TOM RIDDLE maratón 2/?

1.8K 54 2
                                    

❛ ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ TOM MARVOLO RIDDLE (SLYTHERIN)

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

❛ ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ TOM MARVOLO RIDDLE (SLYTHERIN)

SIPNOSIS: Se explica solito no ocupa esto, creo.

ADVERTENCIAS: Dinámica dom/sub, elogios, atontamiento, tom llamándote "princesa", tom burlándose de ti, torcedura de tamaño, tom siendo "gentil".

EXTRAS: Se usa el pronombre "ella", no hay especificación de casa, pero tengo la ligera (mucha) sospecha de que es Slytherin.

ESCRITO POR: mysmutty en Tumblr

.........

"¡Oh, jódete, eres un maniático del control!" Grito, lanzándole un libro. Lo coge y lo tira al suelo. Veo cómo da pasos lentos hacia mí.

Su mirada me dice que estoy acabada. Va a arruinarme y no hay nada que pueda hacer al respecto, porque ahora estoy atrapada por su figura.

Me coge la cara entre sus manos suaves y larguiruchas y me obliga a mirarle. Su expresión es de enfado, pero sus ojos están llenos de excitación.

"¿Has terminado con tu pequeña rabieta, princesa?". Dice, haciendo lo posible por no mirarme a los labios. Pongo los ojos en blanco. Su mano se coloca en mi garganta y me la aprieta.

"Vuelve a ponerme esos ojos tan bonitos, te reto, joder", me escupe, con la cara a escasos centímetros de la mía.

"Lo siento." Le digo, esperando que me crea.

"No, no me crees. Cada vez que te pones así y te lo reprocho, dices que lo sientes, pero luego vuelves a hacerlo. Entonces, ¿lo sientes de verdad o me estás tomando el pelo para salvar tu bonito culito?". Me pregunta mirándome fijamente a los ojos.

Le miro fijamente, sin decir nada. Él se burla y niega con la cabeza.

"Te necesito de rodillas para mí, s/n". Me dice, soltándome la garganta. Asiento con la cabeza. Mis rodillas golpean el suelo debajo de mí y le desabrocho el cinturón.

Escucho el sonido del metal golpeando el suelo, para entonces, su dura polla ya está en la palma de mis manos.

Me la meto en la boca. Primero le beso la punta y luego se la chupo. El resto de la polla se desliza lentamente en mi boca y, antes de que me dé cuenta, muevo la cabeza y me atraganto con su polla.

Su punta golpea el fondo de mi garganta una y otra vez, haciendo que se me llenen los ojos de lágrimas. "Mírame." Me exige, me agarra del pelo y me obliga a mirarle otra vez.

Nuestras miradas se cruzan y me pongo aún más nerviosa, pero no tardo en olvidarlo cuando siento que mi coño empieza a palpitar.

Mis bragas están muy mojadas y no puedo evitar gemir sobre la polla de Tom. "¿Qué pasa, pequeña? ¿Tú también quieres un poco de acción?" Me pregunta, inclinando la cabeza hacia mí.

Parpadeo, moviendo los ojos aún más que antes.

"Abre las piernas". Me dice y le hago caso. Abro las piernas dobladas. "Ahora deja caer tu mano libre entre ellas". Continúo haciendo lo que me dice.

"Frótate el clítoris", murmura conteniendo los gemidos. Hago girar mi lengua a su alrededor mientras me guía para ayudar a satisfacerme.

Sus ojos no se apartan de los míos, ni una sola vez, y los míos no se apartan de los suyos, ni una sola vez.

"Buena chica, ahora empieza a meterte los dedos". Termina. Deslizo un dedo dentro de mi coño, ya sintiéndome un poco mejor.

Después de un par de empujones, añado otro dedo. Me estrujo contra mi mano mientras me ahogo con la polla increíblemente grande de mi novio.

"Así me gusta. Lo estás haciendo muy bien". Murmura echando la cabeza hacia atrás. Sus ojos ya no miran los míos.

Mis dedos se enroscan dentro de mí mientras siento que me deslizo más cerca de mi orgasmo. Saco la polla de Tom de mi boca y él me mira: "¿Puedo correrme?". pregunto mirándole a los ojos.

"No, sigue". Me exige. Aprieto su polla en mi mano, sintiendo rabia de que me haya negado algo que necesito desesperadamente.

"Oh, joder", gime, ahuecando mi mejilla. Empiezo a acariciarle la polla a un ritmo extremadamente rápido. Demasiado rápido, ni siquiera tiene tiempo de hacerme saber que está cerca.

Le sale esperma por la punta y no tardo en inclinarme y chupársela toda. Mueve las caderas, haciendo que su polla se deslice completamente en mi boca, otra vez.

---

Me tira en la cama, pero ni siquiera le miro. Estoy demasiado cabreada. No me deja correrme y estoy desesperada.

"Mírame". Habla acariciándome el muslo. Gruño y giro la cabeza para apartar la mirada de él. Me aprieta el muslo, sus fríos anillos plateados me pellizcan la piel.

"He dicho que me mires, joder". Me escupe. Escucho, sintiéndome intimidada por su tono. Respira hondo y, de repente, su dedo está dentro de mí.

Lo desliza dentro y fuera de mí a un ritmo lento. "Dime lo que quieres". Me ordena mirándome fijamente a los ojos azules. Levanto el cuerpo.

"Que me corra, por favor, necesito su polla dentro de mí, señor". Murmuro, cerrando los ojos. No tarda en subirse encima de mí.

"Tienes mucha puta suerte de que me des pena, mocosa. Si no, seguiría dándote caña". Sonrío y le beso.

"Gracias señor, le quiero" susurro, mordiéndole el labio. Él gime en mi boca: "Joder, por favor, eso me hace cosas. Dilo otra vez". Me lo pide, pero no parece que me lo esté pidiendo, sino que me lo está exigiendo, como siempre.

"Gracias señor, le quiero"

Siento su cálido líquido caer en mi estómago, mis ojos se abren de par en par y no puedo evitar reírme. "Joder, ¿me...?" Me interrumpe clavándome su polla dura como una roca.

Apenas me deja acostumbrarme a su tamaño antes de volver a sacarla y meterla de golpe. "¡Tom!" Grito, apretando las sábanas con mis puños.

"Joder, qué bien te sienta, mami", gimotea, haciendo que me escandalice. ¿Mami? Él nunca, nunca, nunca me llama así.

Muevo las caderas y nuestros cuerpos se encuentran a medio camino con cada embestida.

"Joder, eres una putilla tan buena, todo para mí". Gime, agarrando mi garganta. "¡Tom!" Grito.

"Gime más fuerte."

"Joder, mejor".

Me mira fijamente con pura rabia en los ojos, es entonces cuando empieza a embestirme sin descanso. Siento su polla en mi estómago.

Mueve la polla de cierta manera y siento que empieza a golpear todos mis puntos dulces. Continúa golpeándolos, una y otra vez.

Esa sensación familiar se apodera de mí y me debato entre hacerlo o pedírselo.

"Señor. Hablo, conteniendo mis gemidos. Él asiente, diciéndome que me está escuchando. Gruño: "¿Puedo correrme ya, por favor? Seré una buena chica para ti, ¡sólo déjame correrme!". Suplico, mirándole fijamente a los ojos.

Asiente con la cabeza: "Córrete para mí, cariño. Córrete en mi polla". Me dice sonriendo.

Las gruesas cuerdas de Tom salen disparadas de su punta y grito "¡Mierda!"

harry potter o.s +18Where stories live. Discover now