12vo- Los dos

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8:00 am.

Una joven soltó un quejido entre sueños justo antes de removerse incomoda entre las sábanas de la cama.

-Menuda mierda- susurro cubriendo su cara con su brazo. Su cabeza le duele horrores al igual que todo su cuerpo.

-¿Quieres algo de comer?- una voz a su lado la hizo sonreír. -¿Estás cansada?- una vez más esa dulce voz le hablo al oído.

-Un poco,  me duele mucho la cabeza- murmuro tranquila girandose para abrazar a su acompañante. -Me gusta cuando podemos estar así, juntos- comento antes de darle un pequeño beso sobre los labios, por instinto el muchacho la abrazo por la cintura acercándola un poco más. 

-Oigan, yo también quiero uno de esos- justo cuando el beso se iba a poner más lujurioso una nueva voz se dejó escuchar, Sakura se separó de su pareja para rodar los ojos.

-Ya me parecía que estabas muy callado... Creí que Kami me había librado de ti- Murmuro sería. A pesar de llevar casi cuatro años saliendo aún no se acostumbra del todo a él...

-No dices eso cuando me estoy comiendo tu coño, cariño- contesto mordaz haciendo avergonzar a la fémina.

-¡Sukuna!- Itadori se sonrojo fuertemente al escuchar lo que dijo esa vulgar boca... Ese desgraciado que vive en su interior siempre hace lo mismo cuando está con Sakura, se aprovecha de la situación para... Saborear a la pelirrosa.

-Para algo debes servir, tienes suerte de que al menos te dejo sentir mí dulce néctar en tus sucias fauces- y ahí estaban de nuevo, Sakura y Sukuna suelen discutir mucho y eso es algo que lo estresa en demasía.

-Hay no te creas la gran cosa, he probado a mejores mujeres que tú... A poco crees que eres la única que a calentado la cama de Itadori jajajaj- ... El pelirrosa se quedó con la boca abierta al escuchar eso y ...paso. La mano se su novia fue a dar en su rostro.

-¡Eres un mentiroso!, ¡Me dijiste que fui la primera!- las lágrimas empezaron a salir de los jades de la fémina.

-Jaja, solo fue para quedarse con tu virginidad, ahora vete- otra vez Sukuna abrió su boca humillando a la Haruno quien tomo su ropa del suelo y se encaminó a la puerta.

-¡Eres un imbécil Sukuna!, ¡No, los dos son unos imbéciles!- la pelirrosa se puso sus pantalones y su blusa a toda prisa intentando que sus lágrimas no salgan frente a su pareja. -¡Los odio!- grito con rabia. Se suponía que ella había sido la primera vez del muchacho, ella fue quien le robó o mejor dicho quien obtuvo su inocencia y eso lo hacía sentir muy especial.

Pero él lo dijo... Su novio solo mintió para obtener su virginidad. Y eso le dolió mucho.

Antes de que el joven pudiera decir algo la puerta se abrió y se cerró con fuerza.

-¡¿Ves lo que hiciste?!, ¡¿Por qué tenias que decir eso?!- Itadori de llevo una mano a la cabeza para jalar sus cabellos algo histérico. Si no fuera por ese maldito demonio que tiene dentro él podría tener un noviazgo normal con Sakura, con su hermosa Sakura.

Esa muchacha que le robo el corazón desde el primer momento en que la vio, cuando tenía unos dieciséis  años, ese cabello rosa y esos ojos jades fueron lo que más le llamo la atención. Aunque en un principio creyó que podrían ser parientes y eso le dio algo de asquito, osea... Le gustaba una chica que podía ser su familiar pero logro descartar esa idea casi de inmediato.

La Haruno le correspondió después de un año insistiendo, nunca lo juzgó al saber la verdad sobre su maldición y de hecho siempre lo apoyo en todo lo que él quisiera, Sakura fue como ángel en su vida.

Sakura Haruno [one-shots lemon] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora