¡Dios!, decídete...(Dioses de Euskadi: El dios del viento, volumen I)

13. Fiesta delictual, parte 8 final

Recuerden que es doble actualización. Si no leyeron el anterior y wattpad las trajo directo a este, retrocedan!

♡♡♡Catalina♡♡♡

Matrimonio. Casarse. Casarse por negocios.

No tiene sentido. No lo tenía cuando Andrea habló de eso más temprano y mucho menos lo tiene ahora. ¿Haize casado? Es absurdo. Ni siquiera es capaz de estar con una sola persona a la vez. Mierda, supongo que eso a nadie le importa. Solo les importa el dinero.

—No es por poner en duda sus palabras —dice de pronto Javier Echeverría y las demás personas dejan de murmurar—, pero el joven Lantzer parece sorprendido. ¿Está de acuerdo él con todo esto?

Aparto la mirada de mis manos y observo a Haize. Todos están concentrados en él, especialmente las chicas jóvenes del otro lado de la mesa. Pero él parece tener una conversación silenciosa con los ojos clavados en los de su hermana. Y aunque los demás no lo conozcan lo suficiente, aunque parezca que está muy tranquilo, yo sé perfectamente que en este momento lo único que hay en su mirada es odio.

Sin embargo, cuando se voltea hacia Javier Echeverría y le sonríe con educación, parece un chico totalmente compuesto. El traje perfecto, el pelo negro tomado en una colita, y aunque algunos mechones rebeldes se escapan, solo parece que fuera para darle más perfección a su peinado.

—Por supuesto que estoy de acuerdo —dice y sus palabras hacen que mi estómago se encoja—. Solo no sabía que mi hermana lo trataría en esta reunión.

—¿Cuando regresaran a Euskadi? —La pregunta es otra vez de Javier.

—En seis meses —responde Lilai.

Siento demasiado calor. De pronto esta habitación, con personas en trajes caros y conversaciones de dinero y matrimonios sin sentidos, me parece sofocante.

—Seis meses es poco tiempo para que se casen dos personas que hasta hoy no se habían visto jamás —dice una mujer de las mayores, que tiene a dos muchachas de su familia a los lados.

Estoy de acuerdo con ella ¿Piensan casarlos en seis meses?

—No no se casarán en seis meses —explica Lilai, pero aún así todo esto me parece una puta locura—, solo es el tiempo en el que se formalizaría el compromiso. Lo ideal sería tener reuniones este mes y elegir a una de las familias que esté interesada en esto. La chica que se vaya a comprometer con mi hermano, viajará con nosotros a Argentina, para que se conozcan mejor. Transcurridos esos seis meses, viajaría también a Euskadi, donde pasaría un tiempo conociendo nuestras costumbres y nuestro idioma. Luego podrían casarse. Mi madre jamás aceptaría a una mujer que no hable euskara en la familia.

—Ni yo —murmura Haize.

En serio ya asumió que va a casarse.

—Especialmente —continúa Lilai—, considerando que el divorcio no es una opción entre nosotros. Y en eso debo ser enfática. —Lilai pasea la mirada entre nosotros, muy seria. Los broches de su pelo rubio destellan bajo las lámparas, tanto como sus ojos—. La palabra entre nuestra gente es vital. La mujer que se case con mi hermano, lo hará hasta la muerte. Y saben a qué me refiero con eso.

Mi corazón se acelera. Hace un rato, cuando Haize me dio la pulsera él...

Es tuya, vengas o no. Te la di para siempre.