ALPHA IS ENIGMA WIFE

CAPÍTULO 4: "Cinnamon no es un niño, sino un perro travieso"

Buenas tardes....

::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Oficina Nacional de Detectives

"¿Estás seguro de que no me dejarás entrar?" Cumin palmeó suavemente el hombro de la dulce personita cuando vio que su dulce rostro estaba lleno de alegría y ansiedad, una expresión difícil de explicar. 

Normalmente, Cumin, esta persona nunca puede guardar un secreto durante más de unas horas, incluso después del entrenamiento cuando lleva siendo espía durante dos años, no ha cambiado. 

El gemelo más joven sabía que había alguien esperando detrás de esa puerta y también sabía por qué las autoridades lo habían elegido para realizar esta nueva función. Esta gran tarea, debería haberse elegido mediante un examen, pero Cinnamon, simplemente había sido elegido.

Estaba claro que ese loco de Luther probablemente había ido a suplicarle a su padre y él había aprobado la nueva misión, solo por querer volver a estar junto a Cinnamon. Pero esta vez, el gemelo más joven definitivamente no lo aceptaría porque aún recordaba las palabras que le había dicho su amiga cercana Chelsea en el pasado.

“Está bien, Phi Cumin. Puedes dejarme solo. Estaré bien”.

"Pruébamelo", le dijo a su amado hermano, cuyo rostro se giró para con su delgada palma agarrar el largo brazo de su hermano. 

"Si no quieres aceptar esta misión, puedes enviarme a mí. Si esa cosa te hace... estoy angustiada."

“Estoy bien, Phi Cumin. Por favor, discúlpame primero." Cinnamon soltó su mano e inmediatamente abrió la puerta de madera sin mirar el rostro de la otra persona.

Mientras salía de la habitación con con sus labios apretados en en línea fue sorprendido por una voz que lo llamaba desde el otro lado del pasillo.

"¡Cinnamon! ¡¿Cumin?!” Se podría decir que los ojos de quien lo llamaba no veían bien, por lo que, tuvo que sacar sus gafas del bolsillo para usarlas y así poder bien a ambas personas. Al usar aquellas gafas, parecía la secretaria del presidente como en las cincuenta sombras.

Los hermanos gemelos vieron que la persona que pasaba por la multitud y que corría a ellos, era una vieja amiga del pasado y con la que no se habían visto desde la graduación.

“¡¡Chelsea!! Es realmente extraño encontrarte ahora, ¡Pero te extraño!" 

La mujer Omega corrió para alcanzar a sus amigos rápidamente, mientras llevaba en ambos brazos un montón de documentos consigo, incluso tuvo que dejarlos en el suelo para poder abrazar a sus amigos.

El aroma a fresia entró por las fosas nasales de Cumin como era de esperar, por otro lado, su hermano no había cambiado mucho y ningún aroma podía encontrar. Pero aún así estaba muy sorprendido al encontrarse a Chelsea en esta oficina.

"En serio, ¿ustedes estan aquí? No es de extrañar que haya estornudado hace un momento".

“Espera, pero ¿qué estás haciendo aquí?" Dijo mientras guardaba los documentos nuevamente y luego continuó. "No me digas...." La joven levantó la mano para taparse la boca, con una mirada atónita mirando el hermoso rostro de la otra persona. 

"¡Ay dios mío! ¡No me digas que aceptaste lo que te ofrecieron! ¡¡¡No, irás a la misión?!!” 

Si Cinnamon supiera que su amada amiga Chelsea había estado dispuesta a rebajar su dignidad para conseguir el puesto en el departamento de documentos de la oficina de detectives, de seguro estaría gritando, quejándose y corriendo como una rata atrapada en una jaula.