Capítulo 29.

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—Pasamos dos meses planeando esta fiesta para que cuando Max le pidiera a Checo que se casara con el todo fuera perfecto —Lando estaba quejándose de aquello— y él va y le pide matrimonio en el podio, es un maldito mal agradecido.

—Creo que fue mucho mejor así —comento Carlos— fue espontaneo y lo hizo en el momento que lo sintió, estoy seguro de que supero la fiesta.

Lando dejo escapar un grito de indignación.

—Ya me queda claro que ni tu ni él valoran el trabajo que hago.

—Yo también ayude con esa fiesta —comento Joelle— y estoy del lado de Carlos, fue muy romántico que Max lo hiciera cuando sintió que era el momento correcto y no que esperara a lo planeado, las cosas siempre son mejores cuando no se planean.

—Dices eso porque tu solo proponías ideas, las cuales eran cada vez más difíciles, pero siempre era yo quien las ejecutaba, prácticamente yo hice todo el trabajo.

—Es que yo soy la de la creatividad —se excusó la chica.

—Yo jamás voy a perdonar que Max les haya contado a ustedes y nos haya excluido a nosotros —se quejó George.

—Es la traición más grande que me han hecho —Charles se cruzó de brazos.

—De haberles contado a ustedes, en específico a George, estoy segura de que no hubiera sido una sorpresa para Checo.

—Por cierto —dijo Lewis— ya es bastante tarde ¿Dónde están esos dos? Debemos irnos a la fiesta, que Verstappen se haya adelantado no quiere decir que no asistamos.

Charles y Joelle soltaron una carcajada.

—Si esos dos en situaciones normales parecen animales en celo —dijo el monegasco— imagínate ahora que se acaban de comprometer.

—Tendremos suerte si salen de la habitación —estuvo de acuerdo Carlos.

Como si los hubieran invocado, los mencionados iban llegando.

—Sentimos llegar tarde chicos, Max tardo bastante en ducharse,

Sergio intento justificar su retraso, sus amigos pusieron los ojos en blanco, todos sabían que Max no había tardado duchándose y cuál era el verdadero motivo de su retraso.

—Cuidado Checo —Charles se puso de pie y le dio una palmada en el hombro al mexicano— esas duchas pueden dejarte invalido un día de estos.

'***

Max tenía que admitir que sus amigos habían hecho un trabajo increíble con el lugar, todo estaba tal y como lo había imagino, tal vez incluso un poco mejor, si bien ya no usaría aquella fiesta para pedirle a Sergio que se casara con él, si podía usarla para celebrar que le había dado el sí.

Todo el mundo estaba felicitándolo, por su segundo título y por su compromiso, personas que ni siquiera el conocía, mecánicos, ingenieros y ejecutivos de todas las escudarían estaban ahí y todos ellos parecían estar feliz de verdad por él, o, mejor dicho, por Sergio, su pareja saludaba a todo el mundo por su nombre, sabía que él se llevaba bien con casi todos, pero aquello era demasiado.

—Así que vas a casarte —Horner se acercó a él.

El team principal de Red Bull había sido uno de los primeros en felicitarlos cuando bajaron del podio.

—Voy a casarme —decir aquello en voz alta era como un sueño— ¿recuerdas que cuando tú te casaste con Toto Sergio y yo te acompañamos?

Horner asintió con la cabeza.

Crowns & Hummingbird. [Libro 2]Where stories live. Discover now