tired // Taegyu

Catorce

Años atrás

Beomgyu se encontraba asustado, no sabía que hacer, era muy pronto cómo para tener un bebé, temía por la reacción de su pareja, limpió su rostro y salió del baño, vió a Yeonjun acostado en al cama mirando del teléfono, se acercó a él apretando de sus labios y de sus manos, nervioso se sentó a un lado.

–Estoy embarazado

soltó con miedo, miraba a la pared más no al mayor, tenía miedo, qué lo dejara, apretó aún más de sus manos al no escuchar respuesta, sentía nuevamente sus lágrimas en sus ojos, Yeonjun apenas estaba procesando, ¿Que había dicho?, se sentó para poder hablar mejor.

–¿Estás embarazado?, ¿De verdad..?—Solamente asentió aún sin mirarlo, Yeonjun volvió a quedarse en silencio, dejó salir un gran suspiro y tomó sus manos calmandolo—Me agarraste helado, no sé que decirte amor..

Finalmente lo abrazó y beomgyu dejó salir todo su llanto, Yeonjun también estaba preocupado, ambos no tenían a su familia, no los apoyaban en nada, aunque tenían amigos.-solo Yeonjun-, los amigos de beomgyu le dejaban de hablar cada que podían.

–te prometo que saldremos adelante, nosotros con nuestro bebé, ¿si?, buscaré algún buen trabajo

–Yo puedo trabajar en la cafetería..

–Está bien amor, mañana veré eso, si?

El menor asintió y besó los labios de su novio, quién acariciaba la panza de su novio.

Semanas después

–Prometo responderte todos los días para saber cómo están, te daré los buenos días, las buenas tardes y los buenas noches, ¿Si mi amor?, cuídense mucho, los amo

Dejó un beso en sus labios y uno en la pancita, beomgyu se despidió con una sonrisa y finalmente lo vió irse, se fue a su habitación a dormir un rato, estaba con sueño.

Luego de unas horas qué durmió le escribió a su novio.

Amor

Llegaste bien?

Mañana empiezas a trabajar, verdad?

Que cosas debes de hacer?

Te extrañamos mucho

Te amo

Mandó su mensaje y guardó el teléfono, fue a la cocina por algo de comer, tenía hambre, pasaron los días y el chat con Yeonjun seguía igual, beomgyu le mandaba mensajes y este no le respondía, beomgyu solamente quería llorar, lo había abandonado, él no sabía que hacer con un bebé solo, no tenía a alguien que lo apoye, estaba asustado, no sabía nada de ser papá, acarició con cariño su pancita y limpió de sus lágrimas, sería fuerte por su bebé.

Pasaron los meses, beomgyu tenía su panza enorme, estaba ya apunto de dar a luz, se cuidaba muy bien, gracias a Dios le iba bien en la cafetería, ahora se encontraba en el hospital, sería el día que naciera su pequeño jungwon, estaba ansioso por tenerlo ya en brazos, una vez entró el doctor los nervios lo invadieron, sería padre en unas horas.

Beomgyu apenas despertaba, le hubiera gustado demasiado qué Yeonjun hubiera estado ahí con él, en el hospital, diciéndole que tuvieron un hermoso niño, pero lamentablemente no fue así, estaba solo, una enferma entró con el pequeño en brazos.

–justo despiertas, aquí está su pequeño, nació muy bien y sano, aquí te lo dejo para que lo conozcas y des de lactar.

Con cuidado se lo entregó, beomgyu ya se encontraba llorando, vió por primera vez el rostro de su hijo, dejó un pequeño beso en su frente.

–hola bebé hermoso, soy tu papi beomgyu, eres tan lindo mi amor, te amo tanto, tanto

Dijo entre sollozos, beomgyu empezó a darle de lactar, el niño comía gustoso mientras mantenía sus ojos cerraditos. La enferma le explicó algunas cosas a beomgyu, él ya había leído y visto algunas veces para ser padre igualmente tenía dudas, él asentía a cada cosa que le decía la enferma, finalmente agradeció.

Una vez le dieron de alta fue hasta su casa, arregló bonito su cama y puso almohadas al rededor para que el pequeño no se cayera o algo, no le alcanzaba para cunas, coches, corrales, preferiría comprar lo más importante, ropa, pañales y esas cosas, finalmente se acostó a un lado de su pequeño, sonrió al ver a su lindo bebé dormir, se sentía feliz, no se sentía solo, lo tenía a él, eso era lo importante.

Beomgyu realmente se imaginaba que ser padre soltero iba a ser difícil, pero no pensó qué tanto, con las justas podía dormir. Así fue varias veces, su peor noche fue cuándo el pequeño jungwon tuvo dos años y le dió una fuerte fiebre, recordaba ese día con dolor, pues ese día su bebé no dejaba de llorar, toser y arder, realmente fue la peor noche de ambos.

Beomgyu tenía la costumbre de escribir todo su día en su diario, ya tenía cómo 4 acabados, cuándo podía y tenía dinero se compraba otro. Ahí ponía todo lo que hacía con su hijo, cómo no tenía con quién hablar y contarle lo hacía en su diario.

Finalmente llegó el día que siempre temió, el día en él que jungwon preguntara por su otro papá, jungwon con tan solo 5 años de edad ya era lo suficiente atento cómo para saber un poco de lo que pasaba a su alrededor, en el nido lo molestaban por ser solo él y su papá, que no lo dejen entrar solo porque no estaban al día en las pensiones, lo llamaban Pobre, él defendía diciendo que su papá no podía tener muchos trabajos porqué no había quién lo cuidara, y ahí fue cuándo empezaron a molestarlo con que no tenía otro papá que lo cuide, qué lo abandonó y etc.

Lo demas es historia.

—Buenos días beom, los niños y yo hicimos el desayuno, algo clásico y simple, panqueques, fruta picada y yorgurt.

Beomgyu sonrió de ternura al ver a los niños con mandiles y algo sucios, taehyun tenía en manos la sarten mientras hacía de los panqueques

–Qué tiernos, se ven muy lindos así.

Entró beomgyu mientras ayudaba, una vez estaba listo todo luego de haber estado riendo y jugando, se sentaron a desayunar.

–parecemos una familia, ¿No crees?—bromeó taehyun mientras comía de sus panqueques.—sería lindo verlos a ustedes cómo hermanos

—¡No!-gritó Jay dejándo de comer y asustando a todos.—No quiero que jungwon sea mi hermano

Se cruzó de brazos, jungwon mantuvo su ceño fruncido, al igual que sus padres estaba confundido.

–¿Porqué no?

Preguntó esta vez beomgyu curioso, ambos adultos tenían la mirada en jay, quién volvió a comer al escuchar la pregunta de beomgyu.

–Por qué luego no podré casarme con él

Dijo bajito pero lo suficiente audible, ambos mayores rieron de ternura y inocencia de los menores, jungwon sonrió en grande al escucharlo, miró de su papá emocionado.

–Luego hablamos de bodas, ahora terminen de desayunar pequeños.

Los fuertes golpes de la puerta hizo qué asustaran a los cuatro qué estaban desayunando a gusto.