Campamento Alfa

28. Una vida.. contigo

Brody miró alrededor de su habitación con nostalgia.

La cama estaba hecha, las sábanas en las que él y Nate habían pasado innumerables horas ahora estaban estiradas contra las esquinas y metidas debajo cuidadosamente. El escritorio en la esquina estaba completamente en blanco, sin papeles ni libros impresos esparcidos sobre su superficie.

La habitación estaba terriblemente vacía.

Hace unos días habría pensado que esta visión sería triste, como el final de una gran película o el tramo final de un viaje por carretera, como el final de algo especial, y sí, sabía que se lo iba a perder. acampar.

Iba a extrañar ver la cara de Lucy todos los días y hablar con Kayden. Iba a extrañar el sarcasmo de Lucas y la dulzura de Annie. Había muchas cosas sobre este campamento que iba a extrañar, pero el último día no sintió tristeza, sintió esperanza.

Dejaba este lugar para comenzar una nueva vida, para realmente comenzar a vivir su vida. Este lugar era mágico, una experiencia que no pasaría un día sin recordar, pero la vida lo esperaba fuera de estas vallas altas, y estaba de acuerdo con eso.

Brody envolvió sus dedos alrededor de la maleta, echando un último vistazo a la habitación antes de irse. Cuando se abrió el ascensor, entró y lo bajó hasta el último piso.

Las puertas de espejo daban al vestíbulo. La habitación estaba llena de gente que dejaba sus maletas en el pequeño espacio. Miró a través de la gran sala, sus ojos buscando a sus amigos.

Los encontró de pie contra una de las paredes. Kayden y Lucy se estaban riendo de algo, sin darse cuenta cuando Brody se les acercó. Nate, por otro lado, pasó junto a ellos en el momento en que vio a su pareja.

Brody de repente tenía brazos voluminosos envueltos alrededor de él suavemente durante unos segundos. Sonrió mientras se inclinaba hacia el abrazo, respirando el aroma de Nate y dejando que su sensación calmante lo inundara.

Regresaron a donde estaban Lucy y Kayden y Brody estacionó su maleta junto a la de Nate. —Te dije que eran adorables—, Lucy sonrió con orgullo mientras hablaba con Kayden.

Kayden sonrió—, Sí, sí, son adorables—spondió para seguirle la corriente, pero Brody sabía que su relación no le molestaba.

No había visto a Kayden desde que se enteró, pero Nate le había dicho a Brody que su amigo se lo había tomado bastante bien, incluso diciendo que lo había estado sospechando en las últimas semanas.

Los cuatro salieron del vestíbulo, caminando hacia los jardines. Nate y Lucy iban delante, charlando sobre algo que Brody no podía oír.

Kayden caminó a su lado,

—Hola— sonrió.

Brody le devolvió la sonrisa, —Hola.

—Nate me lo dijo —dijo Kayden con cierta torpeza—. Ya sabes, sobre ustedes.

Brody asintió—. Sí, lo sé.

—Solo quería decir que siento mucho lo de tu padre—le dijo Kayden en un giro de los acontecimientos.

Brody estaba seguro de que iba a decir algo sobre él y Nate, no sobre su padre.

—Nate me dijo que está muy enfermo y que debe ser muy duro para ti. Siempre estoy a una llamada de distancia si me necesitas. Ya sabes, mi novia y yo siempre podemos salir y verlos cuando sea, solo llamen y podemos estar allí.

Había una sinceridad y cariño en La voz de Kayden que hizo que Brody sintiera una vez más que había encontrado un verdadero amigo en Kayden.

—Gracias—respondió Brody—. Significa mucho para mi..