Close your eyes and kiss me

SEIS

Cuatro días antes de la reunión.

—¿Cómo has estado, hijo?— le preguntó su padre una vez que dejó su bolso en la sala de estar. Incluso los muebles eran los mismos, también estaban en la misma ubicación. Se preguntó por qué su padre nunca vendió la casa y compró un apartamento en la ciudad.

—Ha estado bien— respondió —¿Tú?

—Oh, bueno, ya sabes, todavía estoy trabajando— se rió su padre, pero inmediatamente después tosió con el pecho agitado. Off notó que su padre envejecía, su cabello estaba gris y se le estaban formando arrugas en el rabillo de los ojos. —Hablando de trabajo, ¿cómo te trata tu primer trabajo?

—No está tan mal— explicó Off. Siguió a su papá quien lo guió hasta la cocina.

Nunca habían tenido una conversación pacífica, por lo que Off se sentó torpemente junto a la mesa del comedor mientras observaba a su padre prepararle una taza de café.

—Bueno, nunca he trabajado en relaciones públicas, pero estoy seguro de que no es diferente a mi trabajo.

—Usted era director financiero de un bufete de abogados— replicó Off, y ambos se rieron ante la repentina comparación de puestos de trabajo. El padre de Off nunca lo obligó a seguir sus pasos en términos de carrera, de hecho, no recuerda que su padre lo haya obligado a hacer nada, ni en términos de carrera ni con quién se folló en la cama. Ahora que Off lo pensaba, empezaba a tener sentido.

—¿Has estado saliendo?— Preguntó Off mientras su padre dejaba la taza. Su viejo arrastró una silla para poder sentarse a su lado y le dio lástima pensar que había estado solo durante los últimos seis años, llamando a su hijo para pedirle que volviera a casa y lo visitara al menos una vez. Off nunca pensó que se sentiría culpable por abandonar a su padre, pero el sentimiento poco a poco iba subiendo hasta su pecho.

—¿Este viejo?— se señaló su padre. Comenzó a reír a carcajadas mientras tomaba su café —ya llegué a la edad de caducidad— añadió, —creo que ya no estoy apto para ello.

—Tonterías— Off le sonrió —Mientras todavía puedas bailar, estoy seguro de que podrás impresionar a alguien.

—Es un poco tarde para mí— añadió su padre de nuevo —pero estoy seguro de que no es demasiado tarde para ti.

Off miró su reloj y pensó en una idea loca, tan jodidamente loca que se echó a reír.

—Sabes, aún no es tan tarde— señaló Off —¿Por qué no vamos a un club?

—De ninguna manera— su padre meneó la cabeza inmediatamente después de que Off lo dijera —tengo trabajo.

—Vamos— lo instó Off —me aseguraré de que no te bebas toda la barra— lo encontró reconfortante cuando el padre se rió cómodamente de su broma. Encontró un alivio que su encuentro no consistiera en una incómoda charla de explicaciones. Sabía que su padre no necesitaba dar explicaciones. Off ahora lo sabe y, a pesar de los años desperdiciados y de que su propia existencia es un recordatorio constante de a lo que se vio obligado su padre, lo único que puede hacer para compensarlo es arrastrar a su padre a un bar. Tay lo arrastró a una la primera noche que regresó a Tailandia como fiesta de bienvenida y pensó que debería hacer lo mismo con su padre.

—Vamos papá— Off se levantó y aplaudió. Y cada vez que se mostraba inflexible en algo, lo hacía —Vamos a jodernos.

*

Cinco meses después iniciar el último año.

—Amar el verano me hizo pasarlo genial.

Off se apoyó en la pared del auditorio de la escuela mientras observaba a los actores principales cantar la primera canción. Tenían al coro y al profesor de música cantando con ellos mientras intentaban sintonizarse entre sí. Cerró los ojos y durmió un rato, esperando hasta que alguien lo llamara cuando lo necesitara.