siempre me dejaba satisfecha, pero me gustaba agregarle mis cosas cada tanto. 

Me paré frente a la puerta y toque el timbre, era la primera vez que me ponía nerviosa al verlo, escuché las llaves y sentí que el corazón iba a desembocar por completo por mi boca. 

-Hola amor…qué raro no me llamaste, te quedas en el sillón un minutito que tengo a Lío en el teléfono que estamos arreglando unas cosas - con un beso rápido en los labios y hablando entre susurros me dejó sola en el living, con los zapatos fui caminando hasta llegar a él que se encontraba en su intento de oficina, que más bien era una habitación con una biblioteca que contenía no sólo sus libros favoritos sino también de autores juveniles que sus hijos compraban, algunas fotos y reconocimientos por su gran trayectoria futbolística, un escritorio con una computadora que sacaba lo peor del escorpiano  

-okey, si dale eso lo vamos viendo, gringo te dejo que está __ acá en casa y si me ve con el celu me mata…¿qué? cállate que a vos también te tienen cortito…Ja….dale si chau chau- estaba sentado de espaldas a la puerta pero los tacones me delataron, girando su silla quedó mirándome, apoyada sobre marco de la puerta, le guiñe el ojo

-Y ese tapado? ¿Hace mucho frío afuera? Viste que acá prendo todo y no me doy cuenta del clima… - más entrecasa no podría estar, un joggin gris con una remera blanca, siempre lo cargaba de que la usaba tanto que un día se la iba a esconder, "no creo que te guste que ande por la vida desnudo, no?" Jactándose divertido. 

-Hace frío pero acá me voy calentando de a poco…si la calefacción, algo me dijo tu novia de eso- comenté divertida mientras me acercaba a él 

-¿Mi novia?- parecía no entenderlo, con un gesto extrañado se queda mirándome, me acerco lo suficiente para susurrarle en el oído "juguemos un poco…hoy no soy nada tuyo", en un click cayó por completo en mi pedido sonriendo juguetón, mirándome de arriba abajo cuál escaneo, me tomo de la mano llevándome hasta la cocina

° One Shots ° - Scaloni - AimarWhere stories live. Discover now