Luzu y Quackity, por obra del destino terminan encontrándose en una cafetería, para después por un imprevisto ser separados, ¿Cómo podrán volver a encontrarse?
Cierta noche, un pequeño azabache se encontraba entrando a una pequeña pero linda cafetería. Se sento en una mesa al lado de la ventana, ordenó un café , se sumergió en sus pensamientos mientras miraba por la ventana hacia el mar.Podía observar las pequeñas gotas que caían del cielo, no era para nada una lluvia fuerte, al contrario, era una pequeña llovizna.
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Mesas atrás, un chico de cabello castaño, se encontraba sentado, no tenía mucho que hacer y no tenía interés en mojarse, alzó la vista, pudo ver a un chico de cabello negros, llevaba un pequeño gorro, una sudadera azul con rayas blancas. Por un momento ambos cruzaron miradas, el castaño por su parte desvío la mirada, no se dio cuenta cuando, pero el chico ya estaba parado frente a su mesa.
-Sabes, la lluvia suele brindar calma, o al menos, eso hace en mi- dijo con una bella sonrisa aquel chico azabache.
El castaño lo miró por un momentos, él solía ser reservado.
-Creo que tienes razón, la lluvia es una de las cosas más bellas que existen- respondió por fin.
Se levanto un momento de su silla, se colocó al lado del chico, tomo la silla que estaba frente de él y la hizo para atras, seguido de esto hizo una pequeña seña- ¿Gustas acompañarme un rato?-
El chico dio una pequeña sonrisa y asintió con la cabeza- Me encantaría- dijo para sentarse en la silla, lo ayudo a hacerse un poco para enfrente y después volvió a su lugar.
- Mi nombre es Luzu, encantado de conocerte-
El chico dudo un poco, - Quackity, me puedes decir Quackity-
-Quackity- susurro a lo bajo Luzu, no era un nombre común, sin embargo, para Luzu era un nombre muy bello - Dime, Quacks, eres de aquí?, lo pregunto por tu acento, no me mal entiendas, es muy lindo, pero no es un acento que se escuche por aquí.- estaba algo nerviso, pero lo ocultaba, no sabia si eso molestaría a aquel chico.
-No, yo soy de México, aunque actualmente estoy viviendo en Estados Unidos, solo estoy aquí por vacaciones y para alejarme un poco de la monotonía que tenía- dio una pequeña risa y volvió a hablar- me quedaré acá este mes y después volveré a Estados Unidos.
-Yo estuve viviendo un tiempo en Estados Unidos, pero al final decidí volver a España, aún así hay veces en las que voy de vacaciones- comento, no era realmente bueno siguiendo conversaciones.
¿Esta bien dar esta clase de información a desconocidos?, claramente no, sin embargo, esto no se sentía peligroso.
-¿Te gustaría ir un rato a caminar por la playa?- pregunto con un poco de miedo, es decir, era muy arriesgado salir a caminar por la noche con una persona que conoció hace literalmente no más de 20 minutos. Sus padres siempre lo regañaron por ser tan confiado, al parecer aún no aprendia.
Luzu lo penso un poco, al final termino aceptando, ambos se levantaron de sus lugares, pagaron las bebidas que habían consumido y salieron a caminar por la playa. La lluvia no era un problema, a ninguno de los 2 le disgustaba, al contrario, lo disfrutaban.
