capítulo O9

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Jimin acomodo su playera de
colores brillantes escogida por su
pareja, llevo sus lentes de sol a su
cabeza mirando como su prometido
intentaba arreglarse aquel conjunto
bonito que había comprado para
aquel día en especial. Sonrió
enternecido ante sus mejillas
rojizas y su pequeño puchero que
llegaba a formarse en sus labios por
el delicado y hermoso traje.

- Jungkookie ¿Quieres que te
ayude?-pregunto acercándose
a su compañero, olfateando sus
exquisitas feromonas expulsadas
con frustración.

Jungkook negó susurrando un "no,
yo puedo" antes de seguir forzando
a la prenda para que le entrará.
La bonita camisa de encaje de
figuras en rosas no cerró sobre su
vientre causando que de la nada
comenzará a botar pequeñas
lágrimas sintiéndose fatal consigo
mismo. Jimin se alertó para
luego correr hacia el  cuerpo
tembloroso de su omega.

- Esta bien, Jungkookie, calma.

Los pequeños hípidos se hicieron
más sonoros causando un malestar
en el lobo de Jimin, quién hace
ya, cinco meses de gestación había
estado mucho más atento a todo lo
que pasará a su alrededor.

Tenía que proteger a su compañero
y brindarle comodidad.

-Ya no me queda nada de mi ropa
que me hacía lucir bonito. - lloró
restregando su rostro en el hombro
de su pareja.

Jimin rió enternecido llevando
sus manos a envolver el vientre de
su pareja.

-Tu siempre eres bonito, así
que saca esos pensamientos de
tu cabecita amor, eres el mismo
omega del cual me enamoré y
siempre lucirás perfecto para mí-
Jungkook levantó su rostro regalandole
la hermosa imagen de sus ojitos
brillosos junto a una sonrisita
que cautivo aún más su corazón.

Jimin beso sus mejillas
comenzando hacerle piojito con los
dedos sobre su cabellera.

-¿Nos vamos, cariño?

El omega asiente antes de agarrar
su mano y caminar juntos con una
pequeña maleta hacía el primer
piso; siendo seguidos a la vez
por los guardaespaldas, quiénes
cargaban las cosas pedidas por
Jungkook para aquel día.

Jungkook se despidió del pequeño
JaeJi, beso su cabellera antes de
despedirse con la mano y guíar a
su alfa hasta el automóvil que los
llevaría a un lindo lugar que había
averiguado.

- Hay que llevar algo para comer
en el trascurso, me da hambre,
amor-Jungkook miró a su alfa antes
de asentir y mandar a uno de
los guardaespaldas por comida
sana para ambos; a los segundos
siendo entregada en sus manos
una pequeña canasta de fruta y las
barritas de carne que su compañero
amaba comer.

Las cosas que Jungkook pidió
fueron puestas en el maletero
con cuidado, mientras él ya se
encontraba en los asientos traseros
del gran automóvil junto a su alfa,
quién le daba cariñitos a la vez que
le regalaba pequeños trozos de las
barras y frutas.

- Listo joven, Jungkook, las cosas
están en la maletera, el aire
acondicionado está equilibrado,
sus mantitas están en su lugar y se
ve espectacular-Jungkook sonrió en
grande ante el beta, agradeciendo
feliz.

Todos sabían que debían de cuidar
y halagar lo hermoso que era el
omega, Jimin había ordenado
aquello hace algunos días haciendo
que obligatoriamente todos le
recordarán al castaño lo hermoso
que era. En primer lugar por sus
inseguridades al despertar con su
bonito vientre.

El auto comenzó a moverse a los
pocos segundos, la pareja dándose
pequeños apretones de manos
mientras se susurraban algunas
cosas, las manos del alfa
se deslizaron hasta el lindo vientre
de su omega a la vez que besaba
la cabellera de este y con su narız
otorgaba pequeñas caricias en la
glándula de olor de su compañero.

jeon's property ✧ jikookWhere stories live. Discover now