CAPITULO 17-PLAYA ARENOSA

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"Llegamos varios días antes. ¿Quieres ir a algún lugar primero o no?"

Si bien el casamiento de On era un acontecimiento que se daría en poco tiempo, Day y Mhok habían llegado mucho antes, Day pensó en las imágenes de Songkhla que aún guardaba en su memoria, para componer un mapa de lo que quería hacer que no hubiera hecho aún.

"Vamos a encontrar algún lugar cerca de la playa, quiero ver el atardecer desde la playa."

Los primeros dos días de la llegada, se quedaron en la ciudad, no muy lejos de la estación de tren, porque al principio aún le costaba a Day encontrar el principio y el final, pero en conclusión, tuvo que permitir que Mhok lo ayudara para encontrar un lugar que no quedara lejos tanto de la playa, como del lugar donde se haría a cabo la boda.

Mhok llevó al menor en autobús a la playa que quedaba camino a la boda. Reservaron en un lugar muy caro, el más cercano a la playa. Para cuando llegaron ya era tarde, hasta que encontraron algo para comer, y comprar algunos bocadillos por si querían comer más tarde. El sol casi se estaba poniendo.

"Vayamos a jugar al mar."

El joven invitó a su novio sacudiendo su mano, con un gesto similar al que el otro siempre hacía, se escuchaban las risas de jóvenes jugando en la playa. Y al final, aunque Day había dicho que quería jugar en el agua, decidió sentarse en el borde mientras oía las olas y mojaba sus pies, observando como el color del cielo iba cambiando gradualmente uno a uno.

Desde que se había reducido su visión, observar los colores del cielo se habían convertido en su nuevo hobbie, uno que terminó haciendo como un hábito, porque el cielo le daba colores que, aún con su problema de córnea, podía ver borroso; pero aún podía distinguir lo suficiente e imaginarlo, por ejemplo, ahora un hermoso azul comenzaba a ponerse rojo.

"¿Sabías que desde que empecé a no ser capaz de ver, tengo la habilidad de saber qué tipo de personalidad tienen las personas sólo escuchándolos hablar?" empezó a decir Day.

"De veras."

"No es verdad."

La voz de Mhok se oía bastante interesado en lo que decía, haciendo que Day accidentalmente comenzara a reír fuertemente después de responder, ¿quién tendría un super poder cómo ese? Sólo si existe la magia, una cosa es tener la habilidad de ver lo bello en cada grieta de la vida, aunque no puedas verlo con tus propios ojos.

"Estaba a punto de preguntarte qué deduces de escuchar mi voz," murmuró Mhok.

"Que un novio asi no es bueno, y que los niños malos como este deben ser castigados." El menor pretendió quejarse, antes de que el mayor se acercara a él y besara su mejilla.

El menor quedó sorprendido y pensó que alguien los veria, entonces rápidamente alejó su rostro y miró a su alrededor, pero se dio cuenta que, aunque observara, no podia ver a nadie.

"Hombre malo," dijo con un chasquido. "Me avergüenzo de esta persona."

"¿Por qué te avergüenza? Yo no lo estoy."

"Bueno, no estoy avergonzado, pero estoy avergonzado. Oh... ¿cómo te es tan dificil entender?"

Se quejó, pero Mhok sólo comenzó a reír. Entonces Day recogió su teléfono celular y se lo pasó a Mhok, el cielo comenzaba a ponerse cada vez más rojo oscuro.

"Por favor, toma una hermosa foto del cielo y luego nos tomamos una selfie." dijo Day.

"Si luego en secreto estarás mirando mi cara de cerca a escondidas, sólo dimelo, no seas timido." Mhok se burló de Day, y él golpeó su hombro.

The Last Twilight | Esp TradWhere stories live. Discover now