Empire |KookV.

Capitulo 3.

El tiempo pasó rápido y los encuentros entre el doncel y el noble se hicieron más frecuentes, cada día iban hasta el manzano para hablar de cosas que solo ellos encontraban entretenidas.

Irremediablemente los sentimientos salieron a la luz, JungKook veía en TaeHyung más que la persona que lo salvó, veía a un doncel capaz y muy hermoso, sus ojos estaban completamente puestos en el rubio.

Por otro lado, TaeHyung sentía burbujas en su estómago cada vez que el noble le sonreía o le entregaba un bonito tulipán, eran difíciles de conseguir con su situacion económica.

Había algo más, ambos podían sentirlo, pero TaeHyung no entendía el sentimiento por completo, solo sabía que quería pasar tiempo con ese hombre, a pesar de que estuviese ocultándoselo a su familia.

Cada día esperaba con impaciencia a que su padre se fuese a trabajar para poder correr al manzano y ver a JungKook, era una sensación tan linda cuando el mayor lo tomaba de la mano con delicadeza y lo ayudaba a subir a su cabello, o cuando montaban el cabello juntos.

Hoy era un día como todos, esperaba a que su padre terminase de desayunar para que pudiera partir rumbo a su trabajo en las montañas. Su padre era un hombre trabajador, fuerte, pero estaba envejeciendo, pronto no podría trabajar.

— TaeHyung, ¿hay un muchacho que te guste en el pueblo? —  Cuestionó el hombre devorando la comida que su hijo le preparó, mientras este terminaba de empacar su almuerzo. —  ¿Que tal ese chico Park Bogum? Es un buen hombre, trabajador, además te trata bien.

TaeHyung no era tonto, sabía por qué su padre se lo preguntaba, quería que el doncel consiguiera un esposo, su padre se estaba volviendo débil y pronto no traería suficiente dinero a casa.

— Padre, aún eres joven y yo también,  ¿no creés que soy demasiado joven para casarme aún? — Su padre miro en dirección a dónde se encontraba su tía y está apartó la mirada. — ¿Que sucede? — Cuestionó con temor en su voz.

Su padre negó con la cabeza, ya conociendo a su hijo decidió dejar la conversación hasta ahí.

— No es nada, los Park nos invitaron a cenar a su casa, asi que tienes que escoger un bonito vestido de los que tu madre te dejo. — Mencionó el hombre levantándose de la mesa. — No lo olvides, es mañana.

El menor asintió no muy convencido, su padre tomo sus cosas y se despidió antes de abandonar la pequeña casa, su tía seguía sin decirle una palabra, eso era realmente extraño.

ɛɱ℘ıཞɛ.

— Su majestad, todo pinta bien, la taza de robos ha bajado bastante bien, por lo que hemos escuchado de nuestros soldados infiltrados. — El pelinegro asintió escuchando atentamente mientras leía las cartas que habían sido enviadas desde el país vecino.

JungKook fue frunciendo su ceño lentamente mientras leía, su rostro cambio drásticamente a una expresión de enojo, ¿que diablos?

— Sir. Seok, ¿que se supone que es esto? ¿Por que usted no me dijo que los reyes de Wingsingtom enviaron esta carta? — Murmuró con notable enojo, y no era para menos, su consejero real lo habia literalmente comprometido con la princesa mayor de la familia real.

— Señor, nos enviaron una generosa cantidad de dinero, eso solo significa que si no aceptamos su propuesta los tendremos de enemigos o nos declararán la guerra.

JungKook se paso las manos por el cabello, no podía ser peor, el no queria casarse con esa princesa, su corazón ya tenia dueño.

— ¿Lo han anunciado ya? — Murmuró con un poco de esperanzas de que su compromiso aún no hubiera sido anunciado. — Su consejero asintió.