Bad Idea || JJ Maybank (PAUSADA).

14 | Rastreando Tesoros.

Brooke Porter.

—¿Cómo mierda se usa esto?

El día cayó y la noche empieza a aparecer. Kie dejó los papeles en su casa, discutió un poco con sus padres y partimos al Chateau, donde John B buscó el receptor GPS de Big John y nos pusimos en campaña para aprender a usarlo. Sarah estaba en casa de Topper, resulta que se escondía ahí de Ward y Rafe. Claro que a JB no le gustó ni un poco pero fingió que no era muy importante, y Kiara está enojada por la presencia de la rubia. Pope está demasiado concentrado en resolver la situación que apenas le importa.

—No, a ver, yo sé usarlo.

Pope le arrebata el aparato de las manos y lo inspecciona. Nunca antes ví uno y debo admitir que es más difícil de lo que parece. Tiene el tamaño de un celular pero es chino básico para cualquiera, más para nosotros.

—Todavía no sabemos dónde empezar —aclaro, guardando cosas que nos van a ser útiles en la mochila de Kiara—. Solo tenemos coordenadas, pero pueden estar en cualquier lado, ¿no? Dios, odio no haber prestado atención en el colegio cuando hablaban de esto.

JJ se ríe y se sienta en el sillón, dejándose caer. Es extraño verlo simpático después de lo mal que lo hice sentir —No pongas esa cara.

Me detengo en seco y lo miro incrédula, confundida incluso por su buen humor tan repentino —¿Qué cara?

—De enojo.

—No estoy enojada, estoy apurada.

—¿Cómo te sentís?

Sigo con lo mío sin responder. En el bolsillo grande guardo un encendedor, una linterna, una soga, dos botellas de agua...

—J, no es un interrogatorio —Kiara lo frena, acercándose de brazos cruzados—. Se siente bien, ¿no la ves?

—¿No puedo preguntar? ¿Me vas a pegar, como Harry?

Levanto la cabeza de golpe y ruego para que mi hermano no lo haya escuchado —JJ, no empieces.

Me tardo un segundo en darme cuenta de que está un poco drogado. Odio que haga eso. Piensa que así se puede relajar, pero estoy segura que no es la solución a nada. No lo culpo porque también era mi costumbre, pero no significa que esté bien.

—¿Te molesto? —pregunta con sarcasmo.

Está logrando irritarme y si, me está molestando demasiado. Soy lo suficientemente buena como para ignorarlo y no decirle nada. Prefiero evitar un conflicto en estos momentos.

—No entiendo por qué haces esto, JJ. Honestamente no lo entiendo. Estamos a punto de encontrar a mamá y desapareces para ponerte a fumar eso—murmuro apenas alto–. Es importante para mí, ¿no te importa?

—No es que no me importa, Brooke.

–¿Y entonces? Estuve para vos cuando necesitabas ayuda o alguien que te acompañe.

—Esta es mi forma de estar.

Niego con la cabeza, mordiendo mi labio inferior mientras me contengo para no decir muchas cosas que pienso —Está bien, supongo que de ayer a hoy podes cambiar mucho.

—No te voy a abrazar si es lo que esperas —ataca con arrogancia—. Eso era cuando pensé que me querías.

Chasqueo la lengua, un poco dolida —J, no digas eso, nunca dije que no te quería.

—Tampoco dijiste que sí me queres.

—No tengo tiempo ahora para esto, pero no estaría demás que no te portes como un nene de cinco años.