Capítulo 15: Vecinos

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Cuando llegas a mitad de año a veces uno se pregunta qué es lo que hizo en todo ese tiempo y la respuesta es diferente dependiendo a quien le preguntes.

Un empresario tal vez te hable de todas las ventas que hizo o puedes preguntarle a un universitario y te dirá todo lo que se esforzó para terminar un ciclo de su carrera.

Depende a quien le preguntes, pero hay veces en las que una persona no tiene mucho que contar, no porque no haya hecho cosas, sino porque le da vergüenza admitir que le gusta hacer esas mismas cosas.

Siendo así, incluso la persona más normal puede tener una doble vida; sin importar si es un héroe, villano, vigilante, agente o jugador de videojuegos.

Es por eso que si vivías dentro de cierto edificio de 4 pisos por el centro de la ciudad y estabas en el segundo, podías escuchar los gritos de una persona que se estaba divirtiendo con sus amigos.

– ¡Pero regresa al carril, animal! Que no vamos a perder por tiempo.

Estas quejas provenían desde la habitación de un adolescente el cual estaba muy concentrado en su partida. Como sus padres no estaban en casa, podía subir el volumen y gritar todo lo que quería, ya que nadie aparte de su familia vivía en el segundo piso.

– Pero ponte delante, ¡¡Delante!! ¡Whiter ¿Dónde estás?!

– ¡Me estoy comiendo más minions! Si no mi ulti no funciona.

– ¡Qué vamos a perder, maldita sea! ¡Su equipo ya está en la base!

Pese a las constantes diatribas del chico hacia sus compañeros, no pudo evitar que en la pantalla apareciera una frase con luz roja y letras grandes.

DERROTA

Los tres se quejaron por haber perdido nuevamente, haciendo algún que otro comentario por debajo. Incluso por el repentino silencio de la derrota, eso no evitó que empezara una discusión en ese mismo momento.

– Otra vez, y ahora puedo confirmar que ustedes compraron su cuenta.

– ¡Cállate anormal! Ya estoy harto de escucharte chillar como una niña – dijo uno de los chicos desde el monitor. – Además no es mi culpa, Dann eligió a Ratatösk otra vez.

– ¿Y eso? Si fui el único que tumbó una torre. Que me cuentas marico. – dijo otra voz desde el monitor.

– Dann... ¡Durante 4 partidas has elegido a esa puta rata! ¡Déjala de una maldita vez, me cago en Dios!

– ¡Pues habla el idiota que puede hacer daño verdadero pero se pasa toda la partida consiguiendo súbditos!

– ¡Whiter tiene razón! No sabes manejar a Ratatösk... pero también se pasa de manco con Bakasura. Eres el peor tanque que he visto en mi vida.

– ¿Sabes que Tony? ¡Chúpame los cojones! Tú y tu skin de Centinela.

Desde ese momento la discusión mezcló las tres voces de cada jugador , los cuales no hallaban mejor forma para sacar su enojo que insultarse entre sí.

– ¡A menos tengo mayor racha de muertes! No como señor: "Bakasura es mi main pipipi" Más huevón y no la cuentas.

– ¡Que te den! ¡¿Por qué no vas a grindear a tu puta madre?!

– Coño e su madre marico, que sigue este con la misma mierda de hace rato.

– Lo único que escucho son dos perfectos imbéciles, ni más ni menos.

– ¿Y de qué se queja este mamaguevo si tarda 2 horas para conseguir la Forja Sangrienta?

– ¡¡Callaos de una puta vez!!

Spider-Hush: Lista para ser héroeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora