El Destino de un Reencarnado ~Mushoku Tensei~ (PAUSADO)

Capítulo 73: Plan B.

Aquí el siguiente capítulo aprovechando que estaba libre. No sé cuando subiré el próximo, así que lo subo temprano. No se olviden de apoyarme dándole a la estrellita. Se los agradecería mucho. Sin más que decir, hasta la próxima. 

Advertencia, Mushoku Tensei y sus personajes no son de mi propiedad, crédito a sus respectivos creadores. Solo el personaje principal y el rumbo que toma la historia son de mi propiedad. Me disculpo por errores gramáticos y ortográficos. 

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-POV tercera persona: Mansión de Ariel Anemoi Asura-

El lugar, por más luminoso y lujoso que fuera, permaneció el un ambiente de completa oscuridad. El lúgubre aire de la habitación principal de la mansión no era posible de respirar con normalidad. Todos los presentes estaban decaídos, tristes y enojados.

¿La razón?

El plan que todos siguieron al pie de la letra no funcionó, y ahora uno de ellos terminó sufriendo las consecuencias de ello. Eso dejó a todos decaídos. Aquel quien estuvo llevando las riendas del ruedo y tenía una conexión con la mayoría de los presentes fue el secuestrado.

La injusticia en las acciones de sus rivales empezó a dar buenos resultados para su mala suerte, demostrando que en la guerra no vale nada siempre y cuando el vencedor se declare al final. Eso, por más que no lo quieran admitir, los marcó profundamente.

Siempre estuvieron un tanto despreocupados por el cómo se han estado encargando de los problemas últimamente. La confianza, la unión que crearon a través de aquellos atentados de asesinato que fácilmente pudieron desmoronar se terminó hundiendo hasta el fondo del océano de la desesperación.

"¡MIERDA!"

Eris gritó mientras pateaba una vasija sin pensar, rompiéndola y regando las flores por el suelo.

"¡Oiga, cálmese!" -gritó Cleane algo enojada-. "¡No ande rompiendo objetos así si no los va a pagar!"

En su arrebato, Eris volteó y fulminó a la chica.

"¡¿Acaso eso importa ahora?!" -gritó ella-. "¡Que se joda el puto jarrón, Zouku está en peligro!"

"¡¿Y?! ¡Él decidió ayudar a Ariel-sama! ¡Es su deber sacrificarse por ella!"

Hubo un silencio repentino cuando la ayudante de Ariel mencionó esas palabras. Todos la miraron con malos ojos, pero a ella no le pareció importarle mucho. No le caía bien las acciones del chico que lideraba el grupo y viendo a todos preocupados por cómo él fue vencido la hizo estallar.

"¡¿Qué?! ¡¿Acaso eso no es verdad?! ¡Todos se la pasan con: Zouku esto, Zouku aquello! ¡¿No pueden pensar en nada más que no sea en él?! ¡¿Así de dependientes son de ese... tipo?! ¡Si murió, pues murió! ¡Si fue secuestrado, pues fue secuestrado! ¡Muchos más como él murieron haciendo lo mismo y no tuvieron ninguna pizca de reconocimiento o preocupación sobre lo que les pasó! ¡Ahora no es momento de andar llorando, sino de prepararse!"

"Tú..."

La mirada asesina de la pelirroja puso la piel de gallina a más de uno ahí, incluida Cleane. El sentimiento de la posible muerte volvió a aparecer frente de ella de la peor manera posible, pero ahora siendo con uno de sus aliados.

El sonido de la espada desenfundándose y los pasos desplazándose puso alerta a todos. Ghislaine y Sylphie enseguida se pusieron a cada lado de Eris, deteniendo su insaciable sed de sangre que solo aclamaba ira y venganza hacia lo que estaba sucediendo ahora.

Por más gritos que daban en señal de que se calmara, la pelirroja hizo caso o miso a sus advertencias y solo se la quedó mirando. Cleane no supo que hacer en ese momento, sentía que si decía una palabra más no habría ser que detuviera el avance de esa espada. Solo se mantuvo callada y con la mirada gacha. El instinto de supervivencia se activó como en cualquier animal en la naturaleza. Si el animal más fuerte intimida, lo único que te queda por hacer es desviar la mirada para no hacerlo enojar más. Esa era la ley del reino animal, el instinto arraigado en cada ser que se activa automáticamente para sobrevivir... y aquí no fue la excepción, más o menos.