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Por naturaleza el era una persona demasiado impaciente, pero en estos momentos aquello que era naturaleza se había elevado y aquella impaciencia se convertía en incertidumbre.

Cada vez que veía el rostro pálido y demacrado de su chico no podía evitar llorar, aquella fea sensación en su pecho se hacía presente y la culpa lo invadía, una y otra vez, así sin parar.

Después de lo sucedido, Taehyung tuvo una difícil cirugía, los médicos decían que el chico estaba vivo de milagro debido a que la bala alcanzó a rozar un poco su pulmón causándole graves problemas, y que el echo que despertara de aquel coma que se encontraba ahora podría tardar mucho, y todo empeoraba cuando los doctores le decían que las probabilidades de que cuando despertara y pudiera llevar una vida plena fuera de tan solo un 40% todo estaba en contra del peli rubio, el cual dormitaba en aquella cama con diferentes cables en su cuerpo.

El peli negro se culpaba una y otra vez, dormía junto a él delgado cuerpo que no daba señal alguna en despertar por un largo tiempo, llevaba ya dos semanas allí en Inglaterra y estaba haciendo lo mayor posible por regresar a Taehyung a Corea pero los doctores le decían que era mejor que esperara un poco, aunque sea a que hubiera actividad en el cerebro de aquel chico que realmente solo tenía intenciones de dormir.

Por otro lado, la madre de Taehyung no lo había podido visitar, esto debido a que su pasaporte seguía en proceso y de lo contrario no podría viajar, aquella noticia la había devastado mucho y también se culpaba a ella por no haberle dado un buen hogar a su hijo desde un principio, por no haber sido aquella madre que necesitaba.


Se dedicaba a mirar aquel hermoso rostro con cuidado, a pesar de que ya habían pasado varias semanas desde que Taehyung seguía dormido las heridas en su cuerpo se seguían notando bastante, en especial en su cuello y muñecas que se notaban aún aquellos moretones por donde había sido tomado sin piedad alguna, Jeon cada vez que miraba esas marcas horribles imágenes pasaban por su cabeza, haciéndolo sentir mal y con unas incontrolables ganas de llorar, su amado había pasado por cosas terribles y solo por el no estar allí, cuando le había prometido que estaría para el sin importar que, y que jamás lo abandonaría.

Y ahora entendía, entendía lo que sus padres le decían cuando era más chico y no comprendía del todo al mundo.

"Aveces por más que queramos cumplir nuestras promesas llegarán situaciones que no nos lo permitirán"

Aquellas palabras pasaban una y otra vez por su cabeza, estas lo hacían sentir menos culpable, después de todo el si amaba a Taehyung y si tan solo hubiera estado allí en ese momento nada de eso hubiera pasado, pero no se encontraba allí, fue una situación que lamentablemente no pudo controlar, que no estaba en sus manos.

Hoy le tomarían unos exámenes a el peli rubio, los cuales definirían si se lo podría llevar de vuelta a Corea, y realmente el quería que algo como eso pasara, no quería seguir sintiéndose tan solo en aquella sala donde solo se encontraban el y su bonito novio que no hacía nada más que dormir.

Quería tener a su lado a la madre de Taehyung, a sus padres y a su Yoongi Hyung, al igual que a Jimin, queria que Taehyung sintiera la presencia de más personas cerca de él, tal vez y así se dignaba de despertar.

Sabía que su bonito era descarado y también trataba de pensar de forma buena al ver a el bonito rubio dormir de forma tranquila, como cuando dormían juntos y este quedaba dormido en su pecho, su respiración estando tranquila y sintiendo como si todo fuera a estar bien, trataba de pensar que su novio solo se estaba dando un descanso de aquella vida tan difícil que había tenido hasta el momento, que simplemente estaba siendo igual de insolente y descarado como lo era siempre y que no despertaba solo porque no podía, si no porque aun quería dormir un poco más, como le decía cada vez que la alarma sonaba para que fuera a la escuela.

"Solo déjame dormir un poco más Jungkookie, por favorcito"

Aquella dulce voz se hacía presente en su cabeza mientras recordaba el adorable rostro de su novio, sus ojitos aún cerrados y sus labios hinchados porque minutos atrás le había dado unos cuantos besos tratando de despertarlo, su cabello castaño desarreglado, sus esponjosas y regordetas mejillas con un suave color carmín, su cuerpo envuelto en las suaves cobijas y su mano apretando con fuerza su mano con tatuajes, con el único fin de no dejarlo ir.

Necesitaba a su ahora peli rubio despierto, necesitaba hablar con el, escuchar su suave voz, poder abrazarlo y besarle como tanto le gustaba, necesitaba pedirle perdón por todo lo malo que había echo hasta el momento, por todos aquellos errores que había cometido.

Solo necesitaba eso, necesitaba de su peli rubio, de su presencia y de su adorable risa, de sus mohines y berrinches que hacía cuando no se le cumplía aquello que tanto quería.

Lo necesitaba a el, necesitaba de Kim Taehyung, su droga, su única droga y vitamina a su dolido corazón.


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By; Dan












Daddy King - TaekookWhere stories live. Discover now