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𝐓𝐞 𝐫𝐞𝐜𝐮𝐞𝐫𝐝𝐨
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-NARRADOR OMNISCIENTE-

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-NARRADOR OMNISCIENTE-

El sol apenas comenzaba a salir posándose en la parte superior de los muros, los habitantes yacían dormidos en sus hamacas ignorando el ruido de los animales que comenzaban a despertar, no les molestaba, ya que tanto tiempo ahí encerrados hace que te acostumbres y aprendas a dormir con cualquier tipo de sonido que se te presente, ni la banda más ruidosa de música pudiera despertarlos.

Por otro lado, tres de ellos ya se encontraba hablándose a gritos.

—Alby, por favor déjame ir a buscarlos. —exclamó Alex practicamos rogando.

Se encontraban en frente de los muros esperando para que el amanecer saliera por completo y las puertas se abrieran.Alby había dado la orden de mandar a Ian, uno de los corredores, a revisar el laberinto en busca de alguno de los chicos, o al menos alguno de los cuerpos.

—Ya te dije que no puedes, no eres un corredor. —respondió el moreno, no estaba de humor esa mañana, pero como estarlo cuando acaba de perder a tres habitantes en una noche y entre ellos su mejor amigo.

—Pero Ian estará conmigo, yo solo lo ayudaré a buscarlos. —insistió el pelinegro mientras que el nombrado se mantenía callado sin atreverse a decir nada, temía que si decía algo el agresivo carácter de Alby lo mandará al ayo sin el haber hecho nada.

—No estás entrenado para esto, eres un constructor no puedes salir al laberinto. —como su última palabra el mayor se giró hacia Ian decidido a de una vez terminar con la conversación y mandar al corredor hacia el laberinto de una vez por todas.

—Y si Ian se encuentra con un penitente?

—si eso pasa él sabrá que hacer, para eso está entrenado, y no uses eso conmigo por qué tú no podrías ayudarlo en nada, es más tú también terminarías muerto. —Ian simplemente miraba a ambos con terror al pensar en la idea de encontrarse a un laceador.

—No encontraré a ningún penitente o si? —pregunto nervioso, era un corredor, pero en los 6 meses que llevaba en el área jamás había visto a un penitente, es más la única cosa relaciona con ellos fue el día que recorría el laberinto junto a Minho y encontraron una cola partida que le pertenecía a uno de esos monstruos.

Ambos chicos miraron al corredor y a Alex se le formó una pequeña sonrisa de esperanza.

—Vez, no puedes dejarlo ir solo.
—El mayor comenzaba a casarse de la irritable insistencia de Alex, pues sabía que comenzaba a tener la razón y no podía enviar solo a Ian siendo un corredor novato.
El hecho de que solo tres de los 40 habitantes que estaban en el área hayan querido convertirse en corredores complicaba las cosas para alby, normalmente le pediría a, Newt o a Minho que acompañarán a Ian y hicieran la revisión diaria, pero ahora ninguno de los dos chicos estaba disponible.

𝙏𝙃𝙀 𝙈𝘼𝙕𝙀 𝙍𝙐𝙉𝙉𝙀𝙍// 𝘓𝘰𝘷𝘦 𝘪𝘯 𝘵𝘩𝘦 𝘮𝘢𝘻𝘦Where stories live. Discover now