~unica en verdad~ ||•Shinichiro x Hinata•||

capitulo 6

- Qiu- recibio Madara.

Con una reverencia el peliblanco se coloco delante de el mayor. Qiu se encontraba muy agitado, pues habia venido corriendo desde su puesto de trabajo hasta Madara.

-señor Madara, la Bruja.... hum perdon, Hinami ha sido llevada de urgencia a el hospital, al parecer... su hija nacera antes.

Madara miro atento a Qiu, se levanto de prisa y le ordeno que lo siguiera.

-lleva a unos hombres a vigilar, quiero saber cuando nazca- ordeno Madara.- que nadie le haga daño.

Qiu asintio para volver a correr hacia su moto y ordenar a otros que lo sigan.
Las manos de él Uchiha temblaron un poco, con desespero saco los guantes de cuero negro, que comenzaba a hacer que sus manos sudaran, y los lanzo a alguna parte de el pasillo, la sirvienta pronto los levanto.

-¡llamen a Izuna!- ordeno Madara saliendo hacia el patio trasero.

El viento dio contra su rostro, causandole un leve mareo que lo hizo tambalearse, sentia tanta desesperacion... todo por que ella no le permitia acercarse.

Hinami intento acercarse a Madara para conseguir dinero, la fortuna que "se merecia", Madara no tuvo problemas, solo era una aventura, pero tan pronto se embarazo, ella corrio hacia los Hyuga y se caso con su primo Hiashi.

Hinami no pudo ocultarle el hecho de que ese bebé que esperaba pertenece a su descendencia. Tampoco con las pruebas que consiguió Qiu de los Hyūga, pues el peliblanco la habia estado siguiendo.

Un profundo suspiro salio de el fondo de su pecho, su hija estaba a punto de nacer y no podia estar cerca... queria estar ahi, ser el unico en cargarla y no ese doble cara de Hiashi.  Protegerla de la familia Hyūga, esa familia que desde un principio quiso intervenir en el desarrollo de su primogenita.

Se preguntaba miles de veces a lo largo de las noches, ¿que habria pasado si no hubiese mandado a Qiu a cuidar su desarrollo?....

Aun mas intranquilo que antes, comenzo a pasear por el basto jardin, encontrando una pala de algun jardinero... a esta hora era el almuerzo.

-necesito distraerme- susurro Madara- aun no nace y ya tiene mi mundo de cabeza.

Tomando el mango de la pala, la clavo en el hermoso cesped recien cortado, quitando una gran parte de la zona, comenzo a excavar mientras pensaba en lo que pasaria desde hoy... lo mas probable es que tendria que pagarle a la bruja de Hinami para que le permita verla unas horas a la semana.
Tambien tendria que contratar a alguien para que la cuidará, lo mas seguro es que Qiu seria el "ascendido" a guardian de su hija.

No queria imaginar en lo que pasaria si la dejara sola en esa mansión... Hiashi la odiaba mas que un Hyūga promedio odia a cualquiera, Hinami la tendria cerca solo por beneficios, los demás familiares... Madara estaba seguro que ellos ya planeaban algo.

-malditos Hyūga- maldijo Madara.

-¿sabes? Lo que estas cavando es perfecto para un estanque koi- menciono Izuna, ignorando lo que su hermano habia dicho antes

-¿un estanque..?- susurro Madara viendo la circunferencia que en si no era perfecto.

-se veria muy lindo para que sea un regalo para mi sobrina- mencionó Izuna.- tengo nueva informacion de Hinami, las criadas son muy maltratadas en la mansión  Hyūga.

-bien te escucho- respondio Madara tomando de nuevo la pala- ¡oye, Rinko!

Un joven de cabello largo y amarrado en una coleta alta se acerco a el mayor de los Uchiha presentes, saludando a ambos de manera educada esperando las ordenes