6.- ¿Soy el malo?

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Cuando va a visitar a Max el que abre la puerta es su novio, Sergio, el mexicano también parece sorprendido por la presencia de su "suegro" a esas horas de la tarde, supone que viene a ver a Max y se hace a un lado para dejar pasar al Verstappen mayor.

–¿Dónde está Max?

–¿Eh? Salió hace un rato a recoger en IKEA un mueble que nos faltaba para la habitación del bebé…

Jos dejó a Sergio hablando solo y se paseó por la sala observando todo a su alrededor, Checo solo lo siguió cauteloso tratando de no acercarse demasiado pasando las manos por su pancita de 8 meses.

–¿Y la niña?

–Está dormida, es la hora de la siesta. 

Jos lo escaneó de arriba a abajo deteniendo su mirada en el bulto notable en su estómago, aunque sabía que ahí estaba su nieto algo le desagradaba de todo eso. 

–Estás gordo, ¿el embarazo te hizo perder la noción de lo que comes?

Sergio no supo qué decir, temía que si hablaba empezaría a llorar y no quería hacer el ridículo frente al hombre mayor así que bajó la mirada y apretó los puños deseando desaparecer.

–Que perdida de tiempo, mi hijo se arruinó la vida por alguien como tú. Ni siquiera sé porque te eligió, no eres tan atractivo, si no fuera porque Emil es la copia exacta de Max cuando era bebé creería que solo eres uno de esos cazafortunas.- Checo sintió como los ojos se le llenaban de lágrimas y una punzada en su vientre recorría rápidamente el resto de su cuerpo, quería que se callara. 

"¿Sabes? Creo que ese bebé que esperas no es de Max, debe ser de alguno de esos tipos con los que sueles salir…es algo de tu cultura querer amarrar a un extranjero con un bebé"

Sergio quería gritarle y tal vez lo hubiera hecho si no se hubiera desplomado en el suelo, el dolor en su vientre había aumentado y su cuerpo ya no lo estaba soportando. Jos miró aterrado como de entre los muslos del mexicano que se retorcía en el suelo empezaba a escurrir un hilo de sangre, se quedó paralizado por un momento hasta que escuchó gritos que provenían del marco de la puerta y luego unas manos que lo empujaban con fuerza.

Era Max, Max pálido y asustado al ver al amor de su vida ensangrentado en suelo con su padre como principal sospechoso, intentó levantarlo como pudo y gritó al hombre mayor

–¿Qué haces ahí parado? ¿No ves que se está muriendo? ¡Hablale a la ambulancia maldita sea! Por favor…

Estas últimas palabras salieron entrecortadas por el llanto, Jos se apresuró a llamar a la ambulancia rogando porque todo estuviera bien.

Al poco tiempo la ambulancia llegó y trasladaron a Checo al hospital, los médicos le informaron a Max que tendrían que realizar una cesárea de emergencia, mientras los médicos operaban a Sergio Max estaba sentado en la sala de espera cuando Jos llegó con Emil, la pequeña niña dormía tranquila en los brazos de su abuelo.

–¿Que hizo Sergio para merecer esto? ¿Qué te hizo papá? ¿Si él o mi hijo pierden la vida por fin estarás contento?

Max le reclamó con la cara roja y los ojos llenos de lágrimas, el dolor se podía sentir en el tono de su voz. Era el dolor de un padre, el dolor que él mismo con sus estúpidos prejuicios había provocado, no quería que nada malo le pasara a ninguno pero dudaba que Max en su dolor le creyera(incluso el mismo no creería) 

Lo único que podía hacer era estar ahí, sabía que se merecía el odio que su hijo le tenía y se merecería el repudio absoluto si algo le llegara a pasar a esas dos personas que luchaban por su vida.

Max le arrebató a la niña de los brazos y la abrazó fuertemente enterrando la cara en su cabecita, tratando de consolarse con su aroma.

–¿Familiares de Sergio Perez?.- un doctor les llamó y Max se paró enseguida aferrando a su hija a su cuerpo

–Soy yo, soy su pareja.- dijo Max rápidamente.- ¿Cómo está él?

El doctor le dedicó una sonrisa cálida y apretó su hombro.

–Tanto el señor Sergio como el bebé están fuera de peligro, su pequeño hijo nació antes de tiempo pero es tan saludable como un bebé a término.

Max suspiró aliviado y derramó unas cuantas lágrimas de felicidad. Jos pudo respirar tranquilo también.

El médico le explicó que Sergio despertará en unas horas más debido a la anestesia y en cuanto al bebé, pasaría unos días en observación antes de que pudieran llevarlo a casa. Aún así le dijo que podía ver a su bebé desde las incubadoras.

–Vete, no quiero verte…por lo menos no ahora.- le dijo Max a su padre cuando perdió de vista al doctor. Se lo merecía, Jos se disponía a marcharse cuando una vocecita lo llamó.

–Abelito.- murmuró Emil y extendió sus bracitos hacia el hombre mayor. Jos le dedicó una sonrisa antes de irse, esto era lo que estaba apunto de perder por su estupidez. 

A los días Jos recibió un mensaje de Victoria, quien era la única de sus hijos que no lo odiaba del todo

Era una foto. Una foto de su nieto.

Era grande y gordito vestido de azul celeste con un gorrito de estrella, la piel rosada y ojos azul oscuro que combinaban con su ropita, parecía un poco desinteresado de lo que pasaba a su alrededor.

Conoce a tu nuevo nieto 

Sergio Emilian Verstappen ❤️

¿Quieres estar en su vida? Deja de ser un idiota y disculpate con Sergio.

Victoria(su aliada) lo llevó a casa de Max y Sergio cuando este ya había sido dado de alta con el bebé, se quedó en el recibidor mientras escuchaba a sus hijos discutir y a Sophie mirándolo con desprecio se lo merecía

–Por favor Max, deja que pase…es el abuelo de los niños y sigue siendo tu padre.- escuchó a quien parecía ser Sergio mediar entre los dos Verstappen enojados.

–Ese hombre provocó que nuestro hijo naciera antes de tiempo.- le contestó Max.

–Sabes que no es así, él no sabía que mi embarazo era de alto riesgo.

–Aún así no debí hablarte de esa forma.- interrumpió Jos en la sala, Sergio vió la cara de su suegro y realmente parecía arrepentido, parecía ser otra persona.

Max lo miró con indiferencia, no podía confiar en el hombre al que tenía que llamar padre, pero no podía hacer mucho si Sergio lo quería en su vida y la de sus hijos después de todo.

Sergio le dedicó una sonrisa a su suegro y se acercó a él, tal vez era ingenuo pensar que el hombre cambiaría pero él era así, creía en lo mejor de las personas.

–¿Quieres ver a tu nieto Jos? .- le dijo y el hombre mayor asintió. Ambos subieron al cuarto del bebé dejando a los Verstappen totalmente sorprendidos.


–Los dos perdieron la cabeza.- le habló Sophie a sus hijos, Vic sonreía mientras Max hacía una mueca…no sabia que pensar, ojalá su padre dejara de odiar a Sergio después de esto.

¿Sería demasiado pedir algo como eso?




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Jos siendo mierdilla y arrepintiendose cuando se da cuenta de que la kgo ¿algo nuevo? nao nao

El trabajo me está respirando en la nuca marceee 😔...aún asi les doy este capitulo antes de empezar con las peticiones.

BEAUTIFUL BOY | CHESTAPPENWhere stories live. Discover now