Mírame ┃ JENLISA

6: No puedo dormir

Un par de días más tarde, Lisa estaba de regreso y Jennie la acompañó a correr por la mañana. No se lo dijo a Lisa, pero siguió corriendo durante su ausencia. Le gustaba como le hacía sentir. Se sentía con más energía y le gustaría trabajar su resistencia para no tener que seguir retrasando a Lisa, por mucho que la otra chica le dijera que no pasaba nada.

" ¿Y qué tal la playa?"

"Hermosa. Cálida. No estuve mucho tiempo, pero la disfruté. Me gustó volver a ver a Seulgi".

"Voy a tener que conocer a esa chica."

"Curiosamente, ella dice lo mismo de ti".

Jennie sintió una punzada de emoción. "Así que le has hablado de mí".

"Que no se te suba a la cabeza, Jennie. Pero sí, puede que le haya hablado de ti".

"¿Y qué le dijiste de mí?".

"Le dije que tengo una vecina insoportable que insiste en salir a correr conmigo por mucho que me retrase".

"Ouch."

"Puede que también le dijera que eres muy hermosa y bastante genial".

"¿Y luego exigió ver cómo era yo?"

"Sí. Por eso te pedí la foto".

"¿Y cuál fue su respuesta?" Jennie sabía que jugaba con fuego. Era evidente que estaba aprovechándose, pero no le importaba. Seulgi era alguien obviamente importante para Lisa, así que era importante que causara una buena impresión con ella.

"Dice que estas bien."

"¿Sólo bien? Joder, sabía que tenía que haber enviado una foto mejor".

Lisa le sonrió. "Vale, no dijo eso. Pero me niego a decirte su respuesta exacta. Algo me dice que solo buscas cumplidos. Me niego a darte lo que quieres".

Jennie se sintió juguetona. Y aterradoramente atrevida. "Qué curioso, el otro día no parecías negarte a darme lo que quería".

No podía creer lo que había dicho. Rara vez hablaban de lo que hacían en sus dormitorios. Era una especie de regla implícita, pero Jennie estaba muy excitada por tanto coqueteo, así que se arriesgó. Y en lugar de esperar una respuesta, echó a correr delante de Lisa, decidida a llegar antes que ella a casa.

La carrera estaba muy reñida y Jennie sentía que las piernas empezaban a fallarle, pero siguió adelante, negándose a reducir la velocidad hasta llegar a la entrada de su casa. Llegó primera por una fracción de segundo y disfrutó mucho de la cara de asombro de Lisa. Se quedaron de pie, con las manos en las rodillas, intentando recuperar el aliento.

" Imposible ". Lisa estaba claramente en negación.

"No. No es imposible. Ha ocurrido realmente". A Jennie le gustaba mucho presumir.

Lisa negó con la cabeza. "Tenías ventaja".

"TÚ tienes años de entrenamiento. De verdad, esperaba más de ti".

Si no fuera por la sonrisa que intentaba disimular, Lisa habría parecido estar echando humo. Jennie observó cómo la castaña daba unos pasos más para acercarse a ella. Por fin era capaz de regular su respiración mientras Jennie seguía jadeando con bastante fuerza.

"Jennie".

"¿Sí?"

Vio cómo Lisa movía los pies y miraba al suelo. Era realmente adorable.

Lisa se aclaró la garganta. " De verdad que he disfrutado de nuestras carreras".

" Yo también."

Se aclaró la garganta de nuevo. "Y me gustaría tal vez preguntarte si estarías disponible para salir conmigo de nuevo en una actividad no relacionada con el ejercicio."