El profesor de Anatomía || JK

Parte 32

Los días pasaron pero cada vez sentía aquella presión, tenia la necesidad de querer tenerlo conmigo otra vez. Luego de todo me di cuenta que lo seguía amando pero ¿el aún lo hace conmigo?

—yo creo que se parece a Jeon, nada más falta que le guste la anatomía también — Jimin miraba atentamente a MinJoon.

—lo vas a asustar si lo sigues mirando así — le di un leve empujón — déjalo dormir, Jimin.

— ya — me miró para después rodar sus ojos — Vamos a salir hoy.

—¿a donde? — fruncí mi ceño.

—a un lugar tranquilo, para relajarnos ambos — sonrió — viene Sana.

—¿de verdad? — eso último me hizo abrir mis ojos de golpe — por fin la veré.

—quiere conocer a MinJoon también — tomó mi bolso y el del bebé sin preguntar — así que vamos.

—espérame y me pongo algo mejor para salir — mencioné.

Me levanté y busqué algo rápido en el armario, me arreglé un poco mi maquillaje y sin más salimos.

—tenemos que recoger a Sana — dijo Jimin sin apartar su mirada del frente — está a 7 cuadras bajando.

—Está bien.

Mientras Jimin conducía noté que cada vez se acercaba a donde vivia antes, hasta donde recordaba Sana no vivía de esos lados.

Finalmente se estacionó en la esquina de esa calle.

—¿por qué aquí? —pregunté curiosa.

—esa fue la dirección que me envió Sana — miró su teléfono checando que si sea la dirección.

—allí viene.

Sana venía de aquellos lados, su piel lucia más pálida, estaba más delgada y su cabello estaba aún más largo; en su rostro reflejaba una sonrisa algo agotada. Se acercó al carro, y al entrar mi mirada se enfocó a lo lejos, buscando a alguien.

Algo en mi se revolvió.

—¡Lauren! — la voz de Sana me hizo girar a los asientos de atrás.

—Sana— le regalé una sonrisa y me acerqué  para poder abrazarla, pero se dificultó un poco ya que llevaba el bebé en brazos — te he extrañado tanto.

—¡MinJoon! — su mirada pasó a mis brazos, viendo al bebé— que lindo es.

—Gracias — le sonreí.

—¿lo puedo sostener? — me miró ansiosa así que accedí.

Con cuidado le pasé al bebé para que lo sostuviera mientras llegaba donde mi madre, ya que ella se ofreció a cuidarlo un rato mientras salía con mis amigos.

Llegamos y antes de entregar al bebé, Sana le tomó una foto de recuerdo. Finalmente se lo entregó a mi madre, la saludamos y sin más nos dirigirnos a nuestro destino.

[...]

—El parque de atracciones se ve realmente bueno— mencionó Jimin.

—Yo creo que si es buena idea — Sana me miró sonriente.

—Después Jimin anda vomitando — mencioné recordando lo sucedido la última vez que vinimos — pero esta bien.

Mientras Jimin hacía la fila para comprar los boletos, yo me quedé hablando con Sana.

—Estabas tan perdida — mencioné — ¿todo ha estado correcto?

—De hecho si — me sonrió — pero he estado muy agotada.