𝙍𝙀𝙈𝙀𝙈𝘽𝙀𝙍 𝙏𝙃𝙀 𝙏𝙄𝙈𝙀 || Gwen Stacy x Fem! Oc

☄ Cap 3 ☄

Y ahí se encontraban de nuevo ambas chicas, en la azotea de aquella institución.

- ¿Estás lista? Tú vigilarás mientras yo intento hablar con Miles.- Explicó Gwen, mirando hacia Aeth fijamente.

- Claro, no te preocupes. -

Y sin más se adentraron otra vez ahí, buscando por todos lados la presencia de aquel muchacho, hasta que la rubia pareció verlo a lo lejos. Le hizo una seña a la castaña para que vigile.

Aeth pov

Vale, sólo tengo que vigilar, no sería muy difícil, o al menos eso pensaba hasta darme cuenta que estaba rodeada de un montón de gente, distinguir un profesor sería difícil.

Estaba tratando de buscar algo sospechoso hasta que mis oídos captaron la conversación de Miles y Gwen.

- Espera, ¿tú nombre es Gwanda? -

- Uh sí, es- soy africana, sudafricana, pero no tengo acento porque me crié aquí. - Le sonrió nerviosa, seguramente le estaba mintiendo. Pero lo que más me llamó la atención era que Miles estaba sudando, pero literalmente a chorros. ¿Era su primera vez hablando con una mujer?

Totalmente de la nada, cortó a Gwen en lo que estaba diciéndole para colocar su mano en su hombro y decirle "Hey" con el tono más extraño que había podido escuchar. La cara de Gwen era un cuadro, se veía aún más confundida que yo.

Pero lo peor de todo es que al parecer su mano se quedó enganchada a una parte de su cabello, parecía ser también su primer día siendo Spiderman.

Ambos empezaron a forcejear, Gwen trató de tirarlo al suelo para librarse de su agarre, lo que terminó en un desastre. Corrí a ayudar a Gwen, hasta que me di cuenta de que en la mano de Miles habían varios mechones del pelo de Gwen.

Mierda.

:･ﾟ✧:･.☽˚｡･ﾟ✧:･.:

Ahí estábamos los tres, en la enfermería, Gwen parecía no tener ninguna expresión en su rostro, parecía aun en una especie de trance. Después de que el chico se disculpase varias veces terminó yendose.

Ahora la parte derecha de su cabello tenía la marca de la mano de Miles, le habían rapado esa parte.

- Gwen ¿Todo bien? - Obviamente todo no estaba bien, pero con mi llamada pareció salir un poco del trance.

- ¿Cómo voy a estar bien? Mira mi pelo, además de eso estoy atrapada en un universo que ni conozco y ni se sí voy a poder salir. -

Tenía toda la razón, lo único que acerté hacer era abrazarla, cómo seguía sentada en aquella camilla pude acunar su cabeza en mi pecho.

-Lo entiendo, pero no te preocupes, te prometo que saldremos de aquí. - Le sonreí, tratando de calmarla, ella sollozaba un poco, silenciosamente.

Al minuto o así se separo lentamente, limpiando sus propias lágrimas de su rostro.

- Ah, y también puedo intentar arreglarte ese corte de pelo, si quieres claro. -

- Peor que cómo está ahora es difícil, mientras no me dejes calva me conformo. -

Sonreí un poco y agarré la maquina para rapar que había allí y me puse manos a la obra.