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 Escuela Salvatore

Extendió su siguiente mano y presté aún más atención, viendo como señalaba aquella escuela qué me acogió en mis momentos de juventud, solo tenía 17 años cuando complete mi transformación vampírica y quedé con los mismos rasgos de aquella edad y rápidamente pasaba por desapercibida con los estudiantes qué aún seguían en el césped a altas horas de la noche.

—¿Por qué están afuera a esta hora? — termino él pronunciando en voz baja.

—¿Me ves cara de qué sigo estudiando acá, imbécil?

Lo miro mal y sigo mi recorrido adentrándome en las instalaciones percatándome qué ahora cuenta con otro edifico cerca de la colina, y estudiantes salen y entran de allí, hay algunos haciendo una fogata y otro charlan gustosamente. El sonido de un objeto volador se aproxima, hacía mi y me volteó tomándolo entre mis manos. Le sonrió al chico que me pide disculpas apenadas.

—Descuida—le sonrió y Nick lo mira mal y lo tomo del hombro.

Le hago señas qué me siga hasta que detengo mi paso cuando unos altavoces hacen el anuncio que ya deben volver a la escuela, suspiro pesadamente al recordar el millón de recuerdos formándose en mi cabeza. ¿Qué será de la vida de las gemelas saltzma?

Cada quien luego del fin de nuestro año de curso todos tomaron rumbos distintos, Kaleb sé mudo a Nueva Zelanda con Cleo y Dorian decidió declar su amor a la ex profesora Emma y ahora están felizmente casados y por lo último que supe tuvieron una hija.

Ya no quedaba nadie, dé la élite superpoderosa de chicos que trataron de salvar al mundo, dé los monstruos qué lo acechaban, eso había acabado y yo quería una vida normal y sobre todo universitaria, hasta qué todo esto vino como un mar que trajo la corriente ¿Cuándo se detendría?

No tenía padres qué me aconsejarán qué hacer en este caso, simplemente tenía qué confiar en mis instintos supernaturales y lo que reparará mi criterio absoluto.

Camine hacia la puerta principal y la empujé y no tardó en atraparme el calor de hogar dé el establecimiento.

Había niños con sus pijamas alrededor y visualizo a Nick que anda fisgoneando las faldas de un par de chicas. Lo dejó en la entrada cuándo caminó hacia la oficina principal.

Escucho a dos personas hablando atrás de la puerta, pero es casi inaudible identificar la posible voz si es conocida o no.

—¿Hope Mikaelson?

Me doy la vuelta y el cabello rubio le cae cascadas por los hombros Caroline Forbes parece una chica de mi edad y es porque ella también quedó en su edad humana de 17 años. Luce igual de sonriente, pero ahora porta un estilo más dé "la edad, qué debería tener, pero qué jamás tendrá nuevamente"

Me abre los brazos invitando a abrazarla y no dudó en abrazarla, huele a colonia floral, y no tarda en invitarme a pasar en su oficina.

—¡Fin de la discusión!—anuncia dejándose caer sobre su escritorio —Casandra no volverás a tomar la ropa dé Lou y viceversa! Cada una debe respetar lo suyo, y porfavor pido qué se retiren a sus habitaciones ya es hora de dormir.

Se retiran en forma de marcha militar y Nick les abre espacio a las niñas que se pierden por los pasillos, entra y cierra la puerta. Caroline lo mira divertida y se muerde el labio.

—Caroline ya no tienes la misma edad...—la reprendo y se echa a reir.

—Humanamente, la sigo teniendo—lo observa y se ríe alegando que era una broma —Por el gran parecido a los Mikaelson supongo qué eres el hijo de Freya ¿No?

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⏰ Last updated: 6 days ago ⏰

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𝑬𝒍 𝑳𝒆𝒈𝒂𝒅𝒐 𝑷𝒓𝒆𝒗𝒂𝒍𝒆𝒄𝒆 | 𝑯𝒐𝒑𝒆 𝑴𝒊𝒌𝒂𝒆𝒍𝒔𝒐𝒏Where stories live. Discover now