⃟🍾CHAMPAGNE CONFETTI (Kookmin) Written by T.M.G.R

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Fiesta de espuma
2

La música en la casa de Jackson se escuchaba desde 5 cuadras antes de la casa. Batallaron un poco para encontrar un espacio donde aparcar pues habían asistido muchas personas y por lo tanto, muchos autos.

— ¿Los chicos ya están aquí? — pregunta Jimin.

— Si. Me dijeron que vendrían delante.

Bajaron del auto y se encaminaron a la casa. Habían algunas personas afuera de la mansión pero el interior estaba colmado de personas. Jimin fue jalado del brazo y con él se llevó a Jennie. Había sido Yoongi.

— Joder! Me asustaste!!

Se quejó Jimin y Yoongi solo comenzó a reír mientras los llevaba dónde Hoseok y Jin. Los piropos para Jimin en el camino se llovieron pero él hacía oídos sordos a todos pues los concideraba groseros y un poco subidos de tono.

El grupo de amigos fue recibido por un alegre Jackson ya con unas copas de más y algunos piropos para Jimin los cuales volvió a ignorar.

Se encaminó a la cocina a por unos tragos para él y Jennie comenzando a romper la primera regla que su madre le había puesto. En su cabeza estaba beber pero no emborracharse. Así que tanto no estaba rompiendo.

— Solo un vaso, no creo emborracharme con eso.

— ¿Seguro?

La cocina estaba vacía o eso pensó el hasta que le hablaron desde una esquina. Se sobresaltó tanto que dejó caer la botella de vodka al suelo, quebrándose esta y derramando todo el líquido por el suelo.

— Dios que susto!!!

— Lo siento. No quería asustarte.

El extraño capturó toda la atención de Jimin desde que este se giró a mirarlo. Era un chico malditamente guapo, alto, con tatuajes por todos sus brazos. Su camiseta desmangada lo dejaba ver eso a la perfección. Traía unos pantalones de cuero que se ajustaban perfectamente a sus largas y bien trabajadas piernas, y su fina sintura. Su cabello negro perfectamente peinado caía sobre su frente con algunos rizos.  Salió de su ensoñación cuando el chico frente a él soltó una risita y relamio sus labios tocando levemente los piercings en ellos. Luego soltó la oración que hizo que el rostro de Jimin se volviera completamente rojo.

— Te estás babeando ricura.

Jimin rápido apartó su mirada y cubrió su boca. Maldijo internamente cuando se dió cuenta de que si, efectivamente se había babeado un poco. ¡Pero como culparlo! Ese chico parecía esculpido por los dioses.

En un intento de ignóralo, se agachó a recoger los vidrios rotos de la botella que se había caído.

— Vas a lastimarte. Deja eso.

— Fue mi culpa así que- Ah! — se quejó

Jimin retiró con rapidez su mano de los vidrios y se sorprendió aún más cuando fue alzado por la cintura y sentado en el mesón de la cocina. Un poco desconcertado vió como el chico comenzó a limpiar los vidrios con un recogedor y los echó en la basura. Luego se acercó a él y tomó su mano lastimada para revisarla.

Jimin solo podía ver el hermoso rostro del chico mientras este le limpiaba la pequeña herida bajo un "te lo dije" . Cuando terminó, de su bolsillo sacó una curita pequeña con dibujos de patitos. Algo que dejó a Jimin aún más desconcertado pues obviamente esto no pegaba con su personalidad gótica. Pero ya saben lo que dicen. No juzgues a un libro por su portada.

— g-gracias... — murmuró Jimin aún mirando su rostro.

— Por nada ricura.

Su rostro volvió a encenderse ante esa forma de llamarlo que tenía el chico. Continuó observándolo mientras el chico preparaba un trago en un vaso y luego se lo extendía a él.