Ángeles Caídos

Como el mar en calma.

FLASBACK  22 DE SEPTIEMBRE DE 2017.
Malú.

Cuando llegué al recinto de La Voz, respiré profundo y caminé por los pasillos rápidamente para no encontrarme con nadie, concretamente con Pablo. Después de lo que sucedió anoche no hemos vuelto a hablar y no se como de incómoda será la situación hoy. Llevaba tiempo deseando que ocurriese pero jamás pensé que podría llegar a pasar. Cerré la puerta del camerino nada más llegar y me encontré a Antonio sentando en el sofá mirándome con una sonrisa.

-¿Que haces aquí? -dije para mi sorpresa.

+Buenos días, Lula... primero hay que saludar, mujer.

-Soy más de ir al grano porque ya se porque estás aquí.

+¿Y por qué estoy aquí?

-Por algo relacionado con López, seguramente.

+¡Bingo! -dijo riendo. A continuación hizo una pausa y se puso serio-. ¿Tú lo sabías?

-No se de que me está hablando, Antonio.

+¿Entonces como sabes que te iba a preguntar por él?

Tragué saliva tras meter la pata y me encogí de hombros ante su pregunta.

-Pensé que estarías aquí por otro tema.

+¿Que tema?

-No, ahora me cuentas lo que se supone que tengo que saber.

+¿No te ha contado que se está separando?

-No... no sabía nada.

+Pues se le nota en la cara, por eso te preguntaba.

-Vaya... ¿Y como está?

+¿Pues como va a estar? Mal. Su hermano me ha dicho que le va a costar mucho levantar cabeza, así qué... está noche nos lo tenemos que llevar de marcha.

-No creo que salir sea la solución a sus problemas...

+¿No? Yo creo que sí. Vamos a hablar con él.

-¿Los dos?

+Claro, mujer. Si somos dos de sus mejores amigos aquí, tenemos que ayudarle.

-¿Pero tiene que ser ahora? Porque tengo poco tiempo para maquillarme y cambiarme.

+Solo será un momento.

Cogió mi mano, me levantó y anduve detrás de él. Cuando fue a abrir la puerta, me puse delante de él y la volví a cerrar.

-Yo no puedo ir a hablar con él. Y menos de ese tema, Antonio.

+¿Por qué?

-Verás... anoche Pablo y yo nos besamos. No hemos vuelto a hablar desde entonces y ni siquiera estoy preparada para mantener una conversación con él y menos sobre su separación.

+¿Como que os besasteis? -dijo llevándose las manos a la boca, eso provocó mi risa-. A ver si vas a ser tú el motivo de su ruptura.

-Pues espero que no, la verdad. Me sabría fatal...

+¿Y ahora qué? ¿Como vivo yo sabiendo esto?

Aquella pregunta provocó una gran carcajada en mí y él hizo lo mismo.

+Bueno, pues nada, voy a ver si le sacó este tema a Pablo...¿Quién beso primero?

-Pareces una maruja de pueblo, Antonio.