5

311 50 5
                                    

Llegaron a la guardería después de haber estacionado el auto a dos cuadras porque no había lugar. Bobby mientras tanto iba dando saltitos por la acera, jugando acerca de "no querer pisar la rayas del concreto porque perdía" mientras Roier iba grabandolo desde atrás, riéndose al escuchar las cositas sin sentido que decía el otro.

–Appa, el timbre, quiero tocarlo–. El chiquillo alzó los brazos, Roier lo levantó sin dificultad y tal como lo pidió presionó el botón hasta que se carcajeó por el ruido tan estruendoso que hacía. Detrás del gran portón salió Quackity, amigo del castaño y maestro de Bobby quién encantado saludó muy efusivamente a su cuidador, removiendose cuál gusano para que lo bajara.

-Mijo no hagas eso, te me puedes caer.- reprendió, pero su criatura ni caso le hizo.

–Buenos días Roier, buenos días mi chaparrito lindo– el híbrido de pato le extendió los brazos al niño que no tardó en abrazarlo con fuerza también dándole unas palmaditas suaves en la espalda como era su costumbre desde que empezó a caminar.

–Buenos días miss– sabiendo bien que ese término le molestaba al mayor salió huyendo dentro de la guardería no sin antes ponerse gel antibacterial como era rutina y así entrar por fin por la puerta de madera que casi azotó al abrir.

Su hijo era un tornado por dónde quiera que estuviera.

–Roier cabrón, que le enseñas a ese niño– Y el mencionado hizo una cara de indignación que cambió a una sonrisa cuando el otro empezó a reírse. –¿Cómo has estado?, ¿que tal la taquería?, me enteré que el local está cada vez más concurrido–

Y sí, el pequeño negocio que había puesto junto a sus mejores amigos iba subiendo de puesto cada vez más, siendo casi reconocidos como "los mejores taquitos que hay en toda la zona" y eso le llenaba el pecho de mucho orgullo, saber que cada lágrima, sudor y esfuerzo estaba rindiendo frutos, aparte que su mayor motivación era su cachorro que lo impulsaba día con día a seguir adelante en busca de una mejor vida para ambos.

El pato lo guío al salón pese ya saberse el camino, ahí estaban los demás padres con los niños que jugaban entre ellos. Slime, Philza y Wilbur conversaban en una esquina riéndose de quién sabe qué. Baghera, Badboy y Fit estaban con sus respectivos niños que les mostraban las paredes llenas del arte que hacían todos los Martes en el taller que repartía Jaiden, si, la vecina de su departamento.

Saludó a todos levantando la mano, sonriéndole a unos otros y abrazando a varios de los pequeños que se acercaban a verlo.

Estuvo así por unos minutos hasta que Bobby apareció en su campo de vista tan sonriente como solo él sabía hacerlo, trayendo consigo una pistola de juguete que según él: era la más poderosa del universo y que podía destruir a cualquiera.

Su hijo estuvo a punto de apuntar pero se detuvo al ver cómo alguien entró disparado a abrazarlo e impactandose tan fuerte contra suya que ambos niños cayeron al suelo riéndose de forma escandalosa.

–¡Richarlyson!–. Sus nervios crecieron tan pronto vió al padre del recién llegado: Cellbit, un brasileño de cabello largo y mirada azul que siempre encontraba una manera de coquetearle.

–Buenos días– dijo cortés, levantando a los cachorros que ellos en su idioma señalaban el piso.

–Hola guapito–. Y eso hizo que un gran sonrojo se instalara en sus mejillas al no estar tan acostumbrado a esa clase de palabras, estuvo a punto de quejarse hasta que sin poder procesarlo bien un dardo azul dió de lleno en la frente del mayor, quien atontado tomó dicho objeto.

–No le hables a mi papá– gruñó Bobby aún con el juguete alzado cuál cazador mirando bastante molesto al brasileño que aún en shock solo atinó a reírse sorprendido por la situación mientras que Roier se disculpaba tomando al infante en brazos.

–¡Bobby Alt!, ¡¿que te he dicho sobre dispararle a la gente?!.

–No te quiero contestar–. Claro, estuvo por replicar pero un carraspeo sonó y ambos adultos miraron al dueño de ese sonido.

Y para Roier una gran explosión de colores invadió su vista apenas miro a los ojos al recién llegado: amatistas.

Você leu todos os capítulos publicados.

⏰ Última atualização: Sep 27, 2023 ⏰

Adicione esta história à sua Biblioteca e seja notificado quando novos capítulos chegarem!

That's my baby |Spiderbear|Onde histórias criam vida. Descubra agora