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PROLOGO

El espacio

¿En que es lo primero que piensas cuando dicen esa palabra? La luna, las estrellas, los planetas, asteroides, eso es con lo que principalmente asociamos al espacio.

En las escuelas nos dejan hacer maquetas del sistema solar como si fuera lo único en el universo, la mayoría de la gente no sabe mas de este que lo básico, tuve un maestro de física en la secundaria que ni siquiera se sabia los nombres de los planetas en orden y para el proyecto final nos hizo hacer un resumen de todos los temas del año escolar, la mitad de mis compañeros se copiaron y el no se dio cuenta.

Pero el espacio es mucho mas de lo que un profesor que cree que Júpiter tiene anillos puede enseñar.

Muchas personas le temen y con justa razón, pensar en inmensas formaciones de materia te hacen sentir diminuto y a nadie le gusta sentirse de ese modo pero a pesar de que el miedo nos salva en muchas ocasiones también impide hacer cosas nuevas por temor a fallar, lastimarnos o lastimar a alguien, sin embargo algunos miedos que tenemos ni siquiera son propios, son temores de otras personas que nos implantan desde pequeños. Pero yo nunca deje que el miedo me venciera.

Siempre fui muy entusiasta con el tema del universo, podía pasar horas hablando de este, mi habitación estaba llena de libros, imágenes y demás cosas sobre el espacio, incluso el techo de mi habitación estaba pintado de galaxias.

Cuando tenia cuatro años me gustaba sentarme en el porche de mi casa y mirar las estrellas, tratando de imaginar que tan grandes son para poder verlas desde tanta distancia, cuando cumplí seis años mis padres me regalaron mi primer telescopio.

Para el siguiente año fuimos al planetario por haber sacado diez en todas mis materias y simplemente fui el niño mas feliz del mundo entero, recuerdo arrastrar a mis padres de un lado a otro en el planetario, haciendo todas las actividades que ofrecía el establecimiento, pero sin duda lo que mas me gusto fue las simulaciones de astronauta, claro que sabia que era un astronauta pero nunca había presenciado todo lo que ellos hacían, así que mientras estaba en la simulación de nave espacial decidí que quería ser astronauta.

Por su puesto que les dije a mis padres de mi sueño de ser astronauta, ellos solo rieron diciendo algo como ¨a alguien le gusto mucho el planetario que quiere ser astronauta¨ seguí diciéndoles lo que quería ser durante los siguientes años hasta que me di cuenta que lo tomaban a juego y deje de decirles y el tema quedo en el olvido o al menos para ello, para mi siempre fue mi meta de vida.

Cuando cumplí dieciocho años mis padres me llevaron a cenar a mi restaurante favorito, me dijeron con una gran sonrisa que era momento de escoger una carrera que ellos pagarían me dijeron que podía estudiar lo que yo quisiera por que estaban orgullosos de que fuera tan buen hijo y estudiante, en le momento que les dije que era lo que quería estudiar sus caras cambiaron por completo, sus sonrisas se esfumaron y un tenso silencio se hizo presente entre nosotros y desencajaba con el ruidoso ambiente del restaurante.

No entendía por que se habían puesto tan serios de repente, les pregunte que pasaba pero ninguno decía nada y solo me miraban con lo que yo interprete como desconcierto hasta que mi madre hablo ¨pensé que ya habías olvidado ese tema¨ dijo con un hilo de voz todavía mirándose muy desconcertada como si no pudiera procesar lo que yo había pedido, no supe que decir, gire mi cabeza par ver a mi padre quien solo negó con la cabeza mientras decía ''no puedes hablar enserio''

Seguía sin entender lo malo en lo que dije así que mi padre al notar que no decía nada continuo hablando ''hijo eres un excelente estudiante como para que desperdicies tu inteligencia en una carrera que no te va a traer nada bueno, por que no estudias algo mas, no se medicina, leyes, o si quieres estudiar algo relacionado con la el espacio puedes ser maestro'' hablo con ese duro tono de voz que utilizaba en el trabajo (es abogado) y que había escuchado solo en un par de ocasiones pero que nunca utilizo conmigo, eso me enmudeció a un mas. Mi madre asintió con la cabeza en señal de apoyo a las palabras de mi padre ''si hijo puedes estudiar cualquier otra cosa, con tus calificaciones no te será problema entrar en la universidad que desees'' añadió a las palabras de mi padre y al contrario de el me hablo con tono dulce