Londres, Inglaterra.
—Buenos días—tomo asiento en la mesa de la cafetería, y los ojos de la élite se fijan inmediatamente en mi
Me repasan de pies a cabeza en busca de los moretones, de algo que esté fuera de lugar como la última vez que me vieron.
Una semana ha pasado, oficialmente soy libre de tratamiento. Bueno, al menos hasta que tenga que volver para retomar la terapia porque Alex solicitó mi presencia con carácter de urgencia.
Van a dejarme dirigir la misión Mascherano. Esa es una oportunidad increíblemente grande para mi, sobretodo ahora que estoy en proceso de ascenso y tengo que demostrar que tengo lo necesario para ocupar mi puesto como coronel.
No he hablado con el ministro en persona, tengo que hacerlo dentro de un rato, de hecho, pero es el cumpleaños de Patrick y tenía que verlo.
»Feliz cumpleaños a ti—beso la mejilla de mi cuñado, haciéndolo reír mientras le entrego la bolsa de regalo—. Espero que lo disfruten... los tres.
Sus cejas se levantan y sonrío, viéndolo abrir la bolsa para encontrarse con la pequeña caja negra dónde se encuentran los boletos para un crucero por el caribe dentro de una semana.
—Mierda, Addie—ríe negando—. ¿Te cansaste de nuestra presencia?
—Me cansé de que no tomen vacaciones—ruedo los ojos antes de ser envuelta por sus brazos
—Gracias, eres increíble—besa mi mejilla y me encojo de hombros
—Lo sé—miro a Christopher a mi otro lado y me inclino a tomar una papa frita de su bandeja, a lo que él sigue comiendo como si nada mientras la élite frunce el ceño
Nos miran con extrañeza, sobretodo a Christopher, a quien miran como si le hubiera salido una especie de tercer ojo o algo por el estilo.
»El vuelo fue agotador, tengo muchísima hambre—me quejo—. ¿Cómo está todo por aquí? ¿Qué tal el entrenamiento para la misión?
—Todo bien—Simón asiente, mirando a Christopher como si estuviera esperando algo—. De hecho, fue grandioso, hiciste un gran trabajo.
—No lo hice sola—le guiño un ojo a Parker y él me ofrece una sonrisa cordial
—Debiste comer en el avión, más de veinticuatro horas de vuelo no son cualquier cosa—Christopher desliza su jugo de naranja en mi dirección, antes de tomar una papa frita y llevarla a mi boca
Sonrío, tomando el jugo y dejando que ponga la papa en mi boca para que yo pueda comerla.
—¿Qué diablos...?—murmura Alexa, y Patrick estalla en una carcajada que llama la atención de todos
—Lo siento, lo siento—se disculpa, mirándonos con diversión
—Debo ir a una reunión con tu padre, pero necesito verte más tarde—murmuro en dirección a Christopher, quien fija sus ojos en mi por primera vez desde que tomé asiento
Y me quedo sin aliento.
Porque... el me ve. No de forma literal, es decir, sus ojos sobre mi... el gris se ve diferente, su mirada es tranquila, suave. No es el Christopher fastidioso con el que voy a hablar más tarde para acabar con esto.
—Voy a estar en mi departamento, ya acabé aquí hoy.
—Por supuesto, te veré ahí supongo—pero entonces recuerdo que debo hablar con Arthur y probablemente no querré estar ahí luego de eso—. Pensándolo bien, ¿puedes ir a mi edificio y esperarme abajo? Quizás me vaya contigo a la fiesta de Patrick esta noche.

BINABASA MO ANG
Flames of passion [Christopher Morgan]
FanfictionÉl es un imbécil, prepotente. Nada con lo que quiera relacionarme en ningún punto de mi vida. Pero hay deseo entre ambos, llamas de pasión que parecen no querer apagarse sin importar mis intentos de poner distancia. Y hay un problema. Christopher Mo...