Capítulo 1: La Brecha se Abre

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POV FRAY

¿Crees que puedes escapar de mi?

Allí está, delante de mi. Sus colmillos deformes y llenos de saliva sanguinolenta se curvan en su boca para formar una sonrisa tétrica digna de una película de terror.

No importa cuanto corras, siempre te seguiré.

Saltando en mi dirección usando sus 4 patas traseras grotescamente musculosas y crecidas. Esquive ese ataque saltando a un lado y le lance una de mis dagas arrojadizas que se estrelló contra su piel arrugada y de color verde menta sin siquiera causar daño.

¿Eso es lo mejor que tienes?, ¡Patético!

Se detiene en seco usando sus dos largos y delgados brazos delanteros como anclas que clava en el suelo. Se gira en mi dirección y sonríe de nuevo. Levanto mi espada larga y lanzo un tajo a su cara que es bloqueado por uno de sus brazos anormalmente largos para luego golpear mi costado con el otro de esos brazos enviando mi cuerpo a estrellarse contra una pared de madera que atravesé con violencia.

Resistirse es inútil, tu destino se selló en el momento en el que me conociste.

Veo su sonrisa tétrica nuevamente, el esta sobre mi cuerpo colapsado. Veo la burla en sus deformes pares de ojos azules mientras sus ojos rojos me miran con el hambre de un depredador que no a comido en mucho tiempo.

Te lo dije, es inútil resistirse ante lo inevitable.

Hago una última resistencia, empuño mi mejor daga y trato de apuñalar su cara con ella. El se ríe abiertamente de mi mientras mi daga se acerca a su cara. En cámara lenta veo como mi daga está cada vez mas cerca y las esperanzas vuelven a mis ojos.

¡Ingenuo!.

Mi daga que estuvo a medio centímetro de tocar su piel fue brutalmente arrancada junto a mi mano de un mordisco super rapido de ese ser. Hice todo lo que pude para no gritar pero la manera en la que mi mano fue arrancada, me impido contenerme y grité lo más fuerte que pude.

¡Hermoso y delicioso, un deleite para mis oídos!.

Burlonamente aquel ser me sostuvo con sus extremidades delanteras largas y llenas de púas al final de estas, púas que se clavaron en mi carne haciéndome gritar más. Aquel ser solo se reia de mi mientras masticaba de forma lenta y pausada mi mano con la boca abierta dejándome ver como lentamente mi mano se trituraba. 

¡El sabor de la carne de aquellos desesperados es el mas delicioso de los manjares!.

Finalmente mi mano fue tragada y su mandíbula se abrió de forma grotesca mostrandome filas y filas de dientes ensangrentados listos para devorar mi carne. Cerré los ojos esperando lo peor, sentir vívidamente como las gotas de saliva sanguinolenta cayeron sobre mi cara y mis ojos se abrieron en contra de mi voluntad nuevamente.

¡Quiero que estés desesperado hasta el final!.

Aquella cosa clavo las púas de sus extremidades delanteras en las esquinas de mis ojos, obligando a mis párpados a abrirse. El dolor fue tal que mis cuerdas vocales explotaron por la tensión que mis gritos las obligaron a resistir.

¡Los gritos de los humanos son los más deliciosos de todos!.

Lentamente su boca se acerco a mi cara, pude observar la forma de cada diente y de cada protuberancia palpitante en su boca asquerosa llena de sangre. Hice todo lo que pude para librar mi cuerpo del agarre de dos de sus extremidades traseras. Siendo mis esfuerzos inútiles ante la gran fuerza del ser que solo se reia de mi.

El Hombre en la BrechaWhere stories live. Discover now