II

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Otra semana había pasado desde la nueva estancia de Naruto en Kioto.
Gracias a Yasaka logró saber de las demás facciones principales:
Facción del cielo perteneciente a los Ángeles.
Facción de Grigori perteneciente a los Ángeles caídos.
Facción demoniaca perteneciente a los Demonios.

Ahora estaba informado al completo de con quién debía tratar de buena manera sin ser descortés en sus modales, aunque no era algo que hiciera falta pues los corrigió hace mucho.
Vió el cielo volverse naranja durante la puesta de sol, la vista era simplemente hermosa con los tonos de degradado que sus pupilas podían ver grabadas en el.

Cabía decir que a la mañana siguiente de haber sido registrado como un nuevo Yōkai zorro de Kioto, fue mandado a llamar por los consejales de Yasaka.
Ellos lo trataron bien, incluso pese a su poder ellos no mostraron altanería ni ego subido, solamente se dejaron fluir con él como si fueran amigos de toda la vida a pesar de que ellos le triplicaban la edad.
Era tan agradable ser aceptado sin prejuicios de por medio.

N
–Creo que podría comenzar a agradarme el beber té verde durante momentos de serenidad...

Dió un trago a su vaso con té para después susurrar sus palabras con tranquilidad.
Pese a que la bebida era amarga empezó a tomarle el gusto.
Miró de reojo a Yasaka acercarse, la vió vestida igual que cuando lo salvó.
Llevaba un atuendo tradicional de Miko bastante expuesto en la zona del pecho dejando un sensual escote a la vista.
Por no decir que llevaba una corona dorada sobre su cabello el cual estaba suelto, haciéndola ver ciertamente hermosa.

Y
–Desde que me volví líder de mi facción he tenido que vestir así cada día, aunque no me desagrada debido a que estar en hakama me da mucha libertad a la hora de moverme, también el tabi blanco es suave.

N
–Luces bien en esa vestimenta, entonces.
¿Cual es la razón de usarla a diario?

Y
–Debido a mi posición en la jerarquía Yōkai, es mi deber siempre estar presentable ante cualquier ocasión, toma de ejemplo la visita de un líder de otra facción.
Esta vestimenta me hace lucir presentable además de señorial para recibir invitados por no decir que igualmente es vestimenta ceremonial.
Esa es la razón por la cual la uso siempre, excepto cuando duermo.

El rubio asintió ante la respuesta para después mirar nuevamente la puesta de sol junto a ella.

N
–El aire que se respira aquí es tan limpio, incluso la energía natural que rodea a Kioto es tan pura... Sin duda aquí es un buen lugar para vivir.

Yasaka solamente lo miró, después volteó a ver la puesta de sol mientras se sentaba junto a él.

Y
–Eso se debe a que estamos en un lugar sagrado para nuestra raza que nos conecta más con la naturaleza gracias a que es territorio de la religión sintoísta.
Además de la bendición que nos brinda Amaterasu, la diosa del sol a la cual rindo culto en mi palacio.

Naruto la miró con cierto grado de sorpresa en sus ojos, era algo que ella no le había dicho sino hasta ahora.

Y
–El cielo luce hermoso desde aquí...
¿No piensas lo mismo, Naruto?

N
–Ciertamente es hermoso, en mi mundo sinceramente no era mucho de quedarme a observar el paisaje, pero... Creo que podría hacerlo desde ahora.

La Yōkai sonrió ante la respuesta recibida, luego cerró sus ojos con tranquilidad disfrutando de la ligera brisa del viento.

Y
–Yo suelo ver al horizonte en mis tiempos libres, claro que, no siempre lo hago aún incluso si me mantengo fuera de mis obligaciones.
Pero admito que hacerlo de vez en cuando es algo liberador, especialmente si bebo algo de té o café en el momento.

Vaivén de los Nueve colas (Pausa)Où les histoires vivent. Découvrez maintenant