Crío a un emperador zombie en otro mundo

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　Capítulo 31

　　Jiang Qianqian sintió que tal vez no pudiera convencer a su pequeño zombi.

　　Esta cosita llevaba una hora sentada en la entrada del túnel arrastrando su cola, no importaba cómo lo llamara, él nunca miró hacia atrás.

　　Este era un parque de diversiones abandonado. Después de que el niño pateó fuerte a Tang Lu, la escondió en el túnel de la montaña rusa a 60 metros del suelo.

　　A través de la entrada del túnel se puede ver la enorme noria del parque de atracciones, el barco pirata y el tiovivo a lo lejos, que han dejado de funcionar y la pintura de colores se ha ido desvaneciendo poco a poco.

　　El niño estaba sentado frente a ellos, su espalda eclipsada por el cielo blanco grisáceo y la enorme noria.

　　Es como una pequeña bestia abandonada en el fin del mundo, débil, lamentable, pero testaruda.

　　Jiang Qianqian realmente quería correr y abrazar a la pobre niña en sus brazos para consolarla, pero ella estaba realmente impotente y su cuerpo estaba rígido.

　　Así que sólo pudo seguir persuadiendo: "Cariño, hermana está equivocada, ven aquí y déjame besarte, ¿de acuerdo?"

　　"..."

　　No funciona.

　　Entonces debería ser más fuerte y decir como un presidente dominante: "¡Ven aquí, quiero besarte!".

　　Todavía no funciona.

　　La delgada espalda estaba inmóvil, como si estuviera sentada como una estatua, sin siquiera mover la cola.

　　Jiang Qianqian miró su pequeña y obstinada espalda y pensó que esta vez todo había terminado, besar ya no funcionaría y sería muy difícil convencerlo.

　　De hecho, Ji Chi no la ignoró a propósito.

　　Simplemente le dolía la cabeza y era tan doloroso que estuvo a punto de explotar.

　　La escena de Jiang Qianqian tirado en el suelo cubierto de sangre todavía aparecía ante sus ojos de vez en cuando. Sería su pesadilla para siempre.

　　Quería desesperadamente romperle el cuello a algo o destruir todo lo que tenía delante.

　　No se atrevió a mirar a Jiang Qianqian, temía que ella se asustara al ver su expresión retorcida, y también temía que ella no pudiera controlarse y hacer algo irreversible.

　　Quería atarla aquí con enredaderas, y solo estarían ellos dos aquí, para que nunca más saliera lastimada...

　　Pero definitivamente estaría muy enojada, le gustan las personas buenas y obedientes, no los monstruos como ella.

　　Necesita fingir, tiene que fingir.

　　Porque solo tiene a Jiang Qianqian. Si Jiang Qianqian no lo quiere, entonces su existencia es una broma.

　　Pero Jiang Qianqian en realidad bloqueó el arma de Tang Lu, ¡e incluso arriesgó su vida para salvar a Tang Lu!

　　Ji Chi no pudo contenerse más y se levantó de repente.

　　Jiang Qianqian siguió usando su brazo apenas móvil para alcanzar la cola del niño.

　　Pero justo cuando las yemas de los dedos estaban a punto de tocar sus escamas de color rojo oscuro, el dueño de la cola de repente se levantó. Ella no pudo aguantar y cayó al suelo.

　Al segundo siguiente la levantaron y sus ojos se encontraron. Jiang Qianqian notó que los ojos de la niña estaban rojos.

　　Los ojos oscuros estaban cubiertos de niebla y eran tan frágiles que parecían a punto de romperse.