Capítulo 1

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Era un dia normal como cualquier otro nos preparabamos para ver una serie en Netflix, yo hacia las palomitas y por su puesto Pech se encargaba de preparar la tv y la mesa del salon, sin embargo aquel dia era muy diferente a todas aquellas veces, podria decir que ella se encontraba en sus pensamientos, no parecia ser la misma de siempre, tal vez por que horas atrás habia recibido una llamada de su hermana, coloque las palomitas en un tason una vez estaban listas y puse vino sobre unas copas y las lleve hacia el salon, Pech llevaba puesto una sudadera que le llegaba hasta los muslos, sin duda era la unica ropa que vestia, finalmente ella solto aquellas palabras.

— ¿sabes e estado pensando?, la casa se siente algo vacia y tenemos una habitacion que no ocupamos, podria ser perfecta para un bebé.

— Te refieres a que podria ser un cuarto de juegos para Elba.

— No precisamente para Elba, pero se mejor que comencemos a ver la serie.

La tarde paso con normalidad y sin darnos cuenta se convirtio en la noche, y como era rutina tuvimos dos horas de conversacion y veinte minutos de sexo posterior, el dia de hoy nos nos preocupabamos por nuestros horarios ya que el dia de mañana no iria al hospital y Pech no tenia que dar clases ya que se encontraba de vacaciones. En la mañana siguiente prepare huevos fritos y lleve el desayuno a la cama, en el Google Home sonaba chasing cars de snow patrol. Pech se desperto con el olor al desayuno y me miro con aquella mirada que me enamora cada vez que ella me mira. Duramos un par de horas en la cama hasta que ella se levanto al ver un mensaje en el movil.

— Lamento ser la persona que arruine este bello momento entre nosotros pero quede de ir con Ilse hacer un par de compras.

— ¿Asi que tienes planeado ya tu dia?

— Salio de ultimo minuto lo lamento pero puedes ir a tomar con Brant a beber a un bar, cuando me desocupe puedo alcanzarte.

— Creo que me parece un trato justo llamare a Brant.

Sali de la habitacion mientras Pech tomaba una ducha, aun que debo de admitir que mis pensamientos no se alejaban de aquella llamada pero de todas aquellas preguntas que tenia podria adivinar de que se trataba, hace año y medio que Elba nacio, aun que no me gustan los bebés admito que es la mas adorable y hermosa niña que e conocido, cuando Pech la carga en sus brazos veo ese brillo en sus ojos solo en pocas ocasiones vi ese brillo, el dia en que nos comprometimos y aquel viaje que tuvimos a la isla de capri, recuerdo que nos atrapo la lluvia, tenia miedo de que pescara un resfriado sin embargo Pech desidio bailar bajo la lluvia y en aquel momento beso mis labios y me dijo te amo, aquel dia me di cuenta que era Pech con quien deseaba pasar mi vida. Lanzo un leve suspiro mientras murmuro: — solo disfruta el dia. Tome mi movil y marque a Brant, debo de admitir que deseaba que no contestase la llamada, espere un par de segundo y Brant contesto:

— Diga.

— Brant, habla Edel que opinas sobre ir por unos tragos.

— ¿unos tragos? , crei que pasarias la tarde con Pech.

— Tuvo que salir con su hermana pero nos alcanzara en cuanto termine.

— De acuerdo pero tu invitas los tragos.

Brant estaba sentado como siempre acostumbraba cercas de la barra de igual manera como era habitual estaba acompañado de un cigarrillo y de alguna nueva amiga como solia llamarlas, al verme entrar levanto la mano indicandome que me habia visto, hice una seña al barman y pedi una cerveza di un sorbo seguido de ello una calada a mi cigarrillo. Sin embargo aun continuaba pensando en la conversacion que habia tenido con Pech, ¿por qué habra mencionado al bebé?

— ¿Parece que hay algo que te molesta? — pregunto, Brant.

— Tuvimos la conversacion del bebé.

— Sabes amigo a veces es mejor ser honestos, de todos estos años que tengo conociendote a ti y a Pech, ella siempre a querido ser una madre, no me lo tomes a mal es alguna clase de instinto que tienen las mujeres.

— ¿sabes amigo?, eso es un generalizmos, nosotras las mujeres no necesitamos el madres para sentirnos plenas— interrumpio Isa.

— Perdona solo trataba de llegar a un punto.

— Y cual es ese punto Einstein.

— Que mi amigo Edel se esta acorbando en ser padre.

— Sabes Brant eso fue demasiado.

— No seas tan duro con tu amigo al menos el esta comprometido y en una relacion —Ilsa hizo una leve pauso y escruto mis ojos mientras continuaba — sabes no te conozco y no deberia de dar mi opinion pero si tu mujer quiere tener un bebé sera mejor que se lo des o de lo contrario terminara muy mal para ti, no es facil para una mujer el tener hijos a una edad avanzada.

Al escuchar eso ultimo decidi salir a tomar un poco de aire fresco, y pensar un poco, Pech apenas acaba de cumplir veintinueve y sin duda alguna la llegada de Elba a nuestras vidas movio algunas fibras en nuestras vidas, Pech es la mas entusiamada en ser madre, pero en estos momentos no me siento tan preparado para ser padre, acabo de terminar mi especialidad en cirugia cadiotoracica, y ese otro gran elefante en la habitacion del cual no les he hablado, saben tengo un complejo con mi estatura mi madre siempre decia que me habia comprado comprado en metros y no lo mal interpreten, me encanta ser alto, no es algo que me a causado inpedimento, sin embargo el ser flacucho y alto a la vez puede ser una mala convinacion y mas cuando te encuentras curzando la secundaria, creo podemo ser muy crueles en esa etapa de la vida estamos en desarrollo tenemos problemas hormonales que no entendemos y cambios abruptos de voz, debo de admitir que desee tener una estatura promedio para no ser blanco de burlas pero entre mas trataba de pasar desapercibido mas era objeto de burlas, hasta que eso se convirtio en un ojo morado y una suspension. Debo de admitir que senti temor cuando Pech me dijo que queria ser madre, no queria traer gigantones al mundo y que pasen por la misma tortura que yo pase cuando era un adolecente, se que es egoista al pensar asi despues de todos estos años que ella me apoyo, sin embargo debo de admitir que en estos momentos mis temores me estan ganando. Di un largo suspiro y subi las solapas de mi chaqueta de tal modo que me cubrieran el cuello el frio suele llegar despues de una fuerte lluvia, sin darme cuenta alli estaba Pech bajando de un taxi tan radiante como siempre sin duda aun sigue siendo la mujer que conoci por primera vez de la cual me enamore, se que suena un poco vergonzoso pero sin duda me acelera el corazon cada vez que la veo, no puedo evitarlo, tiene ese efecto en mi, sin darme cuenta permaneci inmovil mientras la observaba.

— Creo que te has quedado mudo de verme.

— Es el efecto que tienes en mi.

— ¿y que haces afuera?

— Sali a tomar un poco de aire.

— De nuevo Brant se puso pesado.

— Que puedo decir me conoces mejor que nadie.

— Bueno amigo hoy es tu dia de suerte ya que esta vez yo te salvare de tu malvado amigo.

Se que desean saber si Pech logro salvarme de mi malvado amigo pero me temo que debemos de regresar a ese momento en el que ella se fue de mi vida, ahora todo es diferente sin nuestro amor, sin nuestra manera de decir te amo, me he quedado un poco huerfano pero debo de serguir contando nuestra historia hasta ese momento en el que decidi tomar esa llamada.

Colisión [En edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora