sixty-eighth ;; culpables.

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—Kim SungMin...

No recuerdo alguna otra vez en mi vida en la que me haya sentido de esta manera antes de comenzar una salida. He salido con varios chicos a lo largo de mi adolescencia, la cantidad no llegaba a ser ni siquiera considerable, fueron realmente muy pocos, pero con ninguno de ellos me había sentido tan ansiosa. Los minutos pasaban tan torturosamente lento que comenzaba a sospechar que el tiempo estaba jugando conmigo.

Solo faltaban dos minutos, dos miserables minutos que no pasaban por mucho que yo quisiera. Juraría que en sesenta segundos he mirado tantas veces el reloj que deberían crear un récord solamente para ello. “La chica que más veces observó la hora en menos de un minuto.” Se escuchaba demasiado ridiculo y aún así no se comparaba a lo estúpidamente patética que me sentía yo en ese momento.

Estaba parada en la puerta de la escuela, con el corazón tan acelerado que parecía haber recorrido a pie el mundo entero, esperando tan ansiosamente por un chico que no estaba segura de si iba a aparecer o simplemente iba a dejarme plantada. Podría ser una venganza perfecta, tenerme esperando en la puerta de la escuela el tiempo máximo que yo misma me permitiera esperar y nunca aparecer. De hecho, estaba tan segura de que era lo que sucedería que todavía no entendía la razón de que siguiera parada en el mismo lugar.

Suspiré mientras daba vueltas a mi celular en mi mano. Sabía que no iba a sonar, que de su parte no iba a recibir ningún mensaje avisándome absolutamente nada, que si iba a venir o no era algo que definitivamente tenía que averiguar cuando llegara, no obstante no podía evitar encenderlo a cada rato, para observar la hora y estar al pendiente de algún mensaje que pudiera enviarme. Lo único que recibí durante ese lapso de tiempo fue un mensaje de NaYeon en el que me deseaba suerte en la salida.

“¡Mucha suerte! No te preocupes, seguro que aparece pronto.”

NaYeon estuvo mucho más que presente durante todo el proceso de preparar esta salida. De hecho, yo no había hecho demasiado, había dejado que ella se encargara de muchas de las cosas, o al menos las más importantes. Me había dado cuenta de que definitivamente yo no conocía para nada a JungKook, que no sabía lo que le gustaba hacer, los lugares a los que le gustaba ir, lo que le parecía aburrido, lo que no. Lo único que sabía era que le gustaba tener sexo, pero honestamente no iba a preparar una salida para follar, más que nada porque sabía que si eso sucedía sería la última vez que nos veríamos.

Envuelta en ese pensamiento y sin tener la menor idea de que hacer, decidí acercarme a ella. Sabía que ellos se llevaban bien, así que podría ayudarme, al menos, a tener una idea de qué era lo que estaba buscando hacer esta noche. Para mi suerte, ella estaba más que dispuesta a ayudar y me dijo muchas cosas que definitivamente fueron importantes. Íbamos a tener una pequeña salida común y corriente, dijo que los lugares ostentosos y aburridos no le gustaban a JungKook así que definitivamente no podía pensar en reservar una mesa en algún lugar caro.

Además, lo único que yo quería era que conversáramos, ya que la última vez que lo hicimos fue definitivamente un desastre. Quería hablar con él y decirle todas las cosas que me había guardado y que él también hablara conmigo, no me importaba si lo que tenía que decir eran ofensas, estoy segura de que podríamos resolverlo. Así que después de pensar por, al menos, dos horas, NaYeon me dijo que podríamos conversar en algún bar, que tuviera buen ambiente y que pudiéramos tomar algo mientras tanto, al fin y al cabo no iba a ser más que una conversación. Si las cosas se arreglaban podríamos comer algo en alguna parte o en el propio bar.

No hubo demasiada planificación que digamos. Lo único que estaba más o menos planificado era mi vestuario, cuando le pregunté que ella creía que podría ponerme dijo que tenía que ser definitivamente algún vestido. Después comenzó a decir muchas cosas sobre que había que tocar algún punto débil de JungKook y que definitivamente lo que tuviera puesto era uno de sus puntos débiles, aunque eso era algo que yo ya sabía sobre el. Me puse un vestido que me prestó EunJi, le dije que quería resaltar un poco y me prestó un vestido negro ajustado, que no era nada fuera de lo normal, pero yo no tenía ningún vestido.

egotistical ;; jjkWhere stories live. Discover now