Nueva vida

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Narrador Omnisciente

Kyomi Aoki, una de las heroes mas jovenes que se habían visto en más de 20 años, a los 16 años ya se había graduado de la U.A con honores y a los 18 años ya había sido la mejor de su agencia y había quedado en el top 10 de los heroes del país, sin duda tenía un futuro prometedor.

Y su fisico era aun mas sobresaliente, su cabello negro dejaba si aliento a sus fans y cuando los miraba con hermosos ojos dorados era como ver dos joyas de oro, su cuerpo tambien era envidiable aunque no tenia pechos voluptuosos sus caderas eran anchas y sus muslos gruesos.

Durante toda su vida había tenido hombres detrás de ella que la deseaban sólo por su cuerpo y fue solo por esa razón que ella nunca tuvo una relación, no deseaba involucrarse con extraños que la dejaran después de estar con ella luego de una noche, pero eso cambió cuando conoció a Katsuki Bakugo.

A sus 19 años estaba acostumbrada a ir a fiestas y cuidar de su mejor amiga, pues ella disfrutaba de emborracharse y era Kyomi quien siempre la cuidaba para que llegara a salvo a su casa, fue ahí donde conoció a este rubio cenizo de ojos rojos, la primera impresión que tuvo de él fue que era un grosero de lo peor pues trataba a todos como basura, pero eso cambió cuando el la ayudo.

-Hey nena -un hombre de al menos 50 años se habia acercado a la chica de cabello negro mientras esta intentaba ayudar a su amiga a despertarse- no quieres dejar a tu amiga aqui y venir conmigo a divertirnos esta noche -siguia hablando aquel hombre con una sonrisa desagradable-

Kyomi solo lo miro de reojo y no le tomo importancia, pues siempre debía lidiar con esa clase de sujetos y sabía que si decía algo todo empeoraria, pero ese hombre no se rendía y siguió intentando llamar la atención de la joven, la situación había escalado a tal punto que el grupo de Bakugo se dio cuenta.

-Vaya que parece que hay una situación acalorada por alla -hablo Mina mientras tomaba un poco de cerveza-

-Que asco, ese hombre parece acosar a esa chica -hablo esta vez Denki mientras fruncia el ceño-

-Maldita sea ni siquiera dejan que tome mi tiempo libre como quiero -hablo esta vez el rubio, Bakugo se dirigió lentamente y con es ceño fruncido hacia aquel hombre que estaba insultando a la chica-

Ella no decía nada, solo lo miraba con seriedad, hasta que el levanto su mano e intentó golpearla, Bakugo lo detuvo y volteo la mano de aquel asqueroso individuo para después mirar a la chica quien seguía manteniendo tranquilidad en su rostro.

-Es un maldito hijo de perra, creyó que iba a dejar que golpeara a una mujer -hablo molesto el rubio mientras afirmaba su agarre para evitar que ese hombre se moviera-

-Basta -finalmente se escuchó la voz de la chica, una voz tranquila y dulce, el la miro y ella solo le sonrió y tal como ella pidió soltó aquel asqueroso viejo que la estaba acosando- señor, parece que los tragos lo han dejado bastante mal -hablo con dulzura mientras se agachaba a la altura de aquel hombre pues había caído al suelo gracias al dolor- pero, eso no le da derecho a aprovecharse de mí -esta vez ella estiro su mano y activo su Quirk-

De una herida que tenía en su mano salió una cuerda de sangre y después con esta formo una aguja, lo suficientemente afilada como para perforar la piel, después la punzo un el brazo de aquel hombre y este de inmediato se retorsión de dolor, pues ella estaba destruyendo parte de sus células para que así él aprendiera su lección.

-Por favor, la próxima vez que vea a una chica, no la toque ni la insulte -volvió a decir la pelinegra con una sonrisa mientras sus ojos dorados se iluminaban-

El hombre se levantó con rapidez y huyó del lugar, Bakugo la miro ingenuo, pues no pensó que una mujer que parecía ser tan delicada y amable pudiera hacer un acto tan peligroso y eso le hizo sentir curiosidad por aquella chica, ella por su lado lo miro y le dio una reverencia.

Una obligación de amar (Bakugo Katsuki x  Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora