Retorno a la esclavitud (Traducción finalizada)

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¿Cuántos días habían pasado desde entonces? Mientras mantenía a Ruslan encerrado, Sidref trabajaba en la sucursal con tanta normalidad que incluso pareció haber informado, tanto a la sede como a su familia, que Ruslan estaba en un "importante viaje de negocios secreto" que tomaría aproximadamente por un mes.

Sin embargo, incluso aunque Ruslan había aprendido a disfrutar de la tortura lentamente, pareció estar bastante consciente de que si se entregaba a este hombre y admitía todo lo que sentía por él, entonces perdería algo que era importante y que se había esforzado mucho por mantener a salvo. O claro, eso era lo que se decía desesperadamente todos los días incluso aunque no podía evitar que su cuerpo lo deseara hasta el punto de gritar cuando no lo sentía dentro de su culo.

Y justo cuando estaba pensando en eso, el mayor Sidref regresó a verlo con un regalo de Navidad que aparentemente Sergei había dejado en la oficina esa misma mañana.

<Para papá.
Papi, pensé que odiabas el trabajo. Pero, después de escuchar del mayor que estas trabajando tan duro en tu viaje de negocios, decidí trabajar muchísimo también en la escuela para que estés muy orgulloso de mi. ¡Buena suerte! Te amo y te extraño>

Al ver la mala escritura de Sergei, Ruslan quedó desconcertado.

"Odio mi trabajo... ¿Es así cómo me ve mi hijo?"

"¿Finalmente te diste cuenta de eso? Al menos tu hijo sabe la verdad sobre ti".

Cuando le dijo eso, sintió que algo dentro de él había comenzado a romperse.

"Entonces yo..."

"¿Um?"

"Dijiste que me mantendrías aquí hasta que lo admitiera..."

"Sí, tienes razón. Si admites tu sexualidad y te conviertes en mi mascota para siempre, entonces te dejaré ir tan pronto como pueda. Ahí es cuando realmente vas a liberarte y te convertirás en un padre realmente bueno".

Su mascota...

Si eso realmente sucediera, ¿Qué era lo que garantizaba exactamente que pudiera ser un buen padre? Al contrario, sentía que iba a perder su esencia como un ser humano normal.

"..."

Sin embargo, al mirar la vida que se suponía que había guardado con tanta fuerza todo este tiempo, se dio cuenta de que su hijo, incluso aunque tenía cinco años de edad, se había dado cuenta de la verdadera naturaleza de Ruslan de una manera lenta pero bastante terrible. Se preguntó si estaría feliz de ver a su padre viviendo según sus preferencias o si, por el contrario, sería mejor para él crecer viéndolo justo como ahora: Vacio en su vida actual, con una esposa falsa y de una manera ordinaria y aburrida. De todas maneras no podía decidirse ¿Qué era lo que se suponía que tenía qué hacer a continuación?

"Si no lo admites, repetiré lo mismo otra vez esta noche".

Y solo escuchar eso le hizo sentir tan extasiado qué se preguntó la razón por la qué ser honesto era tan difícil para él.

"¡Hmph!"

Cuando le pusieron el arnés y lo sujetaron con fuerza con las correas, su respiración se volvió dificultosa y la saliva se le desparramó tanto que sintió que no tardaría mucho en ponerse a jadear. Hoy estaba encadenado a la cama, tenía las piernas abiertas de par en par y también, un dispositivo en el pene que servía para detener la eyaculación incluso aunque ya estuviera en el límite. Ya se había acostumbrado a lo extraño de convivir con algo así por tanto tiempo, y para ser completamente honestos incluso le pareció como si su cuerpo siempre estuviera explotando de placer incluso cuando solo estaban en los juegos previos.

La cama crujió, la carne crujió, y con cada embestida, su mente se quedó tan en blanco que no tardó mucho antes de comenzar a sollozar.

Estaba increíblemente enamorado de este hombre. Ahora era un hecho.

"Ah...Ah..."

Sus sensibles membranas mucosas fueron frotadas y penetradas profundamente, haciendo que los nervios de todo su cuerpo se entumecieran con el calor que solo el Mayor parecía poder darle.

"Ruslan, escucha... De verdad soy igual que tú. Soy igual en cada maldito aspecto, cariño. Y por eso sé, que la vida sería terriblemente aburrida si llegara a perderte."

"..."

"¿Qué piensas tú de mi?"

Al escuchar esas palabras, Ruslan abrió los ojos rápidamente. Y cuando levantó la vista y sus iris azul claro se encontraron con los suyos, algo brotó en lo profundo de su corazón.

"¿Me amas?"

"..."

"Porque no tienes ni idea de lo mucho que yo te amo a ti."

Apretó sus ataduras y acercó sus labios a los suyos. Luego dijo:

"Preséntame con Sergei y con tu esposa. Y estaremos juntos, sin que nadie que no quieras sé dé cuenta de lo nuestro. Como fantasmas".

Fantasmas.

Cuando lo pensó con más cuidado, comenzó a amar lo encantadora que sonaba esta mentira.