La lluvia caía fuertemente seguido de los ruidosos relámpagos que caía desde el cielo.Una pequeña azabache se despertó abrumada por el escándalo de aquella tormenta, quería ir a la habitación de sus padres solo para poder dormir tranquila en los brazos de su madre.
Aún así trato de resistir y volvió a cerrar sus ojos.
Más no consiguió hacerlo, aun podía recordar la pesadilla que tuvo, estaban en un lugar oscuro donde no había nada ni nadie, llamaba a sus padres pero estos no contestaban.
Caminaba sin un rumbo fijo, hasta que los vió.
El cuerpo muerto sin vída de sus padres, empezó a llamarlos y gritar sus nombres, tratando de despertarlos.
Pero nada funcionaba.
Sus cuerpos estaban fríos y sus pupilas oscuras y sin brillo.
Sarada negó con la cabeza tratando de alejar esos pensamientos, no quería molestar a sus padres pero los necesitaba cerca, necesitaba saber que están bien.
La puerta de la habitación se abrió, haciendo que la pequeña se asustara un poco, así que se tapó con las sábanas hasta la cabeza.
- Sarada- la melodiosa voz de su mamá, hizo que la niña se quitará un poco la sábana para mirar hacia la puerta, en donde se encontraba Sakura- ¿Estas despierta?.
- si mami- respondió ella con un poco de vergüenza.
- no podías dormí cierto.
Sarada asintió con la cabeza, una sonrisa apareció en los labios de la pelirosa, quien se acercó a pasos lentos hacia la cama de su pequeña, donde se acostó con su niña.
- ¿Tú tampoco podías dormir?- pregunto Sarada, sintiendose protegida por los brazos de su madre.
- no, tuve el presentimiento de que no lograrias dormir con esta tormenta- comento acariciando el cabello de la azabache- y parece que tuve razón.
- tuve una horrible pesadilla mami.
- ¿Enserio?, ¿De que trataba esa pesadilla?.
- tu y papá estaban muertos- susurro ella sintiendo un fuerte dolor en su pequeño pecho- y me dejaban sola.
Recordar aquella pesadilla le daban ganas de romper en llanto, más se contuvo.
Sakura abrazo más a su pequeño y beso su sien de una forma muy cariñosa, dándole seguridad a su pequeña.
- tu padre y yo no los iremos a ningún lado Sarada.
- me lo prometes.
- te lo prometo.
Ambas siguieron conversando hasta que Sarada se quedara profundamente dormida, Sasuke quien se había despertado, al no encontrar el cuerpo cálido de su mujer, se quedó parado en el umbral de la puerta escuchando la conversación de ambas chicas.
Sabía que esto sucedería, maldecía una y otra vez aquel día en que sus enemigos lograron secuestrar a su pequeña.
Sarada tuvo que ver cómo sus padres peleaban con aquellos enemigos para defenderla, nunca quiso que su niña viera cosas tan violentas siendo ella tan pequeña.
- Sasuke- llamo la pelirosa quien miró hacia la puerta, en donde se encontraba su esposo, perdidos en sus pensamientos.
- ¿Se quedó dormida?.
- si- contesto- ven a dormir con nosotras.
- hmp, ustedes duerman yo cuidaré de ambas- respondió.
Se negaba dormir, después de todo aún existía la posibilidad de que sus enemigos quisieran dañar a su familia.
Sakura soltó un largo suspiro, sabía que su esposo se culpaba de todo por lo que sucedió hace meses atrás, la verdad es que a ella también le costaba estar tranquila.
Ese momento lleno de desesperación cuando Sarada fue secuestrada, fue horrible para ambos.
Ninguno de los dos quiso separase de ella, desde ese entonces.
- por favor, necesitas dormir algo cariño- volvió a insistir, con una mirada de suplica.
Sakura estaba preocupada por la salud de su esposo, pues había noches en la que Sasuke entraba a la habitación de Sarada solo para sentarse al borde de la cama, con la mayor delicadeza del mundo para no despertarla, y verla dormir.
Ella lo había descubierto haciendo eso un par de veces.
- se que te estás culpando de aquel día Sasuke, ya todo acabo, nuestra pequeña está aquí con nosotros.
- no puedo dormir sabiendo que su. Ahí personas que les quieren hacer daño.
- te entiendo cariño, pero me preocupo por ti, tienes que descansar por favor- volvió a insistir, pues podía notar lo cansado que estaba su esposo.
Sasuke al ver la mirada llena de agustia y preocupación de su esposa, decidió hacerle caso, al menos por esta noche.
Se acostó de otro lado de la cama, dejando a su hija en el medio de ambos.
- buenas noches cariño.
- buenas noches Sakura.
La primera en quedarse dormida fue Sakura, el azabache sin hacer tanto ruido se levantó de la cama y invoco a Aoda.
- necesito que vigiles está noche- pidió el azabache, para luego volver a acostarse.
- como usted ordené, Sasuke-Sama.
Por lo menos está noche trataría de dormir algo.
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Muchas gracias Sasusaku.🌸🐍
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viendo tus primeros pasos (SASUSAKU)
FanfictionHola chicos y chicas, les traigo una mini historia, con capítulos cortos, de los mejores momentos de la familia Uchiha Haruno. Tratará más sobre la vida de los primeros momentos de Sasuke y Sakura como padres, espero disfruten de esta pequeña histor...