Capítulo 06 (Edit.)

376 25 0
                                    

→ C A M I L A ←

¿Ustedes qué serían capaces de hacer si reciben una llamada de su mejor amiga de toda la vida a mitad de una reunión familiar diciéndoles que su novio la ha engañado?

Pues yo no pude soportar la noticia; empecé a maldecir al estúpido de Austin por lo que hizo, ¿Cómo pudo engañar a Mel? ¡Siete años juntos, joder! Siete años tirados a la mierda.

—¿En dónde estás ahora? —le pregunto a mi mejor amiga a través del celular.

Ella solloza desde el otro lado de la línea antes de contestarme.

—No sé... no sé a dónde mierda ir —dice—, estoy a dos cuadras de su casa, hice mis maletas y me fui, pero... no sé a dónde voy.

Austin es un imbécil, un total y completo imbécil que se merece una de mis famosas patadas a la entrepierna.

—Mel, tranquilízate.

Tú también necesitas tranquilizarte, me ataca mi subconsciente.

—Escucha, ve a mi departamento, espérame ahí. Iré de inmediato para allá.

—Pero...

—Sin peros, Mel. Espérame ahí.

—Está bien.

Tras despedirme de mi mejor amiga empiezo a caminar con una velocidad impresionante rumbo a la planta alta de la casa, hacia mi cuarto. Tomo la pequeña mochila que he traído para pasar el fin de semana con mi familia y empiezo a guardar allí dentro todo lo que traje, que no es mucho en realidad.

—¿Qué haces, Cami? —Escucho que dice una voz a mis espaldas.

—Debo irme, me surgió algo importante.

Termino de acomodar mis cosas para recién girarme hacia la puerta y cruzarme con los grandes y despiertos ojos cafés de una de mis hermanas menores.

—¿Y es tan importante como para irte así? —pregunta Isabella.

—Tiene que ver con Mel, me necesita justo ahora.

Isabella hace su largo cabello hacia atrás y suspira.

Sabe que Mel y yo somos mejores amigas desde que nos conocimos en la primaria. Ella solía vivir en esta ciudad, en mi ciudad natal, y estuvo aquí hasta cumplir trece años, pero en ese momento sus papás decidieron mudarse a la capital y ella se fue con ellos, aun así, nuestra amistad no se acabó. Nos mantuvimos en contacto hasta que me gradué de la secundaria y me mudé a estudiar en la misma ciudad que ella, ciudad en la cual vivo actualmente.

Una ciudad que queda a cinco horas de donde estoy ahora, joder...

Debo apresurarme si quiero llegar rápido. Son casi las dos de la tarde, si salg ahora puedo llegar a la ciudad antes de las siete, a más tardar.

—Está bien, pero despídete de todos. No nos reunimos todos los días en familia, Cami, recuérdalo.

Isabella se va dejándome con un nudo de culpa, pero no lo pienso por más tiempo antes de poner la mochila sobre mis hombros y bajar rápidamente.

La chica de los sueños locos ©Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang