☆Yandere Boy☆ Pt.2 [Bill Kaulitz]

Capítulo XVI

Capítulo largo (1743 palabras)

*Narra Emma*

Eran las 2A.M, y Bill y yo nos despertamos al escuchar unos impaciente golpes en la puerta.

-Anda abre tú Bill.... Le dije super adormilada mientras me revolvía entre las sábanas.
Él se levantó lentamente haciéndome caso y dirigiéndose a la puerta para abrirla.

-Qué queréis? Preguntó Bill algo molesto.
-Te recuerdo que nosotros también dormimos aquí. Le respondió una voz, la de Georg, ya que logré reconocerla aún con los ojos cerrados.
-Tiene razón. Afirmó otra voz, la de Gustav.
-Bueno.... pero estoy con Emma, os importa si se queda? Les preguntó Bill.
-Mientras nos dejéis dormir... Respondió Gustav.
-Sí, sí, si ya.... Pero dadme un momento. Dijo Bill con una pequeña sonrisa traviesa para después cerrar la puerta y acercarse a mí.
Se agachó al lado mía y se acercó a mi rostro, a lo que yo abrí los ojos.
-Princesa, Gustav y Georg van a pasar, deberías ponerte algo de prenda. Dijo suavemente y con una sonrisa.
-Ok... Me prestas algo de ropa? Le pregunto mientras me levantaba y frotándome mis ojos llenos de legañas.
-Claro, toma... Dijo acercándose al armario para luego sacar uno de sus pijamas y entregármelo.
Yo me lo puse, y sí, delante suya. Ya me ha visto todo, no me da vergüenza.

-Estás lista? Me preguntó dulcemente.
Yo asentí con la cabeza.
Él se dirigió a la puerta para darle paso a Gustav y Georg, en eso yo me volví a tumbar y me arropé con todo el conjunto de mantas y sábanas. Unos escasos segundos después sentí como alguien se metía junto a mí bajo las sábanas, para luego abrazarme por delante y luego darme un dulce beso en mi frente.

Necesito un fucking novio como Bill.

Luci✮

✿

Me encontraba en un enorme y extenso pasto verde, con flores y el cielo azul. Me encontraba corriendo cuando de repente, caigo al vacío y todo se vuelve negro.
Al abrir los ojos me encuentro en una sala completamente acolchada, paredes, suelo e incluso techo. Me encontraba atada a una silla, cuando muchos, muchísimos médicos, comienzan a irrumpir en la sala. Algunos me intentaban sujetar mientras yo intentaba sacarme del agarre. De repente entra otro médico con una jeringa que inyecta en mi brazo y todo se vuelve oscuro de nuevo....

Me despierto agitada y con lágrimas cayendo lentamente por mis mejillas. Miro a mi lado y Bill se encontraba durmiendo plácidamente agarrado a mi cintura. Yo me separé lentamente para no despertarle y salí de su habitación (con el pijama de Bill todavía) para pasar a la mía y darme una ducha rápida, no quiero estar agobiada por la tarde, y es cuando normalmente todo el mundo se prepara pero antes se ducha, en resumen para ahorrar tiempo.
Después de la ducha, vestirme y peinarme, decido bajar al piso de abajo.