ONE-SHOTS LOKI LAUFEYSON Y VARIOS

¿Humana? (Parte II) - Loki

Pasaron algunos minutos u ¿horas? Simplemente perdí la noción del tiempo al estar en aquel espacio reducido.

Lentamente saqué el teléfono de mi bolsillo y prendí la linterna. Repasé con mis ojos las instrucciones del papel que me dio Jane.

Bueno era un pequeño mapa, hecho a mano, de la nave. Útil ha decir verdad.

Abrí con cuidado la caja cuando ya no escuché más sonidos que las turbinas de la nave.

Mantuve la linterna prendida ya que el lugar estaba completamente oscuro. Según el mapa para ir a la bodega donde estaban las armas debía caminar algunos pasillos. Pero no es fácil si te quieres ocultar.

Doblé el papel y lo guardé en el bolsillo para comenzar a caminar alumbrando a mi alrededor para visualizar donde pisaba. Fue una completa Odisea pero llegué a la puerta. Tomé la perilla y jalé.

No se abrió.

Volví a jalar y seguía sin abrirse.

Guardé mi teléfono en el bolsillo de mi pantalón y tomé con ambas manos la perilla y jalé con todas mis fuerzas.

No se abrió tampoco.

—Estúpida puerta. — susurré por lo bajo.

Intenté unas veces más hasta que se me ocurrió tomar mi teléfono y alumbrar a unos cuantos centímetros de la puerta. Había un panel de control con números para poder abrirla, una corazonada me hizo sacar el papelito y me sentí idiota.

En el papel estaba identificado como se abre cada puerta y las contraseñas.

Me hubiese ahorrado demasiado tiempo.

Puse el celular sobre la caja que protegía el panel para saber que números pulsar, tomé el papel y comencé a digitar los números.

Unos pitidos indicaron que la puerta ya se encontraba sin seguro. Tomé el teléfono apagando la linterna, guarde el papel y abrí la puerta para salir.

Una vez afuera verifiqué que no exista nadie allí. Parecía que la nave tenía dos pisos: las bodegas y las habitaciones en la planta baja y los controles de la nave en la segunda.

Yo debía permanecer en la primera planta.

Me escabullí por el corredor mientras sacaba el papel y veía el mapa. Llegué hasta el lugar donde estaban las armas, solo debía poner la contraseña y...

Sentí algo en la parte posterior de mi cabeza. Un arma.

Ay... Por Odín...

Alcé mi manos mientras sentía cómo mi cuerpo temblaba. Me iban a matar y ni siquiera había visto a Loki todavía.

—¿Quién eres? ¿Qué estás haciendo aquí?

Escuché la voz de una mujer. Era fría y sería.

No respondí. Sentía mi garganta seca y mis ojos llorosos. El miedo me estaba invadiendo.

—Yo... No soy ninguna amenaza. Por favor, no... Me mate.

—Gírate, lentamente.

Sentí como el arma se distanciaba de mi cabeza y giré tal y como me lo indicó. Abrí los ojos y pude ver que era la señorita Romanoff.

—Identificate, niña.- demandó la pelirroja.

—S-Soy la niña que hizo prácticas en la Torre Stark y bueno... Ya no soy tan niña.— solté una risa nerviosa por lo bajo.

La mujer bajó el arma de inmediato y me miró curiosa como si estuviese rebuscando en su memoria.

—¿T/N? Wow... Has crecido desde la última vez que nos vimos. ¿Cuántos años tenías? ¿trece?