02: Tengo miedo

74 12 2
                                    

Toda la tarde en la universidad estuve aturdida, no sabía que debía responder al mensaje. Me sentía nerviosa y no importaba lo adulta que era ahora, este manojo de sensaciones se manifestaban como aquella primera vez que la vi después de 6 años de haberme mudado del país en mi adolescencia.

Habían pasado los mismos seis años.

Yo seguía aquí, y ella al parecer también. Ahora no éramos dos simples adolescentes, no éramos inexpertas en temas que antes se nos hacían difíciles o algo por el estilo. Aún con todo esto, seguía con la mente en blanco, ¿que debería hacer?

— Hoy estas más distraída que de costumbre —dijo una voz poco familiar. La reconocí apenas cuando la vi y sonrei de forma despreocupada: Irene. La chica y yo habíamos quedado como amigas después de mucho de lo que pasó en nuestras vidas. Descubrimos que de alguna forma éramos una anomalía de la rara amistad. Asentí.

— Estoy rara, lo sé. Me siento nerviosa —sus cejas subieron y bajaron continuamente—. ¿Que pretendes con esa mirada?

— Jen, que te sientas de esa forma me alegra. ¿Desde cuando no sentías? Además, me lo estás diciendo, es un avance —encogió sus hombros. Estábamos saliendo de la universidad, vi la hora en mi celular y suspiré. Faltaba todavía para encontrarme con mis amigas, por un instante me preocupé—. ¿Hoy saldrás? —asentí.

— Lo haré. Tengo algunos días sin verme con Momo y Nayeon. Normalmente nuestros horarios son apretados. Ellas trabajan y estudian —encogí los hombros—. ¿Tu que harás?

— Tengo que hacer unas cosas antes de ir a casa —negó con una sonrisa—, nada importante.

— Genial.

Llegamos a la salida y nos despedimos. A pesar que no estudiábamos lo mismo, ni teníamos la misma edad, habíamos entrado a la misma universidad y casi al mismo tiempo. Y teníamos varias clases compartidas, nos facilitaba el vernos.

Deduje que el destino de nosotras era estar juntas pero separadas al mismo tiempo.

Los pongo al contexto: Irene y yo en el pasado fuimos novias, ella apenas tenía 15 años y yo 17 cuando todo dio inicio. Ella era una persona inmadura que no sabía lo que quería y dado a todo eso me lastimo mucho. Me sentí mal mucho tiempo hasta que pasaron cosas con otra persona y poco a poco la olvidé y perdoné. Claro que tuvimos tiempo sin hablarnos pero solo vernos nos hacía recordar que fueron más momentos buenos que malos, a pesar de todo, nos apoyabamos como amigas. Era una persona muy cambiada ahora que de alguna manera había madurado más de lo que podía haber creído de joven.

La chica siempre se destacó por su belleza. Es una hermosa y alta, eso teniendo en cuenta que todos son más altos que yo. Sus ojos son negros; almendrados de pestañas largas. Tiene labios muy bonitos también y la forma de su cara solo hace que cualquiera quiera pretenderla. Además que la forma de su cuerpo hace gracia a todo el resto. Goza también de un cabello largo ondulado de color negro, de vez en cuando lo pinta pero ahora mismo lo dejó natural.

Entré a mi auto, no había ni siquiera desayunado y ya eran las 3 de la tarde. A veces me pasaba de irresponsable con ciertos horarios.
Mi celular volvió a sonar en llamada y contesté de nuevo sin ver de quien se trataba.

— ¿Mm? —conducía ahora con una sola mano. Esto podría buscarme problemas. Nada que me importara justo ahora.

[¿Jennie?] Sonreí, esa voz también la reconocía donde fuera.

— ¿Quien más podría contestar mi celular, Jisoo? —mantenía la sonrisa en mi rostro.

[Cierto, en fin. ¿Como estas? Hace tiempo no has venido. ¿Acaso son esos ataques de depresión como de niña?] Sonreí más grande, sabía a lo que se refería. Cuando era niña tendia a desaparecer solo porque me sentía mal y asumía que "arreglarme" yo sola era mejor que cualquier otra cosa. Hablar el problema era inaceptable para mi. Menos con alguien más. No. Jamás.

— Nada de eso. La universidad ha estado algo intranquila —confesé—. Estoy yendo a comer algo, si quieres paso por ti a donde estés y vamos, ¿que dices?

[Tus ideas espontáneas me siguen gustando. Dale, te envío mi dereccion.]

Así como dijo, su ubicación llegó. La llamada terminó y me guíe por el GPS. Gracias al cielo no estaba tan lejos de donde ya yo estaba.

Jisoo es una amiga que conozco desde que tengo 3 o 4 años de edad.

Cuando era más pequeña descubrí que los hombres no eran una opción gratificante para mí vida gracias a las dudas que sentía por Jisoo. Eso cuando tenía 11 años y sentía las famosas "mariposas". Incluso cuando  me fui del país y regresé 6 años después, ella llamó mi atención nuevamente; su ceño fruncido, su forma de ser tan directa, o su cara tan seria, eran cosas que me atraían. Claro que habia alguien más, siempre hubo alguien más y yo usaba a los demás como clavo para sacar otro clavo.

Nos hicimos ese tipo de amigas que no duran ni un segundo fuera del coqueteo pero nunca llegaríamos a nada concreto.

Llegué minutos después y la vi en la cera con una bebida en su mano y como siempre, su rostro serio el cuál mejoró cuando vio mi auto blanco y sonrió un poco. Subió al auto y besó mi mejilla como saludo.

— Tanto tiempo —dije. Pero algo me decía que me había llamado por algo, solo que como siempre, no quise preguntar—. Cuidado manchas mi carro con tu bebida —avisé.

— Jen, ¿supiste que Lisa volvió al país? —mi sangre se congeló, lo hice yo. Aunque mi corazón no dejaba de latir con rapidez,

¡detente o me matarás!

Ni siquiera sabía que había salido del país. Volteé al frente y puse el carro en marcha. Antes de contestar aclaré mi garganta.

— No, no sabía. Ni siquiera sabía que había salido del país —encogí un poco los hombros.

— Te escribió, ¿no? —me quedé en silencio unos minutos hasta que decidí asentír. Con Jisoo siempre se daban este tipo de temas más profundos que en algún punto sé que me harán llorar. Ella era demasiado madura en esta parte, lo reconoceré siempre—. ¿No respondiste?

— No lo hice.

— Tienes miedo.

— Lo tengo —volteé a verla por segundos para regresar al camino—. Tengo un jodido miedo que no me deja en paz —confesé.

[🍂]

¡Hola, chicos! Buenas madrugadas de nuevo.

Espero les haya gustado el capitulo.

Quiero avisarles que esta historia será algo complicada y mucho más con Jennie que aunque ella no lo quiera aceptar, sigue siendo algo inmadura en el tema del amor por estar tanto tiempo esperando por alguien más 👀

Mantengan su mente muy abierta.
Dicho esto:

¡Voten, comenten y amenme!

° Odiame en pasado °Donde viven las historias. Descúbrelo ahora