♡El Único Para Mi♡[SuguSato]

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A inicios de su segundo semestre en prepratoria un nuevo compañero se integro a su clase, él era el único menos entusiasmo porque llegará, ya que era de todos los días ver a estúpidos alfas hormonales <como solía decirles> llegar con intenciones de cortejarlo siendo el único Omega en su salón lo veia venir.

No iba a negar que le parecía divertido entrar y recibir obsequios por parte de ellos, pero se volvió sofocante para él cuando intentaron pasarse de la raya <más de una vez> averle puesto algo a su bebida fue su límite para que los amenazara con golpearlos, porque si, Satoru era un joven fuerte, tenía casi el físico y estatura de un Alfa, no había ninguna imperfección con él, su rostro, ojos, cabello, todo eso le asia relucir aún más su belleza.
Que vari@s omegas lo envidiaran no era novedad.

Sin nada que acer tenía la mirada frente al pizarrón mientras asia garabatos en su cuaderno con su lapicero. Depronto la puerta fue abierta con algo de brusquedad dejando ver al director Yaga con su típico ceño fruncido,pero no venía sólo alguien más lo acompañaba.

Cabello azabache, ojos oscuros, no era mucho más alto que él, pero era de hombros anchos logró captar su atención cuando vio ese flequillo peculiar una pequeña sonrisa se formó en sus labios por primera vez dejó de acer garabatos para poner atención a lo que el mayor tenía que decirles.

-Quiero presentarles a su nuevo compañeros de clase, adelante-presentó el mayor.

-Hola, mi nombre es Suguru Geto, espero llevarme bien con todos-habló el azabache asiendo una pequeña reverencia.

Todos tenían su mirada puestas en él, pero con una expresión diferente a como se imagino ¿quizá estuvo muy formal su presentación? No, nada de eso, era el echo de que él era diferente a ellos no pertenecía a su misma casta podían notarlo a distancia aquel joven azabache era un Delta.

Los Deltas estaban por encima de los Alfas. Les doblaban en fuerza y tamaño de ambas cosas, incluso podian acostarse con cualquier beta,Alfa o otro Delta. Eran diferentes a cualquier otra casta y ese simple echo de ser más superiores a los Alfas era detestables para ellos. Los Deltas no eran sentimentales a muy pocos se les conocía por ser empaticos por lo que tener una relación "estable para ellos no se veía seguido" ni muchos menos con otra casta inferior a la suya es por eso que tenían estrictamente prohibido estar con un omega, por la sencilla razón de que sus frágiles cuerpos no resistirian el tamaño de su polla, y aún más si alguno llegaba a marcar a uno como suyo ataria a ese omega por toda la eternidad con él. En caso de que lo rechazara o terminara abandonandolo él jamas podría deshacerse de esa marca incluso caería en una depresión. Muchas veces era así por eso el número de omegas iba en desaumento.

Aunque había una única excepción con aquellos Omegas dominantes, ya que si se lo proponian podían tomar el control de las cosas obligando al contrario a nunca alejarse, con sus encantos cualquier Alfa o Delta caería a sus pies, Su atadura duraría más años de los que imaginó.

Estaba aburrido de ver las mismas caras de siempre, ahora sería diferente tenía algo nuevo que ver, aún si para Satoru se veia como cualquier otro Alfa <aunque no lo era>, talvez porque no era uno maduro sino joven y en pleno crecimiento.

-toma asiento-ordenó el mayor. El azabache acató la orden y fue en busca de un asiento libre.

Ignorando las pesadas miradas que tenían sobre el, se sentó al fondo donde quedaba la ventanilla cerca.
Suspiro con alivio mientras posaba sus manos sobre la mesa dejando caer su cabeza. Unos pequeños golpesitos en su frente lo sacaron de sus pensamientos alzó la mirada para encontrarse con unos ojos como el mismo cielo y una cabellera esponjosa como una nube.

-Oye, ¿no te dolió acerté esas perforaciones?-preguntó con curiosidad y con un dedo apunto asia sus orejas.

-No-contestó algo seco y confuso por aquella pregunta.

-Que interesante, seguro eres de esos a los que les gusta tatuarse ¿no? Formas parte de una pandilla ¿o algo por el estilo?-siguió preguntando. Ignorando el ceño fruncido del azabache.

-¿eso parezco?-le miró un poco molesto.

-No solo eso-sonrió con burla.

Así sería su primer día allí, siendo molestado por ese albino de orbes azules, no entendía que razón tenía para acerlo <¿quizá por el echo de ser un Delta?>. Jamás añoro tanto que llegará el receso, así que apenas terminaron las primeras horas fue el primero en salir.

Ir detrás de el era mucho, pero para Satoru no, nada de eso sucedió pues Shoko llegó mucho antes por él.

-así que ¿Ahora lo piensas acosar todo el tiempo?-

-Yo no lo diría así, sólo estoy intentado socializar con él-se acomodó sus lentes con una sonrisa.

-Sabes que lo vas a terminar artando ¿verdad?-

-No. Yo se que nos vamos a entender muy bien asta ser buenos amigos- estiró sus brazos asia atrás para recargarse en su silla.

La joven Alfa dejó de acerle caso a la conversación y siguió comiendo de su postre de durazno.

Traigo aqui otra historia, apenas inició una y ya quiero empezar otra que cosas. Fue difícil decidir si publicarla o no, pero me arriesgue así que aquí está :>

En fin ojalá le guste, pronto traeré más contenido GoFushi :> se los prometo cuando tenga tiempo <y también ideas> volveré con otra historia de ese ship.

Sin más que decir cuidense y tomen agua uwu.